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Poder

28 de Septiembre de 2009

Mientras la armada chilena planea enorme buque, ministro peruano pide suspender maniobras

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THE CLINIC PRESS

“Dice que un país del norte invade marítima y territorialmente a Chile, acude a la ONU pero no puede hacer que el país agresor desista”. Así describió el ministro de defensa peruano Rafael Rey el Ejercicio Salitre 2009, que realizará próximamente el Ejército de Chile, hoy en una rueda ante la prensa local. El miembro del gabinete de Alan García sostiene tras cartón que es evidente que el misterioso país norteño que agrede a Chile en el ejercicio sería Perú. Acota al respecto: “Por supuesto que esto es ofensivo para la imagen que tiene Perú, porque Perú nunca ha sido agresor. Creo que como ministro tenía el deber de responder a la prensa (sobre estos ejercicios)”. Rey ya había pedido hace algunos días que se suspendieran las maniobras chilenas, aclarando que era una solicitud que realizó a “título personal”, cuando los periodistas le consultaron por el tema.

Hoy Rey ha reiterado su planteamiento: “Los peruanos suspendimos unas operaciones que íbamos a hacer en el sur en noviembre; lo decidimos así a fin de evitar algún sentimiento de molestia en Chile. La verdad es que a título personal apreciaría que en reciprocidad hubiese una acción igual”.

El Ejercicio Salitre 2009 se realizará en Antofagasta, conjuntamente entre tropas chilenas y de Estados Unidos, Brasil, Francia y Argentina— que simularán ser parte de una operación para presionar a un país ficticio (Tarapacá), que no cumple con los tratados internacionales.

CASI UN PORTAAVIONES

    Un “Buque de Proyección Estratégica”, similar al de la fotografía, planea construir la Armada en Talcahuano.

En tanto el recién asumido comandante en jefe de la Armada de Chile, almirante Edmundo González Robles, acaba de inaugurar su mando anunciando un ambicioso plan de construcciones navales que piensa implementar en los propios astilleros de la institución. El proyecto incluye un “Buque de Proyección Estratégica” (BPE), el mayor navío de combate construido jamás en el país. “Estamos hablando del buque más grande que construirían los astilleros de Asmar de Talcahuano, con 9.000 toneladas, 155 metros de eslora y con capacidad, aparte de la dotación misma del buque, de llevar a 500 infantes de marina, tres helicópteros pesados –para 20 personas cada uno- y lanchas de desembarco –para 50 personas-“, declaró el almirante en reciente entrevista a El Mercurio de Valparaíso.

Los BPE son armas ofensivas, que, dependiendo del diseño, pueden costar entre $100 mil millones y $350 mil millones, sin considerar el costo de equipar el buque con helicópteros, lanchas de desembarco y diversas armas.

Los BPE están especialmente diseñados para lanzar desembarcos aero-navales en contra de costas hostiles. También, como función secundaria, se pueden utilizar para realizar operaciones de apoyo en caso de catástrofe natural, punto que el almirante intenta resaltar en la entrevista citada: “Estamos hablando de un buque que si bien en guerra, en conflicto o en crisis puede cumplir un rol preponderante proyectando a la Infantería de Marina sobre tierra en forma dinámica y rápida, también puede tener un rol en caso de catástrofes naturales o causadas por el hombre”.

    Otro ejemplo del tipo de buque que planea construir la Armada.

Entre los planes del almirante González también se encuentra la construcción de patrulleros de alta mar (equivalentes en tonelaje a una corbeta) y barcazas medianas de desembarco.

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