Secundarios rechazan diálogo con Lavín

Foto Agencia Uno

Las últimas declaraciones de la semana del ministro Lavín, junto a cuatro alumnas del Liceo Carmela Carvajal de Prat demandando a su centro de alumnos por estar en toma y no poder asistir a clases, prometieron vuelta a clases para hoy lunes y vuelta a la normalidad después de dos semanas de paros y protestas estudiantiles.

Sin embargo, en lo práctico el accionar del ministerio tuvo que buscar una salida de emergencia para esos alumnos preocupados de rendir la PSU, habilitando lugares alternativos para ellos, mientras sigan los paros y tomas de un movimiento que no quiere echar pié atrás.

Durante la tarde de ayer, los estudiantes rechazaron la invitación de Lavín de sumarse a una mesa de trabajo desde hoy a las 11:00 horas y en su lugar llamaron a un nuevo paro nacional para este martes. “Rechazamos la mesa de trabajo porque creemos que es una respuesta bastante ambigua, sin respuesta concreta a lo que nosotros pedimos y porque hace alusión a una mesa de trabajo metropolitana, no nacional. No está contemplado el petitorio regional”, dijo Freddy Fuentes, vocero de la Femes.

La decisión fue tomada este sábado luego de realizar una asamblea nacional, con representantes de todas las regiones de Chile, quienes afirmaron que el movimiento seguirá movilizado hasta recibir una propuesta concreta. “Queremos una repuesta que sea resolutiva con todos los estamentos y que incorpore a las regiones. Este movimiento es nacional, no sólo de Santiago”, señaló Fuentes, también presidente del Centro de Alumnos del Liceo de Aplicación.

Según los estudiantes, la carta entregada la semana pasada a los estudiantes no hacía alusión directa a varios puntos del petitorio escolar de la Femes y los Establecimientos Autónomos Movilizados. Por eso, seguirán en asambleas para coordinar los pasos a seguir y el posible llamado a marchas en todas las regiones para el día martes.

No a los desalojos

Pese a haber decidido empezar a desalojar colegios durante este fin de semana, en una reunión entre el ministro de Educación, el de Interior, Rodrigo Hinzpeter, y el propio Presidente Piñera el viernes pasado en La Moneda, el Mineduc tuvo que habilitar estos lugares de emergencia para los alumnos que no estén de acuerdo con las movilizaciones.

Desde la Femes, la actitud del ministro Lavín estos últimos días, diciendo que iba a mejorar la educación “a las buenas o a las malas” y apoyando a las cuatro alumnas de 1º medio del Carmela Carvajal, no es más que una estrategia para dividir el movimiento.

Según Fuentes, las señales del ex presidenciable UDI han sido en orden contrario al supuesto diálogo que promueve públicamente el titular de Educación.

Ayer se reunió con un alumno que resultó quemado por una fogata realizada al interior de un colegio en toma y ocupó el ejemplo para demostrar “lo que queremos evitar” en estas instancias.

“Esta es una estrategia burda del ministerio para dividir el movimiento, apareciendo con personas que no son representativas ni tienen el apoyo mayoritario de los alumnos. A nosotros eso nos dice que no hay ánimo de trabajar, así que seguiremos en paro”, dijo.

Junto con visitar al alumno herido, Lavín dijo que los desalojos es decisión de los alcaldes de cada comuna, pero recordó que los municipios están dejando de percibir 2.300 millones de pesos de subvención por los días que han faltado clases, el mismo argumento que habría tenido el edil de Santiago, Pablo Zalaquett, en una reunión en el Mineduc la semana pasada, donde propuso desalojar a los colegios movilizados.

Por otra parte, el vocero de la Femes anunció que para el próximo sábado se realizará una nueva Asamblea Nacional, esta vez en Valparaíso, para decidir los pasos a seguir.

El Colegio de Profesores, en tanto, le pidió al Arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, interceder frente al Ejecutivo e impedir los desalojos anunciados, en vez de una mejor capacidad de diálogo con todos los actores del sistema educativo que permanecen movilizados: secundarios, universitarios, profesores, apoderados y rectores de universidades.