Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Opinión

22 de Septiembre de 2011

El mapuchómetro

Ilustración de Marcelo Calquín “¿Qué haces por acá Pedro?”, me lanza Rodrigo, un ex compañero de liceo y miembro del Club de Rodeo, con quien me encuentro en las fondas de la SOFO en Temuco. Un punto bueno para él. “Lo mismo que tú supongo; disfrutando en familia del domingo”. Dos puntos buenos para mí. […]

Pedro Cayuqueo
Pedro Cayuqueo
Por

Ilustración de Marcelo Calquín

“¿Qué haces por acá Pedro?”, me lanza Rodrigo, un ex compañero de liceo y miembro del Club de Rodeo, con quien me encuentro en las fondas de la SOFO en Temuco. Un punto bueno para él. “Lo mismo que tú supongo; disfrutando en familia del domingo”. Dos puntos buenos para mí. “¿Y comiendo empanadas?, ¿Y no que eras taaaan mapuche para tus cosas?”.

Tres puntos buenos para él. “Sí, es mi forma de solidarizar con vuestro Rey cautivo en Francia. ¿No es por ello que están todos ustedes zapateando por aquí?”. Cuatro puntos buenos para mí. “Jajaja… igual es bueno verte, sobre todo por acá”, me dice. “Lo mismo digo yo. Y salúdame a tu viejo de mi parte”, le respondo. “En tu nombre… ahh y no vayas a escribir sobre mí. Siempre leo tus columnas, te lo advierto… Jajaja”. “No, cómo se te ocurre… Jajaja”. Fin de la corrida.

A estas alturas no sé qué es más chistoso; si un chileno que te dice cómo debes comportarte en las fiestas de septiembre o bien un mapuche haciendo lo mismo pero desde la trinchera opuesta. Ambos, guste o no, escudriñando en tu porcentaje de mapuchidad. De los primeros, espero sean especies en extinción. O cuando menos, en franca y oportuna retirada. Y es que cada día más personas asumen que la interculturalidad, más allá de los lugares comunes y la “tolerancia”, debiera ser bienvenida siempre y en todo lugar. Sobre todo en países provincianos como Chile, cuyos límites geográficos (y también mentales) van desde el desierto más seco a la inexplorada Antártica. Sea que compartas tus fiestas patrias con un mapuche, un palestino o un inmigrante coreano, es un hecho que el cruce cultural los enriquecerá a todos. No lo sabremos los mapuches, que desde siempre las hemos preferido rubias. Hablo de la cerveza, por supuesto.

¿Puede un mapuche disfrutar del 18 de septiembre? Lanzo la pregunta en Twitter y cientos de “tuiteros” mapuches o pro mapuches se lanzan en picada contra tamaña herejía de este columnista. Si el punto es que se trata de una fiesta “no mapuche” ¿qué diablos hacen usando Twitter? ¿O bien un occidental computador? Simpático resultó constatar que muchas de las respuestas más radicales a la citada consulta nos fueron enviadas no vía werken (mensajero) a caballo, sino “vía Twitter for BlackBerry®”. Hasta donde sé, pocos mapuches comunes y corrientes –aquellos cuyas tradiciones dicen ellos “proteger” a ultranza- transitan por la vida tuiteando desde el campo con sus BlackBerry. Y mucho menos preguntándose qué tan mapuche resulta o no devorarse una empanada en estas fechas. En materia de festividades y mientras no exista un “Manuel del Peñi Carreño”, si no puedes contra ellos la consigna pareciera ser ¡súmate!

“Mapuchómetro”. Así bautizó Pedro Melinao, insigne caricaturista mapuche, a la maquinita que mide tu porcentaje de mapuchidad. O más bien a la acción de andar paqueando a los miembros de tu propio grupo étnico. “La maquina no existe, pero muchos la utilizan en estos días de fiesta chilena al monitorear, como viejas cahuineras, el comportamiento de sus pares”, me comenta mientras devora y sin mayor culpa un anticucho tras otro. “El tradicionalismo es conservador por naturaleza. ¿Quiénes son los que defienden a rajatabla las tradiciones chilenas? ¿Dónde se realiza la “Semana de la chilenidad”? ¿En Cerro Navia o en Vitacura? Es paradójico, pero muchos mapuches que se dicen progresistas o revolucionarios, en esta materia nada tienen que envidiar a sus pares de RN o la UDI”, reflexiona en voz alta. Vaya si tiene razón Melinao. Por lo pronto se nos viene el dieciocho chico. Y luego octubre, el “mes de la Mapuchidad”, con sus marchas, actos culturales y ceremonias por doquier. Desde ya, todos invitados.

Notas relacionadas