“Obama Fried Chicken”, lo último en “fast food” chino

En el mundo publicitario es cada vez más popular la técnica de utilizar caras conocidas. China, como siempre, ha ido más allá. La nueva cadena fastfood del gigante asiático se llama Obama Fried Chicken.

La inauguración del establecimiento tuvo lugar la semana pasada en Beijing. Sobre el retador eslogan en chino, cuya traducción diría más o menos “Somos guays, ¿o no lo somos?”, un sonriente Obama de rasgos ligeramente asiáticos invita a comer el tradicional pollo frito al estilo americano.

Antes de tener su propia versión de la cadena, ya habíamos visto al Presidente promocionando el nuevo plato estrella de pescado en un anuncio que KFC emitió durante tiempo limitado en Hong Kong; justo antes de la visita del propio Hu Jintao a Estados Unidos y con un polémico eslogan que rezaba: “El cambio es bueno”.

Con algo más del 60% de popularidad en la segunda potencia mundial, Barack Obama se ha convertido en todo un icono publicitario para los chinos y el nuevo punto de mira en su afán imitador. El buen funcionamiento de sus 3700 establecimientos y un tercio del total de las ganancias han reafirmado a Btw Yum Brands, dueña de KFC, en su apuesta por China.