ONG Reporteros Sin Fronteras exige a Chile que renueve pasaporte al periodista Hernán Uribe

(RSF) denunció hoy que las autoridades se niegan a renovarle el pasaporte al periodista Hernán Uribe por un “delito de opinión” que data de hace 61 años, y exigió al Gobierno que ponga fin a esa situación.

Uribe, de 88 años de edad y conocido según RSF por “su compromiso político y su combate a favor de la profesión periodística”, necesita ese documento para asistir los próximos 1 y 2 de septiembre en Caracas al XI Congreso de la Federación Latinoamericana de Periodistas (Felap), organización de la que fue cofundador en 1976.

“Este episodio sería simplemente absurdo si no atentara contra la libertad de desplazarse de un hombre cuya profesión es informar”, lamentó la ONG, para la que “el pimpón burocrático ya ha durado bastante y el Gobierno, responsable en él, debe ponerle fin sin demora”.

El periodista trabajaba para el diario “Democracia” cuando se le condenó en 1951 a arresto domiciliario por injurias al entonces jefe del Estado, Gabriel González Videla, y según la ley chilena, ese delito prescribió a los cinco años.

En junio de 2006, cuando Uribe intentó renovar su pasaporte para asistir a la conmemoración del XXX aniversario de la Felap, el Servicio de Registro Civil e Identificación (SRCEI), encargado de la expedición de pasaportes, se lo negó y le ordenó demostrar que había purgado la pena.

El periodista obtuvo finalmente el documento gracias al apoyo del gremio, pero seis años más tarde, según Reporteros, se ve en la misma situación porque la Policía de Investigaciones y el SRCEI se achacan mutuamente la responsabilidad de haber perdido esos papeles que reflejaban la prescripción.

“¿Acaso debe justificar un pasado judicial, prescrito hace tanto tiempo, cada vez que expiren sus documentos de identidad?”, se preguntó la organización, que exige que Uribe pueda viajar a la capital venezolana en septiembre.

RSF destacó además que la seguridad de los periodistas sigue siendo un reto de actualidad ahora que se reanudan las movilizaciones estudiantiles, e hizo un llamamiento a la responsabilidad a los diferentes actores, en especial a las fuerzas del orden, acusadas con frecuencia “por sus excesos”.