Carlos Ripetti ganó: coronel Juan Irigoyen amonestado por mal uso de auto fiscal

El ex carabinero Carlos Ripetti -famoso por salir en pelotas de una comisaría- se la cobró. La semana pasada, la subdirección general de los pacos ingresó a la Contraloría el oficio que determinó sancionar al coronel activo Juan Irigoyen por el uso ilegal del auto institucional para llevar a sus niños al colegio.

Los verdes -de acuerdo al documento que publica The Clinic Online- le aplicaron a Irigoyen una “amonestación” en su hoja de vida, que en los hechos le bajará la nota, cuestión que le impediría ascender al generalato, al menos por ahora.

La historia de Ripetti posee todos los ingredientes de un sainete y de fina venganza.

Sucede que el ex uniformado fue pasado a retiro en agosto de 2011. Al salir de la 39º Comisaría, Ripetti abandonó la dependencia en calzoncillos. Sus compañeros lo comenzaron a perseguir en las patrullas para tomarlo detenido por su hazaña, la que fue filmada íntegramente por un equipo de Televisión Nacional. El hecho llegó a tanto que el general jefe de la Zona Metropolitana de los hombres de verde, debió intervenir.

A las pocas semanas, Ripetti aplicó el viejo adagio de la mafia italiana: “la venganza es un plato que se come mejor frío”. El ex paco se subió a su moto con una cámara fotográfica y se instaló en las afueras de un colegio de la comuna de Macul. Esperó pacientemente hasta que llegó el auto de la dirección nacional de Carabineros, manejado por un chofer del general Gustavo Adolfo González Jure, quien usaba el vehículo para llevar y traer a sus hijos al colegio.

Con las pruebas en la mano denunció el hecho a la Contraloría, organismo que ordenó a Carabineros realizar un sumario administrativo con el fin de establecer las responsabilidades funcionarias.

Pillín pillín

Los verdes intentaron por todos los medios evitar que Ripetti no ganara la batalla. En varias oportunidades enviaron oficios para la toma de razón a la entidad revisora de los actos del Estado, donde resolvían cualquier cosa, menos una sanción.

A la Contraloría finalmente le empelotó este intento de pasarse por el aro las órdenes impartidas y les dio una plazo perentorio en mayo pasado, a través de un duro dictamen.

Finalmente, lo verdes no tuvieron más remedio que bajar el moño y aplicar una medida disciplinaria por escrito en la hoja de vida de Irigoyen.

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