Caso sobreprecios: correos revelan conflicto de interés de asesor de Piñera

Foto: UDISANTIAGO

El pasado 17 de octubre Jorge Alessandri Vergara, asesor del Presidente Sebastián Piñera, se sentó ante el fiscal Centro Norte Jaime Retamal para prestar declaración como testigo en el llamado caso sobreprecios. Lo anterior debido a la existencia de una serie de correos electrónicos que recibió del abogado Sergio Carvajal, patrocinante de la empresa Sectrade, que asegura no haber podido participar en la licitación de los detectores de droga, por los cuales el gobierno pagaría un 400 % demás, debido a una serie de anomalías.

Alessandri, cuyo cargo específico es subdirector de Programación de la Presidencia, fue inquirido por el perseguidor penal por este cúmulo de mails, pues revelan un vínculo con Carvajal, quien a su vez fue socio de Manuel Cacho, el ex jefe jurídico de este concurso público y que debió renunciar porque no informó al subsecretario del Interior Rodrigo Ubilla de esta relación, tal como lo publicó The Clinic Online el pasado 13 de noviembre. De hecho Carvajal, antes que a mediados de agosto se otorgara la licitación ya enviaba correos a Cacho, haciendo reclamos similares a los enviados a Alessandri.

Hay que recordar que Sectrade pertenece a los hermanos Francisco y Fernando Cordero, ambos hijos del ex director de Carabineros Fernando Cordero Rusque, quienes representaban en Chile para esta licitación al empresario estadounidense de origen argentino, Hugo Federico. Todos antes de este concurso habían trabajado –antes de separarse comercialmente- con el dueño de Tecnodata, Alfredo Giacomán que ganó la licitación. Este último se encuentra querellado por el Consejo de Defensa del Estado (CDE) ante la fiscalía.

Jorge Alessandri Vergara y su hermano Felipe, quien trabaja igualmente en La Moneda, son sobrinos nietos del ex presidente Jorge Alessandri y bisnietos de Arturo Alessandri, el León de Tarapacá y con vínculos familiares con diputados del mismo nombre.

¿Cóctel, carrete o negocios?

Las comunicaciones digitales llegaron a la bandeja de entrada de Alessandri en los días posteriores a que renunciaran una serie de funcionarios de Interior, luego que CiperChile revelara las irregularidades. A saber, el ex fiscal Alejandro Peña, el jefe de proyectos, Felipe Baeza, el ex analista de la ANI y funcionario de la unidad de Crimen Organizado Carlos Álvarez. Al anterior su sumó Cacho el 14 de noviembre.

Alessandri, en la declaración a la que accedió The Clinic Online, aseguró que conocía a Carvajal “socialmente”, pero agregó un detalle: que ya había recibido llamados de este último en mayo y julio de 2012, cuando la licitación estaba en pleno desarrollo.

A renglón seguido explicó que debido a su cargo recibe cientos de mails que van desde denuncias hasta felicitaciones, ya que su nombre y dirección digital aparece en la página de la presidencia.

Según su versión, una vez recibidos los correos, se los reenvió de inmediato al entonces ministro secretario general de Gobierno, el UDI Andrés Chadwick, actual titular de Interior, como también a su jefa directa María Irene Chadwick. Chadwick, en tanto lo hizo llegar a Rodrigo Hinzpeter, quien abandonó la jefatura de gabinete para irse a Defensa.

“Este abogado (Sergio Carvajal) me comentó que su representada (Sectrade) necesitaba contactarse con alguien de Interior, para ver temas de la licitación de ‘estadio seguro’”, derivando la información al polémico Cristian Barra, quien labora en la Intendencia.

Ubilla el denunciante

Sin embargo, Alessandri reconoce además, vínculos con los Cordero, “porque mi función es indicarle al Presidente protocolarmente, quiénes son las personas presentes con los cuales él puede interactuar”.

“Y nos toca interactuar con ellos en la ceremonia del 27 de abril de cada año por su calidad de hijos del general director Cordero, que también está”, explicó Alessandri al fiscal Retamal.

Hay cosas que llaman la atención. Por ejemplo, en el correo del 10 de octubre, Carvajal trata coloquialmente a Alessandri: “Jorge, van las respuestas que Sectrade hizo, para permitir una flexibilización de bases que permitiera la flexibilización de la compañía”.

Además, al igual que el renunciado Cacho nunca hizo presente que conociera a Carvajal. Y un detalle: quien puso en conocimiento estos correos a la fiscalía fue el propio subsecretario del Interior Rodrigo Ubilla.

Conspiración encubierta

El abogado Ernesto Olivares, quien representa ante la fiscalía al dueño de Tecnodata Alfredo Giacomán, luego de leer los correos, presentó de inmediato un escrito pidiendo diligencias al perseguidor Jaime Retamal.

En el documento al que accedió este diario, Olivares asegura que durante el proceso de licitación “se desplegaron una serie de actuaciones dirigidas derechamente a sabotearlos o hacerlos fracasar”, aludiendo a Carvajal, Cacho, los hermanos Cordero y Hugo Federico.

A continuación dirige sus dardos a Jorge Alessandri: “El problema con este último personaje Sr. Fiscal, es que en su declaración de fecha 17 de octubre de 2012 el Sr. Alessandri Vergara incurrió en algunas contradicciones que creemos fundamental despejarlas para así determinar el real grado de intervención que tuvo en las impugnaciones informales realizadas a espaldas de la licitación; impugnaciones que, entendemos, fueron realizadas utilizándose información reservada o confidencial, conocida solo por los funcionarios a cargos del proceso, entre los que se cuenta al Sr. Cacho Gálmez, socio y amigo del abogado Carvajal”, escribió.

A continuación transcribe el contenido del correo de Alessandri a Chadwick, donde le informa sobre la disputa sobre la licitación, entre Sectrade y la ganadora Tecnodata, que a juicio de Olivares contienen información falsa.

“Andrés: a continuación algunos datos útiles: 1. Tecnodata es la empresa del Sr. Alfredo Giacoman. 2. Los Cordero (Fdo y Fco) no son ni han sido socios de tecnodata. Fueron empleados/vendedores de Giacoman hasta el 2006. 3. La empresa de los Cordero hoy se llama sectrade. Ellos perdieron ante tecnodata. Enviaron cartas como sectrade o como fabricante afuera a Baeza, Peña y Ubilla señalando que el producto de ellos era más barato, mejor y más eficaz. Además estas cartas impugnan el proceso de licitación con razones fundadas. Estas cartas establecen que RU tuvo acceso a estas denuncias (me harán llegar las cartas). 4.- Hoy Sectrade tiene representación de marcas que antes fueron de Tecnodata”.

De acuerdo al escrito de Olivares, Alessandri no debía conocer dicha información “no obstante lo cual éste pudo conocerla y transmitirla a altos personeros de Gobierno, revelándose como otra de las vías utilizadas por Federico y secuaces para echar abajo los procesos de licitación”.

Por todo lo anterior, Olivares le solicitó al fiscal que cite a declarar a Alessandri, Cacho y Carvajal para que aclaren sus contradicciones, como también solicitó que se tenga a la vista el tráfico de llamadas de los tres entre enero y octubre de 2012, las operaciones bancarias y que entreguen voluntariamente sus computadoras y teléfonos para que sean indagados.

Este diario intentó obtener una versión de Alessandri, pero hasta el cierre de esta edición no hubo respuesta.

Declaración Alessandri: