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Opinión

30 de Enero de 2013

“Por culpa de Pereira quedó cuestionada la imagen y fe pública en el Servicio de Impuestos Internos”

Los funcionarios del SII han realizado una serie de denuncias en contra de su director y han criticado públicamente sus actuaciones. En el peor momento de Pereira desde que asumió el cargo, la asociación cree que lo mejor es que el gobierno le pida la renuncia.

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¿Por qué dicen ustedes que la conducción de Pereira ha dañado la imagen del Servicio de Impuestos Internos?
-Es que eso es. Hace un año, de manera continua o desde que se supo el tema de la condonación a Johnson’s, por culpa de Pereira abiertamente quedó cuestionada la imagen y fe pública en el servicio. No es sólo un tema de equidad, sino que también de conciencia en las instituciones que se resquebraja con este tipo de situaciones.

El gobierno lo había blindado, aunque ahora dicen que el caso no está cerrado.
– Es que debería haberse inhabilitado en este caso como lo hizo también en otras ocasiones. Por eso esto es un llamado a no nombrar más a personas con conflicto de interés. ¿Tú vas a entender que alguien que trabaja asesorando planificaciones tributarias después pase a la vereda del frente e ignore toda la historia? Es súmamente complejo.

El gobierno dice que esperará de todas maneras el sumario de Contraloría. ¿Qué les parece eso?
– Mañana iremos a solicitar una audiencia al Contralor porque a nosotros nos preocupan los tiempos de la Contraloría. La respuesta para iniciar el sumario por el conflicto de interés fue en diciembre cuando la presentación fue en julio. Los tiempos de ellos son difíciles para los que estamos viviendo hoy día.

¿Pero los conflictos con él comienzan ahí o es algo que ha rodeado su gestión?
– Los conflictos con el señor Pereira comienzan con nuestra apelación a la Corte Suprema por los descuentos que se le hacen a funcionarios que participaron en movilizaciones. Y nosotros perdimos en la Corte Suprema. Ahí nos enteramos de otras cosas y entendimos que esto tenía que ver más con un estilo de gestión que con algo puntual.

¿De qué cosas?
– De un estilo para llevar las relaciones con conocidos, familiares… Nosotros no creemos que lo de Johnsons sea un problema puntual. El conflicto de interés no se visualiza desde la dirección del servicio. El director sigue dando explicaciones de que está todo legal, pero para nosotros él no debería haber participado y ni siquiera sabido sobre esta condonación.

¿Por qué?
– Porque no es sólo el arriendo a Cencosud. Él trabajó en Price (Waterhouse Cooper), el subdirector del servicio era el abogado de Price, de Johnsons frente al servicio, entonces él no debería haber sabido del caso. El conflicto de interés va más allá de si hubo o no delito. Tiene que ver con la gestión correcta y transparente de los funcionarios públicos. A nosotros, a todos se nos exige eso.

¿Usted dice que no tienen dimensión de lo que es un conflicto de interés y del daño que le hacen a la institución?
– Bueno, nosotros somos los encargados de la recaudación, del dinero que va a financiar las políticas sociales. Por eso es súper delicado que la ciudadanía pierda la confianza de manera continua con la institución. Y le pasa de manera continua a nuestros colegas que son increpados por este tipo de cosas.

La salida entonces es que renuncie o sea removido.
– Debería renunciar directamente. El gobierno debería solicitar la renuncia. Deberían dimensionar el daño que se está causando a la ciudadanía y la institución. Está comprobado que las instituciones que sufren una pérdida en la imagen pública después recaudan menos. Hay más evasión, más elusión si no hay confianza en las instituciones recaudadoras. Hay que resguardar los intereses de la ciudadanía, del servicio y responder por sobre los intereses particulares. El cumplimiento de la probidad se refiere a eso. Todos los funcionarios públicos, sean directivos o no, deben ser transparente. Y aquí no lo fueron.

¿Dónde se encuentran directivos sin conflictos de interés? ¿En el Hogar de Cristo, como dijo el ex ministro de Justicia?
– Con el pretexto de “estuvieron 20 años ahí, de dónde vamos a traer a la gente” no se soluciona. ¿Cómo no va a haber gente capacitada en otras áreas? O al menos que se deje pasar un tiempo. Acá no se trata de traer gente del Hogar de Cristo, como malamente dijo el ministro de Justicia, pero hay más gente que conoce de tributaria y no está asesorando a las grandes empresas en este momento. Pereira fue nombrado con conflicto de interés.

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