Ximena Ossandón y el cónclave en El Vaticano: “hay hartos simpáticos y creo que va a salir un buen Papa”

Aunque dice que la pasó “re mal” cuando debió renunciar a la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) a fines de 2010 -por no haber postulado por Alta Dirección Pública y después haber asegurado en twitter que el sueldo era “reguleque”- y que luego lo pasó peor cuando su esposo, Luis Hernán Paul, fue sacado en junio de 2011 al directorio de las AFPs en medio del escándalo de La Polar, Ximena Ossandón asegura que es porfiada y que no desistirá de participar en política. Así espera poder postular por RN en el distrito de La Florida porque “lo que no te mata te fortalece”.

La misma consigna usa esta católica ferviente -miembro del Opus Dei y reconocida religiosa- respecto de la Iglesia. Afirma que ha seguido atenta todo lo concerniente a la renuncia de Benedicto XVI y la elección del nuevo Papa. Como es creyente militante, en The Clinic Online decidimos entrevistarla respecto de cómo mira un católico practicante -capaz de poner virgencitas en los centros de la Junji y de defender sin asomo de duda esta decisión frente a la avalancha de críticas- los rumores que rodean la elección del Sumo Pontífice.

¿Qué le pasó con la renuncia de Benedicto XVI?
La verdad es que la renuncia del Papa fue para mí, y para todos creo yo, muy impactante porque históricamente ha ocurrido cuatro o cinco veces. No estábamos preparados para la decisión de Benedicto XVI, pero una vez que uno digiere sus argumentos, va analizando la situación y tomándole el peso, uno entiende lo que debe haber significado para el Papa abdicar. Es difícil para una persona católica, que está en comunión con el Papa juzgarlo. Él demostró valentía e inteligencia porque a su edad darse cuenta de que eran otras condiciones las que se necesitaban para enfrentar los nuevos tiempos, no es fácil. Es una decisión fuerte y dolorosa, pero inteligente.

Lo que se ha dicho es que enfrentaba a enemigos poderosos por haber encabezado la limpieza en la Iglesia de pedófilos y abusadores
Lo que entendí es que él no tenía le energía física e intelectual en estos momentos. Para nadie es una novedad que hay harto caos, desorden y que han pasado cosas terribles, y él asumió que no podía manejar el buque.

¿No tambalea su fe cuando ve que la cosa está tan fea en la Iglesia que hasta el Papa dice: mejor me retiro?
No, porque la fe mía, y la de los católicos, está puesta en Dios, no en las personas. Si nosotros tuviéramos la fe puestas en las personas la Iglesia estaría destruida hace mucho rato. Todos los seres humanos nos equivocamos, y no hay que endiosar a un Papa o un obispo.

Respecto de ese punto, de los errores de las autoridades ecleciásticas, ¿qué le parece que The New York Times haya puesto en una lista al Cardenal Francisco Javier Errázuriz como una de las personas que no debería elegir al nuevo Papa por haber encubierto abusos sexuales?
Si el cardenal Errázuriz no ha sido amonestado por la misma Iglesia, entonces puede estar en el cónclave. La curia romana es la que debe ver los antecedentes. Hay tantos rumores, pero no soy quién para juzgarlo. Porque además él pudo haber tomado decisiones erradas que hayan llevado a encubrir cosas, tal vez, pero que él haya sido un pedófilo o un abusador, no.

El diario fue bastante duro con él
No sé qué tanta autoridad ecleciástica tiene el The New York Times, pero todo el mundo sabe que Errázuriz fue parte importante en la ecuación de encubrir a Karadima, pero eso no quiere decir que haya actuado de mala fe. No quiero hacer ni una defensa ni un ataque de Errázuriz, pero si él está entre los electores del Papa es por algo y a mí no me corresponde juzgarlo.

¿No es difícil seguir teniendo fe en la Iglesia frente a tanta cochinada, por ejemplo usted defendió a Karadima…
Yo nunca defendí a Karadima. Dije que si él había hecho lo que se decía era atroz y usé un concepto de bien y mal que no todo el mundo domina. Lo que pasó con Karadima y con otros abusos es que noqueó a la Iglesia de forma total, a mucha gente le hizo tambalear la fe, pero estoy en la línea del Papa que abdicó, que dijo que prefería una Iglesia más pequeña, pero más limpia y pura, que una Iglesia grande llena de corrupción. A Benedicto XVI le tocó esta cosa tan dura de destapar esta olla, poner nuevas normas. Al Papa que viene le va a tocar más duro, pero nosotros rezamos para que la Iglesia se purifique.

A Benedicto XVI le tocó muy duro porque Juan Pablo II no hizo nada
Es duro decir que no hizo nada, porque por algo tuvo a Ratzinger como mano derecha. Tal vez hubo errores, eso es porque la Iglesia está llena de hombres, pero la Iglesia es grande y por eso, con todas las equivocaciones que hemos cometido, no la hemos logrado destruir.

¿Tiene algún papable favorito?
No, pero hay hartos simpáticos y creo que va a salir un buen Papa.

En el parlamento na que ver poner virgencitas

¿Va a seguir en política?
Sí, soy pre candidata a diputada por La Florida, y aunque en el pasado lo pasé muy mal, de esto se aprende. Faltan mujeres en política y ayudar a la gente hace falta. Tengo una vocación muy clara.

¿Su decisión va de la mano de la de su hermano, Manuel José Ossandón, de postular al Senado?
En este caso, no. Es una decisión es personal. Tengo 49 años y me mando solita.

¿Y va a seguir llevando la religión a donde vaya? ¿Si gana habrá virgencitas en el Congreso?
No se me ocurriría poner un símbolo religioso en el Congreso Nacional, sí en mi oficina, pero en el parlamento na que ver poner virgencitas. Ahora, soy una persona creyente y quien vote por mí, o vote por mi hermano como senador, sabe a lo que va. Los Ossandón tenemos una forma clara de pensar, somos religiosos y es muy difícil desdoblarse. Eso nos hace creíbles. Aquí no hay sorpresas.

¿Y eso en qué se traduce? ¿Qué opina, por ejemplo, del aborto terapéutico o del AVP?
Que dos personas adultas hagan lo que quieran, no tengo ningún problema. Sobre aborto terapéutico, actualmente se da, no de ir directamente a matar a una guagua, pero si una guagua muere producto de una intervención, no voy a decir yo “no, eso no se hace”. Lo que pasa es que conmigo se han construido caricaturas.