Los M&M’s: La comida favorita de los astronautas

Vía Cookingideas.es
En la década de los 70, en plena carrera espacial, a los terrícolas nos contaban que los astronautas se alimentaban con píldoras de filete deshidratado y comprimidos de lentejas con chorizo, y que algún día todos acabaríamos comiendo delicias por el estilo. Bien entrado el siglo XXI estamos en condiciones de afirmar que se trataba de una broma, como los coches voladores o el teletransportador de personas.

Es evidente que la Estación Espacial no es el mejor sitio para preparar una fabada, pero también es cierto que desde aquella salsa de manzana que John Glenn sorbía de un tubo en el vuelo de 1962 hasta hoy la gastronomía espacial ha avanzado una barbaridad. Los astronautas se pirran por los M&Ms, el Tang, los tacos, el sushi y un helado de tres gustos cuyo aspecto deja mucho que desear pero a miles de kilómetros de la Tierra debe de saber a gloria.

Una encuesta realizada por la NASA entre los visitantes de su página web sitúa a las píldoras de chocolate M&M –nuestros Lacasitos, para entendernos- entre la comida favorita de los astronautas, seguida de los zumos en polvo Tang que, contrariamente a lo que afirma la sabiduría popular, no fueron inventados por la NASA, sino General Foods, en 1957.

El astronauta Koichi Wakata, de la agencia espacial japonesa (JAXA) blande los palillos en busca de las delicias gastronómicas japonesas.

Los astronautas norteamericanos Thomas Stafford y Donald Slayton muestran dos tubos de comida soviética durante el proyecto ruso-americano Apolo-Soyuz en 1975. Los tubos contienen “borsch”, una sopa deshidratada de remolacha, aunque la etiqueta de la derecha es de una marca de vodka.

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