Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Opinión

23 de Agosto de 2013

La contienda parlamentaria es desigual

Una de las tantas herencias de la dictadura es el actual sistema político que mantiene a dos bloques en el poder, excluyendo la competencia externa o haciéndola muy compleja, configurando así un sistema excluyente que evita el multipartidismo. De esta manera en Chile se castiga a quienes no pertenecen a pactos políticos. Es decir, a […]

Daniela López
Daniela López
Por

Una de las tantas herencias de la dictadura es el actual sistema político que mantiene a dos bloques en el poder, excluyendo la competencia externa o haciéndola muy compleja, configurando así un sistema excluyente que evita el multipartidismo. De esta manera en Chile se castiga a quienes no pertenecen a pactos políticos. Es decir, a los candidatos independientes o de partidos excluidos de las grandes coaliciones. Por lo cual, para poder ser electos deben obtener una mayor cantidad de votos de manera individual, que supere a una lista de una coalición, sobrerrepresentada gracias al sistema binominal.

Sumado a ello, por la actual ley de financiamiento, los grandes mecenas, empresarios y poderosos del país que financian las campañas de la Concertación (actualmente disfrazada como nueva -vieja- mayoría) y de la Alianza esperan que su “generoso” aporte a dichas campañas, se traduzca en la defensa a sus intereses mediante sus abanderados.

Así el financiamiento de campañas políticas que permite y promueve la legislación actual fue hecha a la medida del status quo. Es decir, el astuto legislador legaliza la trampa, de tal manera que toma sentido el aforismo: “el que nada hace, nada teme” y mucho adquiere. Con ello, podemos ver cómo invierten los poderosos para resguardar el estatus quo y al mismo tiempo, sus propias fortunas e intereses.

Es así que el actual modelo es cómodo tanto para los partidos como también para quienes ostentan y financian el poder. Pese a ello, y estando conscientes que la contienda es desigual, donde no nos financia Luksic, ni Angelini ni los Matte, no queremos tenerlos. Sí nos sobran las energías, las razones y la convicción de que los cambios que soñamos solo serán posibles si los construimos con nuestras propias manos. Y esto es porque sabemos que las transformaciones políticas y sociales que necesita nuestro país no vendrán desde el seno de aquellos conglomerados políticos y económicos que se autorrepresentan. Al contrario, debemos seguir luchando por hacer realidad los intereses de las mayorías que se han expresado en las calles y en las encuestas demandando más derechos sociales y una real democracia política.

*Daniela López, candidata de la Izquierda Autónoma a diputada por el distrito 13: Valparaíso, Isla de Pascua y Juan Fernandez.

Notas relacionadas