Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Nacional

15 de Enero de 2014

Abogado de víctima del “wena naty”: “Las mujeres siguen siendo objeto de afrentas sexistas”

El jurista Tarek Leoz apuntó sus dardos a la Fundación Santiago a Mil, como también a la obra "Sentimientos". En la reseña de esta última se indica que está basada precisamente en "wena naty". El profesional habló hoy, luego que The Clinic Online revelara este lunes el recurso de protección contra la mencionada fundación y la demanda interpuesta por la joven afectada en contra de Gabriel Lasen Villalón, el joven autor del video que se viralizó en internet. La joven asegura que su vida ha sido un calvario y que incluso la acosan profesores y alumnos en la universidad, provocándole inestabilidad emocional.

Por

El abogado Tarek Leoz, patrocinante de la joven víctima -grabada en 2007 por su compañero de curso y que se viralizó en la red como el “wena naty”- fue enfático: “Las mujeres siguen siendo objeto de afrentas sexistas”.

Las palabras de Leoz se enmarcan dentro del recurso de protección que interpuso la joven ante la Corte de Apelaciones de Santiago en contra de la Fundación Santiago a Mil que patrocina la obra “sentimientos”, que se basa íntegramente en el nombre de “wena naty”, tal como lo señala la propia reseña del festival de teatro que se desarrolla por estos días en Santiago.

De acuerdo a la versión de Leoz, la acción legal, revelada este lunes por The Clinic Online, tuvo por objeto ” impedir la exhibición de una obra de teatro que en su reseña hace alusión directa a un hecho que ocurrió en la vida íntima de una joven, en ese momento menor de edad, que independiente de que haya tenido ribetes públicos hasta el límite de convertirse en el primer viral de nuestro país, fue una experiencia traumática para una niña y su círculo familiar”, señala Leoz.

Hay que recordar que en la acción legal la afectada relata que no sólo fue objeto de burlas y la expulsión del Colegio La Salle sino también en el instituto donde terminó su ensañanza media e incluso en la universidad, donde recibía un permanente acoso de profesores y alumnos.

Leoz explicó: “(fue) “una experiencia negativa para todos como sociedad, testigos de un juicio público, morboso, descontrolado, fiel reflejo de la discriminación de género institucionalizada en Chile”.

“Queremos ser enfáticos en que respetamos absolutamente la libertad de expresión garantizada en la Constitución Política, pero hay que ser cuidadosos y diligentes, nuestra carta fundamental también protege la vida, integridad física, síquica, privacidad y honor de una persona, es decir, existen contrapesos que en este caso no han sido respetados, insistió Leoz.

El profesional apuntó no sólo contra la fundación antes mencionada,sino también apuntó a la compañía de teatro “La niña horrible”, autora de la obra. Explicó que si bien es cierto mantiene un respeto por la libertad de expresión, el problema de fondo es que se basó íntegramente en el drama sufrido por la joven.

Al respecto, cuando la Fundación Santiago a Mil se enteró del recurso de protección borraron desde su página web la referencia de la obra con “wena naty”, para evitar problemas. Sin embargo, el pantallazo ya estaba en manos de la Corte de Santiago

“Santiago a Mil decide exhibir una obra reseñada y principalmente publicitada como recreación de un hecho particular que le ocurrió a una menor de edad, que además constituye un delito tratado por nuestro Código Penal, en este contexto, no estamos en contra de que la sociedad discuta en torno a temáticas importantes como por ejemplo, la estigmatización de género en las sociedad de masas o el rol de la mujer en una sociedad altamente machista, sino que tenemos la convicción que al hacer ese ejercicio, social y artísticamente exigente, los recurridos no pueden pasar a llevar la intimidad, identidad y los hechos sensiblestanto haciendo la referencia directa en la página web y en la programación escrita, están haciendo un uso artístico y publicitario sin su autorización, lo cual a nuestro comprender, es un acto arbitrario e ilegal”, agregó Leoz.

Junto a esta presentación de cautela de derechos constitucionales, la joven y su abogado demandaron al autor de la grabación, Gabriel Lasen Villalón por la suma de 365 millones de pesos por el daño causado.

El libelo se encuentra incoado en el Segundo Juzgado Civil de Santiago en período probatorio. En la causala familia de Lasen Villalón responsabilizó a la familia de la víctima de haber permitido un comportamiento a su juicio negativo, descartando cualquier responsabilidad de su hijo, ya que era un menor de edad a la fecha de los hechos. “Ese fue su único pecado”, señalaron ante el tribunal.

Notas relacionadas