Karla Rubilar, diputada Amplitud: “Si se despenaliza abortar en casos específicos debe garantizarse atención médica”

-Había leído detenidamente el programa de gobierno y los anuncios de campaña y por supuesto que comparto el aumento en infraestructura hospitalaria, mantener los niveles de construcción y de especialistas. Lamento que no haya dado detalles específicos, por ejemplo, qué mil especialistas se van a llevar a la atención primaria y en qué comunas. Sobre la ley Ricarte Soto, el Presidente Piñera dejó un fondo que cubre una gran cantidad de enfermedades, entonces nos falta información-, es lo primero que aclara la diputada de Amplitud, Karla Rubilar, al comentar la cuenta pública de la Presidenta Michelle Bachelet del 21 de mayo.

A diferencia de su ex partido -RN-, Amplitud, el movimiento del que forma parte Rubilar, acordó el fin de semana pasado una posición abierta a debatir sobre el aborto en casos específicos como el riesgo de la vida materna y la inviabilidad fetal. Respecto de casos de violación, que fue la tercera arista que abordó la Mandataria en su discurso, no hay un camino trazado por lo que, augura la parlamentaria, la discusión será amplia.

-Mencionaste el miércoles que nadie podría sorprenderse por el anuncio de Bachelet.
-Y lo sostengo: nadie puede extrañarse de este anuncio porque está desde hace un tiempo en el programa de gobierno, entonces no es novedad. Ahora, sobre las tres causales de despenalización, nos gustaría conocer en profundidad a qué se refieren porque estamos de acuerdo en legislar. Este tema lo hemos discutido en Amplitud y hay acuerdo en riesgo vital de la madre e inviabilidad del feto, en casos específicos de anancefalia y discutir, por ejemplo, que pasa con alguien que sabes que va a nacer sin dos riñones. El caso de violación es el más complejo.

¿Por qué?
-Porque hay otras herramientas. Está la pastilla del día después cuando se produce el delito, como decirlo, no habitual, agudo, está este mecanismo para evitar el embarazo. Entonces creo que estamos hablando específicamente sobre las niñas que sufren incesto y es un tema que habrá que ver a fondo.

La ministra de la Segpres habló ayer de las “niñas” que debían abortar. Al parecer, el Gobierno también está pensando en estas situaciones.
-Sí, y es bueno hacer esa separación porque quienes son violadas tienen acceso hoy a la píldora. Entonces en cuando el caso es de incesto es mucho más grave porque entendemos que se trata de niñas que no están capacitadas para ser madres, sí para ser fecundadas, pero ni emocional ni físicamente están listas.

¿Entonces debería permitirse?
-Es complicado, porque probablemente una niña en esta situación va a llegar a realizarse un posible aborto a las 22 semanas, entonces ésa es ya es una guagua firmada, algo que incluso reconocen los más progresistas que opinan que la interrupción del embarazo es aceptable hasta las 12 semanas cuando aún no se ha formado el sistema nervioso central.

Si se da la condición de violación y menos de 12 semanas, ¿apoyarías?
-En el caso de incesto, con un feto de menos de 12 semanas, no tenemos una posición fija. Habrá que escuchar a los médicos, a las matronas. Un feto de ocho semanas por ejemplo, tiene corazón, pulmones, riñones, entonces es complejo. Ahora, Amplitud tiene un piso que es lo que discutimos en el comité político y es que estamos de acuerdo con la despenalización en riesgo de vida de la madre e inviabilidad por anancefalia. Si algunos de los parlamentarios llega a la conclusión de que se debe analizar el aborto en violaciones no nos genera ningún conflicto.

La DC ha insistido en que se está hablando de despenalizar en algunas situaciones, no de legalizar.
-Es cierto, despenalizar significa que si alguien se hace un aborto y llega a un consultorio no tiene que ser denunciada. Legalizar es que el Estado debe proveer lo necesario para un aborto a través del sistema público. Se ha hecho una caricatura, nadie sale feliz de hacerse un aborto y yo creo que si se trata de una política pública debe ser tratada como tal.

¿Cómo así?
-Lo más complejo de despenalizar el aborto y no calificarlo como un derecho en casos específicos implica que sólo las personas con recurso van a poder interrumpir el embarazo. La decisión que tome el parlamento, lo que se apruebe, debe conllevar la atención correspondiente porque sólo despenalizar es discriminatorio. Si se aprueba abortar en casos específicos debe conllevar atención médica para ello. Ese debate va a ser muy importante porque además, según lo que yo he estudiado, legislar sobre el aborto va a requerir reforma constitucional.