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Mundo

22 de Agosto de 2014

“Los hombres que mataron a James Foley” por John Lee Anderson

Para el periodista estadounidense, Jhon Lee Anderson, quien conoció a James Foley-el reportero que fue decapitado esta semana por el Estado Islámico– el acto de los extremistas es “repugnante”. Sostiene que “lamentablemente, si alguna vez fue difícil concebir gente capaz de semejante crueldad insondable, ya no lo es”. Anderson cuenta además sobre la última vez […]

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Para el periodista estadounidense, Jhon Lee Anderson, quien conoció a James Foley-el reportero que fue decapitado esta semana por el Estado Islámico– el acto de los extremistas es “repugnante”. Sostiene que “lamentablemente, si alguna vez fue difícil concebir gente capaz de semejante crueldad insondable, ya no lo es”. Anderson cuenta además sobre la última vez que vio a Foley en Turquía y sobre las notas que intercambiaron antes de su brutal muerte.

En la revista New Yorker, John Lee Anderson, recordó: “la última vez que vi a Jim Foley fue en el verano de 2012, en Turquía, cerca de la frontera con Siria. Foley había estado reporteando en Siria durante varias semanas, pero se había dado un descanso para lanzarse a la búsqueda de dos colegas occidentales que habían sido secuestrados por extremistas justo dentro de Siria”.

“Intercambiamos notas. Sucedió que yo había estado en una casa de seguridad rebelde siria, en la frontera el día anterior a que nuestros colegas fueran capturados; allí, me había tropezado con dos hombres musulmanes británicos con largas barbas que estaban a punto de entrar en Siria. Eran claramente yihadistas y estaban incómodos con mi presencia”, relata.

Anderson recuerda que unos diez días después, los colegas de Foley pudieron salir de Siria. “Habían sido capturados por radicales musulmanes extranjeros (…) Fueron interrogados, golpeados y baleados, pero sobrevivieron. Fueron muy afortunados; habían sido rescatados por un grupo de rebeldes más moderados que, en aquellos días, todavía mantienen cierto poder en el campo de batalla. Foley volvió a entrar en Siria y, en noviembre de 2012, fue capturado”.

Según el periodista, una característica de la campaña “psicópata” del grupo “para establecer un califato musulmán en el Medio Oriente es que estos asesinos voluntarios suben sus atrocidades a Internet. No hace mucho, un yihadista australiano filmó su hijo joven con la cabeza recortada de un hombre. También ha habido transmisiones por Internet de las ejecuciones en masa de chiítas, vistos como apóstatas por los extremistas sunitas de ISIS; de crucifixiones; y de lapidaciones de mujeres. La brutalidad sigue y sigue”.

Anderson cuenta además que se esperaba la liberación de Foley, ya que en junio pasado, una serie de rehenes occidentales, que estaban en cautiverio fueron liberados, lo que habría renovado la esperanza de que Jim y otros fueran liberados.

“Lamentablemente, si alguna vez fue difícil concebir gente capaz de semejante crueldad insondable, ya no lo es. Guerrillas de ayer han dado paso a los terroristas, y ahora los terroristas han dado paso a esta nueva banda, que son algo así como asesinos en serie. ISIS, una organización de matones, es la respuesta de Oriente Medio a la pandilla de narcos psycho-killer, Los Zetas, tratando de superar a sus enemigos, para asustarlos hasta la sumisión, y para de alguna manera dibujarse a sí mismos en horrible dibujo animad del mal”, sentenció.

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