Gustavo Villalobos, director de la entidad: “Se va a proponer que la ANI pueda tener agentes encubiertos”

Tras el bombazo del día lunes 8 de septiembre, las miradas se han vuelto hacia la Agencia Nacional de Inteligencia (ANI). El director de la entidad, Gutavo Villalobos, se refirió al tema en una entrevista con El Mercurio. Villalobos, quien es ex Mapu y estuvo a cargo también de la agencia entre 2004 y 2011, se refirió a las capacidades que posee la ANI, particularmente al hecho de que “no tiene facultades para mantener agentes encubiertos. Sí tiene facultades para solicitar autorización de una Corte de Apelaciones para la realización de actividades (…) que tienen que ver con el tema de interceptación telefónica”. Por ello, Villalobos señala que la capacidad de búsqueda de información de la ANI “tiene una limitación distinta a la que tienen los otros servicios”.

Por ello, el director de la Agencia dio a conocer que “lo que se va a proponer en el proyecto de ley es que la ANI pueda tener agentes encubiertos. En estas materias, los agentes encubiertos, los informantes y el trabajo de búsqueda de información son lo más relevante. Es más relevante que las interceptaciones telefónicas y todo lo demás. Aquí, en inteligencia, lo fundamental, a pesar de todos los avances tecnológicos, son las fuentes humanas”.

Además precisó que los agentes encubiertos serían funcionarios públicos “que para obtener información busca incorporarse a las organizaciones o acercarse a las personas sospechosas de formar parte de organizaciones terroristas o que ejercen la violencia política”. Agregó que para poder operar, los agentes deben tener “identificaciones, documentación que lo identifique, distinta a la real. Esto se ocupa mucho en el tema de las drogas, donde incluso existen otras formas también de intervención”.

En la entrevista, también señala que si bien no se logró prevenir el atentado del día lunes: “han existido ocasiones en que se ha tenido conocimiento, a partir de información de inteligencia, que va a ocurrir un determinado hecho y se adoptan las medidas para impedirlo”. En ese sentido, aclara que este año se han prevenido “posibles actividades de carácter terrorista, o para ampliar el rango, de violencia política”.

También se refiere al rumbo que estarían adquiriendo ciertos grupos: “es preocupante que algunos grupos anarquistas vayan profundizando su radicalización. Porque aquí, evidentemente, hay una radicalización en el llegar a esto”. Agregoó que “hay grupos que llegan hasta el encapuchamiento en las marchas. Entonces el problema no es que haya más. El problema es la radicalización a estos extremos”.