Bachelet no se mueve de su hoja de ruta y reitera que las reformas son el camino pese a la incertidumbre

La Presidenta Michelle Bachelet salió nuevamente a defender la reformas estructurales que impulsa, en medio de los fuertes cuestionamientos a su gestión tras la sensible baja en su popularidad, que el miércoles reflejaron las encuestas Adimark y CEP.

Durante la Conferencia Internacional “Desafíos para asegurar el crecimiento y una prosperidad compartida en América Latina”, organizado por el Fondo Monetario Internacional en conjunto con el Ministerio de Hacienda, la Jefa de Estado subrayó que los cambios son “la única forma de hacernos cargo de los desafíos que no pueden seguir esperando” y que “no enfrentar esos cambios constituye una amenaza a nuestro orden social”.

“Sabemos que las reformas son ambiciosas y es natural que generen incertidumbre, pero la experiencia nos demuestra que ese es el camino”, sostuvo.

En ese sentido, la Presidenta dijo que el “enfriamiento de la actividad económica en América Latina es una realidad, pero no un argumento para detener las reformas estructurales”.

“América Latina tiene unos niveles de desigualdad todavía muy elevados y Chile no es una excepción, tenemos tareas que asumir”, señaló Bachelet.

Bachelet destacó también que Chile encabeza la lista de los países más prósperos de América Latina, con un ingreso per cápita de 21.114 dólares y una de las más bajas tasas de pobreza, pero que pese a ello, reconoció que tiene un serio problema de desigualdad, por lo que “la estructura de nuestro desarrollo todavía tiene tareas pendientes”.

“Es la única forma de hacernos cargo de desafíos que no pueden seguir esperando (…), el proceso que hemos emprendido va en la línea correcta”, recalcó.

En la actividad también estuvo presenta la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, quien habló antes que la Mandataria.

La funcionaria del organismo con sede en Washington dijo que éste “es un momento estimulante para América Latina” y que sólo “el pesimista más negativo apostaría contra el éxito de esta región. Los optimistas estamos conscientes de los desafíos de América Latina”.

En un guiño a las reformas que impulsa Bachelet, Lagarde dijo que para impulsar ese crecimiento “se requiere esta combinación de cambios necesarios y la confianza. Esta conferencia es importante para analizar estos puntos de tensión y las medidas correctivas para lograr un crecimiento de calidad”.

“Necesitamos un impulso para enfrentar la nueva mediocridad, alta inflación, bajo crecimiento y alto desempleo”, afirmó.