Nacional
5 de Diciembre de 2014Desastre ambiental en Quintero: Petróleo derramado es casi el doble de lo que informó ENAP
Según estos nuevos datos, en el desastre ocurrido en el 24 de septiembre se esparcieron por el mar casi 39 mil litros de hidrocarburo y no los 22 mil que informó la petrolera estatal.
Un enorme diferencia entre el monto de petróleo que efectivamente se derramó en la bahía de Quintero y lo que informó en su momento la Empresa Nacional del Petróleo, arrojó un informe de la Gobernación Marítima de Valparaíso.
Según estos nuevos datos, en el desastre ocurrido en el 24 de septiembre se esparcieron por el mar casi 39 mil litros de hidrocarburo y no los 22 mil que informó la petrolera estatal.
Tras el incidente, la empresa señaló mediante un comunicado que se “dispuso el despliegue de 2.000 metros de mangas absorbentes y se utilizaron 1.500 metros de barreras de contención, esta última labor con el apoyo de 18 lanchas de pescadores artesanales de la zona. Para el manejo de los residuos se cumplió con la normativa vigente y su disposición final se realiza en las instalaciones de la planta de la empresa especializada Hidronor, en Santiago”.
Asimismo, precisaron que “las especies afectadas se derivaron al Hospital Clínico Veterinario de la Universidad Santo Tomás en Viña del Mar. Enap realizó una inversión cercana a los $15 millones para adaptar el centro de rescate del Hospital con nuevas estructuras para realizar los procesos de lavado, secado y recuperación de las aves. Entre el 22 de octubre y el 4 de noviembre se liberaron pingüinos y pelícanos, los que fueron devueltos a su hábitat natural”.
Cabe recordar que en un principio, se había estimado que el desastre ambiental había alcanzado los 3 mil litros, pero los pescadores artesanales desmintieron la información, argumentando que la empresa quería minimizar los grave de la situación.
En su momento, la petrolera estatal explicó que el problema fue una combinación de un error técnico y humano.
La falla, según informó hace más de dos meses, se produjo porque el remolcador del buque que transportaba el hidrocarburo aceleró a una velocidad más rápida de lo que se debía.
La justificación de la empresa por la primera cifra que se entregó es que tras la auditoría se pudo determinar que el daño era mayor.