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10 de Abril de 2015

Los otros nexos comerciales de la nuera de Bachelet con Luksic después del crédito para Caval

Además de la conocida relación entre Andrónico Luksic y Natalia Compagnon por el préstamo de 6.500 millones de pesos para la compra de terrenos en Machalí, hay otra conexión destapada por Qué Pasa: la nuera de Michelle Bachelet trabajó en asesorías y estudios para la Compañía de las Cervecerías Unidas (CCU) en la búsqueda de permisos para la puesta en marcha de nuevas instalaciones.

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Además de la conocida relación entre Andrónico Luksic y Natalia Compagnon por el préstamo para la compra de terrenos en Machalí, hay otra conexión destapada por Qué Pasa: la nuera de Michelle Bachelet trabajó en asesorías y estudios para la Compañía de las Cervecerías Unidas (CCU) en la búsqueda de permisos para la puesta en marcha de nuevas instalaciones.

En el momento en el que ambas partes se acercaron, CCU enfrentaba un complicado escenario: la empresa batallaba con habitantes de Paine por la instalación de una nueva planta, el que finalmente se cayó el 20 de mayo del 2014 por decisión de la Comisión de Evaluación Ambiental, así como también el traslado del edificio corporativo hacia Quilicura, donde se ubica la planta de producción, según señala Qué Pasa.

Esta relación se concretó el 29 de noviembre de 2013, tres semanas después de la reunión por el crédito de $6.500 millones. En ésta, Compagnon se reunió con Luksic y Francisco Rodríguez, gerente de Ingeniería de CCU. Es con este último personaje que la relación se estrechó, compartiendo tanto información como consejos. De uno de ellos salió el nombre de Rodrigo Pizarro, experto en estudios ambientales, a quien se le solicitó crear una propuesta de apoyo estratégico y gestión territorial, la que finalmente fue rechazada después de ser entregada en diciembre del año 2013.

Aún con aquel traspié, la relación siguió sin problemas. La siguiente sugerencia de Compagnon fue contratar a SCR, perteneciente a Marcelo Carreño, para realizar un Estudio de Impacto sobre el Sistema de Transporte Urbano junto a la Municipalidad de Quilicura, buscando así la aprobación del permiso de edificación que permitiera la construcción de cuatro edificios en 10 mil m2. Carreño era además gerente de Administración y Finanzas de Caval, siendo responsable de gestionar el crédito en el Banco de Chile.

SCR se constituyó en noviembre de 2012, no cuenta con página de internet y su otro -y único- socio es la esposa de Carreño. De todas formas ganó la licitación de la Municipalidad de Quilicura por 890 UF, frente a Ingeniar -que pedía 635 UF por el mismo trabajo- e ITransporte, cuyo costo era de 945 UF.

Esta empresa requirió los servicios de Rodrigo Pizarro, economista de la London School of Economics y doctorado en Estudios Ambientales de la Universidad de Stanford, en el puesto de coordinador de CCU y en la ejecución técnica a Claudio Sepúlveda, ingeniero civil mención en Transporte de la Universidad de Chile.

Durante el año 2014, Compagnon siguió trabajando como asesora para la empresa de Luksic, mientras que SCR ganaba más contratos, según señala Qué Pasa. En febrero de aquel año, CCU pidió a SCR realizar otro Estudio de Impacto sobre el Sistema de Transporte Urbano, ahora en Renca, siendo este el lugar elegido después de la negativa en Paine. SCR nuevamente se adjudicó el contrato, esta vez por 1.100 UF.

Al llegar Bachelet al gobierno en marzo de aquel año, Rodrigo Pizarro, nexo entre SCR y CCU, abandonó la empresa para asumir como jefe de la división de Información y Economía Ambiental del Ministerio de Medio Ambiente. Tres personas llegaron a ocupar su lugar. María Luisa Valenzuela y Sol Herreros se sumaron a SCR, apareciendo también en Caval: la primera como arquitecto y la segunda como encargada de Proyectos Tecnológicos e Innovación de esa compañía.

En mayo de aquel año, 780 UF entraron a las arcas de SCR. La justificación de este dinero proviene de la decisión de CCU de realizar cambios al proyecto inicial del edificio en Quilicura. 100 UF más se sumaron a SCR, luego de que adelantaran la entrega de un estudio de junio a abril de aquel año.

Ese no fue el último pago que recibió la empresa por el proyecto: obtuvieron otros 690 UF después de otro cambio, en el que se sumó el área de transportes de CCU al proyecto de la planta de bebidas de Renca.

En abril del año 2014, Compagnon tuvo otra reunión con Luksic en las oficinas de Quiñenco, en El Golf. En aquella cita también estuvo Carolina García de la Huerta, gerente desde aquel mes de Asuntos Corporativos y Comunicaciones del holding. La empresa sumó más problemas aparte del de Paine, siendo ahora los focos de estos los puertos de Antofagasta y San Antonio. A raíz de esto, el departamento de García de la Huerta pidió más asesorías, esta vez respecto a los motivos por los cuales las comunidades se oponían a los planes de Luksic.

Un mes después Compagnon volvió a Quiñenco, ahora en compañía de Mauricio Valero, socio en Caval. Mostraron su propuesta e incluso propusieron entregar una asesoría de apoyo estratégico y el diseño de una estrategia sobre la instalación y modificación de las plantas productivas de CCU. La empresa elegida esta vez para llevar a cabo todo lo encargado fue FVM, de propiedad de Valero, cuyos socios son su esposa y su hermana. Esta empresa es también la que logró exclusividad en la reventa de los terrenos de Machalí con una comisión del 26% sobre sus utilidades. A pesar de todo lo ofrecido, la propuesta no fue aceptada.

A pesar de esto, SCR seguía manteniendo una estable relación con CCU. En junio del 2014, esta empresa volvió a tener un encargo de Luksic. La empresa de Carreño obtuvo 2.900 UF por un prediseño de ingeniería que entregara una solución vial al Serviu. Este organismo había dividido un terreno de CCU junto a otro, también de Luksic, por lo que se necesitaba generar un cruce que permitiera llegar a la Ruta 5 Norte.

En total, la relación entre CCU y SCR les dejó 6.460 UF, cerca de $162 millones de pesos, de lo que ya se ha pagado cerca del 90%, según informa Qué Pasa. Aún así, de todos los trabajos realizados por la empresa, solo el estudio en Quilicura pasó la revisión de la autoridad: ingresó el 17 de octubre a la Seremi de Transporte, saliendo con observaciones dos meses después. En febrero del año en curso volvió a ingresar y aún no hay novedades.

20 días después de que se diera a conocer la información sobre Caval y los terrenos en Machalí, en CCU vieron que tres personas también figuraban trabajando con ellos a través de SCR. Al tener conocimiento de esto, el servicio de auditoria interno realizó una investigación para revisar los contratos celebrados con esa sociedad, para ver si cumplieron todos lo requerido por la empresa. Fuentes de Què Pasa aseguran que después de aquella investigación se supo la relación entre Compagnon y Carreño, tras lo cual CCU finalizó su relación con SCR.

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