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Poder

20 de Mayo de 2015

El llamado del ultrapinochetista Gonzalo Rojas a Bachelet: “Mañana 21 de mayo, Presidenta, hable; hable sobre lo importante”

"Mañana, usted, señora Presidenta, dará una cuenta. Nos contará sobre el país, pero seguiremos sin saber gran cosa de usted", dice el abogado y reconocido defensor de ideas conservadoras.

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“Presidenta, cuéntenos” se titula la columna que en esta oportunidad escribió para El Mercurio, Gonzalo Rojas, a propósito de que se avecina una nueva cuenta pública, marca por un particular momento de coyuntura.

“Mañana, usted, señora Presidenta, dará una cuenta. Nos contará sobre el país, pero seguiremos sin saber gran cosa de usted”, parte el escrito del abogado, reconocido Pinochetista y defensor de ideas ultraconservadoras.

El hombre que ha hecho fuertes llamados a la derecha a no desentenderse de su historia política, dice que “seguro que los chilenos quisieran saber más de usted. La exigua minoría que la eligió no marcó su preferencia por un programa: votó por usted, por la imagen que usted proyectaba. Si de votar por un programa se hubiese tratado, su candidatura habría sido aún menos favorecida. Sus partidarios, insisto, votaron por usted, pero cada día saben menos de Michelle Bachelet. Todos sabemos menos”.

“Mañana 21 de mayo, Presidenta, hable; hable sobre lo importante. No sobre esa inauguración reciente -que es simple ejecución presupuestaria-, ni sobre los afectos que usted siente, con esa sensibilidad que ha terminado agotando a quienes, por sobre sus efluvios emocionales, esperan conceptos y decisiones. Porque si al Presidente Piñera su locuacidad le jugó tantas veces en contra, a usted, señora Presidenta, sus silencios la están arrugando, la están achicando, la están jibarizando. Hable de lo importante, cuéntenos”.

Cuéntenos, prosigue Rojas, “qué piensa de las tres catástrofes silenciosas que demuelen al país que usted dice gobernar: la disminución de la población nativa por una caída continua de la natalidad, la ruptura de los vínculos paterno-filiales por los mayoritarios nacimientos extramatrimoniales y la expansión de la drogadicción en todos los sectores de la sociedad. ¿Va a callar usted ante tamañas catástrofes o va a hablar? ¿Le importan, Presidenta? ¿O son datos que usted menosprecia?”

“Queremos saber de verdad, señora Presidenta, hasta dónde llegan sus afanes estatizantes de la educación. Diga la verdad, diga toda la verdad. Usted no debiera sentirse avergonzada por reconocer que prefiere un único agente docente, el Estado, mientras que nosotros sí debiéramos estar achunchados al no exigirle esa definición”, asegura.

El profesor de la UC también llamó a la Mandataria a abordar el tema de la Araucanía y la demanda marítima boliviana.

Luego de eso, Rojas emplaza a la Jefa de Estado a referirse a cómo será el anunciado proceso de nueva Constitución.

“Cuéntenos también, señora Presidenta, en qué tipo de nueva Constitución está pensando. ¿O es secreto de Estado? Porque escudarse en cabildos y consultas no pasa de ser una fórmula poco elegante, algo así como “dicen que la vecina”, en un tema que de parte suya exige claridad total”.

“También quieren saber los chilenos a cuál de las dos almas de su coalición le entregará usted su corazón en los próximos meses. Porque si eso ya se lo preguntan sus mismos partidarios, señora Presidenta, no se extrañe de que sus detractores lo tengamos por duda existencial. Y, dentro de ese intríngulis, cuéntenos: ¿los comunistas tienen toda su confianza, gozan de toda su adhesión expresada en dos ministerios millonarios y decisivos… o su creciente influencia es solo una casualidad?”, agrega.

Finalmente, Rojas cierra su artículo hablando de las platas negras y la transparencia. “¿Cuán de profundis es su lamento por facturas, compras y boletas, incluyendo las que se acercan a usted? Cuéntenos mañana (…) Usted usó y abusó de la transparencia como imagen de sí misma; usted organizó toda su tramoya a partir de un velo de inocencia en que usted se presentaba inmaculada, virginal. Los hechos la han ido manchando, Presidenta. Eso, bien lo sabe usted, es parte del oficio que usted misma escogió. Pero no es una mancha que solo la afecte a usted personalmente: lo penoso es que es una mancha que ofende a Chile”.

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