Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Poder

10 de Julio de 2015

Corpesca: la respuesta de Jaime Orpis a la Comisión de Ética del Senado que lo investiga por aportes ilegales

El parlamentario UDI insistió en que la plata que recibió de la empresa del grupo Angelini -más de 200 millones- nunca puso en riesgo su fuero interno a la hora de votar. Aseguró que su voto para aprobar la Ley de Pesca fue siempre contrario a lo que buscaba la industria del ramo. Reconoció también los aportes, pero descartó que detrás de ellos estuviera la petición de favores o el delito de cohecho.

Por

Jaime Orpis A1

El pasado 1 de julio el senador de la UDI Jaime Orpis presentó sus descargos ante la Comisión de Ética de la Cámara Alta, en el marco del proceso que se le sigue por eventuales faltas las normas parlamentarias, luego de conocerse los aportes de Corpesca -que se extendieron por más de 2 años- a través de boletas ideológicamente falsas proporcionadas por terceros. Además se suma la existencia de un documento tributario girado por uno de sus colaboradores a Soquimich, hecho que no fue incluido en su contestación a la instancia de control interno del parlamento.

En el documento -que publica íntegramente The Clinic Online-, Orpis reconoce que la empresa de grupo Angelini le proporcionó fondos, con el objeto de pagar deudas originadas en mi campaña al Senado, así como para aportar a otras campañas”.

Y a renglón seguido negó que tanto pedir como recibir los aportes mencionados -hasta ahora más de 200 millones- “sean constitutivos de delitos o de alguna infracción ética”.

Asimismo descartó que la recepción de recursos lo hubiera llevado a votar en favor de las empresas pesqueras.

“Con la misma transparencia con la que he reconocido mis errores, señalo tajantemente que jamás los aportes para financiar campañas o deudas de campaña, me hayan quitado un ápice de independencia en mis decisiones como legislador. En todo momento he actuado con plena y total libertad, sin haber comprometido mi voluntad en ningún sentido”, insistió.

Para fundamentar sus dichos, Orpis revisa toda la historia parlamentaria de la Ley de Pesca que comenzó con el llamado “acuerdo pesquero” al que llegaron los sectores políticos en septiembre de 2011. A fines de ese año, el gobierno de Sebastián Piñera ingresaba el proyecto de modificación legal.
Después de pasar por la Cámara de Diputados, dice Orpis, la futura ley llegó sin incluir la licitación obligatoria para las empresas que ingresan a este mercado, hecho que venía planteando -dice- desde al menos 2009.

En la Cámara Alta, afirma, siguió la discusión. A la comisión del ramo, a la que asegura renunció antes de que llegara el proyecto, concurrió el entonces presidente de la Asociación de Industriales Pesqueros del Norte (Asipnor) y gerente general de Corpesca, Francisco Mujica. Este último dijo en la instancia que, de aprobarse dicho cuerpo legal, “llevarían a la industria pesquera a desaparecer”, que las licitaciones tenían “un carácter expropiatorio”, entre otros argumentos. De hecho, insiste Orpis, luego de que se aprobara la idea de legislar el 17 de octubre de 2012, se abrió el período para discutir las indicaciones. Hubo 896 y “ninguna de ellas fue suscrita por mi”, insistió.

“Votar a favor de la licitación obligatoria incluyendo la licitación… contrariaba absolutamente la opinión de Corpesca y de la industria manifestada públicamente y durante la tramitación legislativa. Esta decisión no sólo demostraba mis convicciones históricas en materia de libre competencia, promoción de la entrada de nuevos actores a diferentes mercados, sino que mi más total y absoluta independencia respecto de las decisiones que debo adoptar más allá de haber recibido aportes para financiar mis campañas políticas”, insistió Orpis.

Hay que recordar que Mujica está imputado y querellado en la investigación que lleva la fiscalía no sólo porque aportó plata a Orpis fuera de la ley, sino también porque hizo lo propio con la diputada filo Alianza, Marta Isasi. Ambos enfrentan querellas del Consejo de Defensa del Estado y el Servicio de Impuestos Internos.

Orpis insistió en que siempre participó activamente en la creación de la ley, que pidió opiniones de distintos actores y “actué con prudencia”.
“Luego de todo lo anterior, manifesté mi voluntad, independiente y libre de toda coerción o compromiso, a través del acto propio por el cual los legisladores manifiestan su voluntad y la transforman en una decisión: el voto”, recalcó.

El senador gremialista argumentó que su voto fue en conciencia y decidió no inhabilitarse porque a su juicio las platas de Corpesca no influían en su decisión ya que no había “ningún interés directo o indirecto”.

“Incluso, tomando en cuenta mis convicciones históricas en materia de libre competencia y el historial de proyectos de ley que he presentado en materia pesquera, la inhabilitación podría haber constituido una falta a mis funciones legislativas. Quizás para la concentración de la industria pesquera habría sido más favorable mi inhabilitación, antes que el voto en favor de las licitaciones obligatorias. Lo no ético hubiese sido restarme, lo que en conciencia decidí no hacer. Tomé la decisión de no inhabilitarme porque existía un acuerdo político que incluía normas reales y efectivas en materia de desconcentración de la industria pesquera”, explicó.

Independiente de la preferencia manifestada en el hemiciclo, Orpis aseveró que se retiró de la comisión del ramo “varios meses antes de que el proyecto ingresara al Congreso, no porque los aportes a campañas me restaran independencia, sino que porque se podría cuestionar la institucionalidad generada por el proyecto”.
Tal como lo ha señalado públicamente, Orpis asegura estar endeudado, que nunca se enriqueció, que tiene la misma casa desde hace 26 años pagada con un crédito hipotecario que adquirió en 1989; que es dueño de un vehículo de 2007 y que su patrimonio no ha cambiado en nada.

Por ahora la Comisión de Ética analiza los descargos de Orpis y revisa su comportamiento legislativo antes de entregar una decisión final.

Lea la respuesta completa

Notas relacionadas