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Nacional

14 de Agosto de 2015

La carta de la familia del joven que sufrió “el cuento del tío”

“Quisiera agradecer el cariño inmenso de todos los que estuvieron a nuestro lado en estas horas de horror, es lo que ayuda a transitarlas. También agradecer a carabineros. Sin embargo, tratar esto como un simple cuento del tío a través del cual robaron unos TV, no ayudará a nuestra sociedad a combatir este delito", dice parte del texto.

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José Pàblo Avaria FACEBOOK

La familia del joven de 19 años, José Pablo Avaria Tarud, víctima del famoso “cuento del tío”, hecho por el que estuvo secuestrado por algunas horas, hizo circular una sentida carta donde se refiere al hecho.

“Quisiera agradecer el cariño inmenso de todos los que estuvieron a nuestro lado en estas horas de horror, es lo que ayuda a transitarlas. También agradecer a carabineros. Sin embargo, tratar esto como un simple cuento del tío a través del cual robaron unos TV, no ayudará a nuestra sociedad a combatir este delito.

Esto si fue un secuestro, operado de un modo virtual a través del cual tuvieron a mi hijo 7 horas sometido a su voluntad por medio de una presión y amenazas extremas, que el pudo tolerar muy bien gracias a su fortaleza y a la oración de muchos. Al mismo tiempo tuvieron sometido al padre por 5 horas, negociando un rescate, dando vueltas por Santiago, amenazado de muerte. Esto es un delito grave, premeditado y articulado por muchos delincuentes asociados para cometerlo.

Les pido reenviar estas palabras, primero para agradecer el cariño de todos, segundo para que, sabiendo lo sucedido, otros no pasen por lo mismo y por último para que las autoridades asuman la responsabilidad de combatir estos delitos graves de manera seria.

Y como no hay mal que no saque bienes, la oración de tantos seguro fue un chorro de gracia que ayudará a nuestra sociedad y su futuro”.

Cabe recordar que Avaria Tarud lo llamaron a su casa, advirtiéndole que su padre había sufrido un accidente. Le pidieron algunas cosas que no dudó en llevar en su propio auto, siendo dirigido por teléfono por quienes lo timaron.

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