Diego Calderón, nuevo presidente de la Juventud DC: “El retorno de Lagos como presidente, es el sueño de la elite”

¿Cuándo empezaste a involucrarte en política?
Estudié en el Instituto Nacional. Ahí empecé a formarme como vocero estudiantil hasta que llegó la revolución pingüina. Me transformé en dirigente secundario y luego pasé a formar parte de la Asamblea Nacional de Estudiantes.

¿Militabas en la DC?
Sí, ingresé a los 15 años. Cuando salí del Instituto, entré a la universidad a estudiar Derecho y fui encargado universitario de la JDC, y después de eso, me metí en lo partidario, siendo electo consejero nacional y ahora asumí como presidente hace unos meses.

Igual es inusual que alguien tan joven se meta a la DC.
Soy un bicho raro, jajaja. Mi familia siempre ha estado vinculada al partido, porque mi abuelo fue beneficiario de la reforma agraria y desde entonces, hubo una vinculación con Eduardo Frei Montalva. Mi abuelo y mi bisabuelo eran campesinos y dirigentes sindicales. Crecí con bases de vinculación social. Y por mi visión cristiana se dio como proceso natural. Eso sí, siempre desde lo progresista. Ese es el rol de la Juventud, romper con lo aburguesado, con el statu quo. Tiene que ser capaz de marcar las distancias.

En tu blog escribiste que la Juventud DC vivía en una burbuja.
Es cierto. Tenemos que ver que la crisis política va mucho más allá y se transformó en una crisis social. El otro día leí en una encuesta que el 70% de los chilenos no confía en los demás y que más encima, creen que se van a aprovechar de ellos. Eso es un problema grave, que tergiversa las cifras de victimización, delincuencia e incluso limita la participación. Para mí, como dijo Ricarte Soto, Chile es la Corea del Norte del capitalismo y del neoliberalismo.

Pero en tu mismo partido muchos dirigentes se han hecho ricos en este sistema.
Evidentemente. Hay un grupo de la DC que se siente convencido ideológicamente del modelo económico. Ignacio Walker fue presidente del partido durante cuatro años y en su libro dice que la DC tiene que rechazar la idea de que el capitalismo es malo y avanzar hacia una modernización del mismo. Eso no lo comparto. Si bien este país se ha desarrollado, ha perdido mucha humanidad.

Si tal como dices estas más cercano al progresismo, ¿te sientes alejado de la directiva?
La DC se divide en visiones distintas, los que quieren seguir siendo vanguardia y otros que quieren equilibrar. No podemos señalar que nuestro único rol es gradualizar. Como dice el Papa, el capitalismo no aguanta para más y creo que eso no lo plantea la DC con suficiente energía.

LA DC ELITISTA
El año pasado, tu lideraste la petición de renuncia a Mariana Aylwin por ser adherente al movimiento de Andrés Velasco, Fuerza Pública, ¿por qué?
No fue personal. Militantes como ella utilizan sus posiciones de privilegio y ocupan medios de elite como La Segunda y El Mercurio, para tratar de ganar espacio y representarnos, eso me indigna. Decídanse. Están en la DC que está por los cambios o están afuera.

¿Te molesta la DC elitista de los “príncipes”?
Creo que no respetan las posiciones democráticas que nosotros asumimos. No queremos un partido oligarca. A mí me sacan en cara y me dicen: por qué no respeto la posición distinta de mi camarada. Yo quiero que ella respete mi posición y la de todo un partido.

Hace un tiempo, Mariana Aylwin dijo en The Clinic que consideraría la posibilidad de votar por Velasco en una presidencial.
Ese es el mal de la derecha, cuando se ve en tiempo de crisis recurre a independientes.

¿Ves a Mariana Aylwin como una mujer de derecha?
Yo creo que ella es una persona liberal y el liberalismo es contradictorio con la DC. Y quien lo niegue está con la brújula desorientada.

La DC en las últimas semanas ha sido protagonista de los conflictos internos en la Nueva Mayoría especialmente con el Partido Comunista ¿Te acomoda que la DC tome una posición “opositora” dentro de la coalición?
Yo creo que hay una construcción mediática, porque la relación con el Partido Comunista es una de las mejores en la Nueva Mayoría. Nos entendemos muy bien a pesar de tener diferencias. Son aliados, la DC no puede ser un estorbo a las reformas.

Entonces no te sientes representado por Ignacio Walker o Jorge Pizarro.
No, absolutamente no. Sin embargo, hay políticos que aportan a que nos vean como una oposición. Quintana, por ejemplo, nos critica todo el tiempo y nos engloba como conservadores cuando no es así.

¿Mandas a callar a alguien de tu partido?
Yo les pediría a todos los que tienen posiciones distintas, que guardaran silencio. Que respeten a la mayoría de la militancia.

¿Ignacio Walker?
Yo creo que sí. Me gustaría que entendiera que ni como presidente del partido o senador, puede tener una agenda personal. Hay mucho afán de protagonismo innecesario. A mí me tocó muchas veces discrepar con él cuando nuestros dirigentes estaban movilizados el 2011 para terminar con el lucro. ¡Él defendía el lucro contra la mayoría del partido!

¿Cuando eras estudiante, tenían un grito en contra de Walker?
Jajaja, sí, habían. ¡No al principado! Era uno de los típicos. Ignacio Walker lleva al partido a posiciones incómodas. Él es responsable de que la ciudadanía vea a la DC como un dique de contención. Nosotros no somos un dique, en muchas posturas estamos más avanzadas que la Nueva Mayoría.

BURGOS Y LA NUEVA MAYORÍA
Hablando de “príncipes”, ¿qué te pareció el espaldarazo que le dio el ex Presidente Lagos al ministro Burgos?
Es muy poco leal que Lagos haya declarado que hay gente que le pide que llegue a poner orden. ¿Qué es eso? ¿Acá hay un caos total? Eso es irresponsable. Obedece a generar la sensación de competencia Piñera versus Lagos 2017. Y eso para mí es la fórmula ideal de la elite. El retorno de Lagos como presidente es el sueño de la elite.

¿Lo mandas a guardar?
Cumplió su etapa y sería un retroceso. No entiendo su visita a Burgos.

A estas alturas parece obvia una tensión entre la presidenta Bachelet y Burgos.
No sé si es un tema de egos o de liderazgo, pero asumo que esa línea la marca la Presidenta. Más allá de los cuestionamientos, creo que el “realismo sin renuncia” es el camino adecuado. Las crisis las arman los que no quieren reformas. Esa gente no se sincera y yo preferiría que fueran transparentes.

¿Burgos no se ha sincerado?
Yo creo que está comprometido con el gobierno, pero también veo que hay otros sectores de elite que quieren frenarlas y lo demuestran respaldando a Burgos y al ministro Valdés.

Como presidente de la JDC ¿te sientes representado por Burgos?
Sí. Creo que su figura ha sido malinterpretada. Fue un error que la presidenta dijera que no había cambios. Porque sí hubo cambios de tiempos, plazos y formas de conducción. El ministro aporta seriedad para continuar la agenda.

¿Burgos no le pone freno a las reformas?
Para nada.

Pero es parte de la vieja escuela y sus conexiones están más ligadas al sector de los “príncipes” en la DC que de los progresistas.
No sé. Puede que sea evidente que el ministro trabaja en los pasillos con un solo sector de la DC, pero eso no tiene que influir en cómo trabaja con la presidenta. En Chile no hay figura del primer ministro, Burgos sigue las instrucciones de ella.

Pero da la impresión que no estuviera en coordinación con la presidenta.
Yo creo que él tiene un estilo distinto. Peñailillo generó una red de amigos que se sustentaba bajo el único argumento de ser el hombre de confianza de la Presidenta. Eso fue un desastre, porque separó a los partidos políticos. Burgos está tratando de reponer las relaciones con los partidos.

¿En las bases de la DC o en las Juventudes, no hay una tensión con Burgos?
Para nada.

¿Compartes el diagnóstico que la Nueva Mayoría está quebrada?
No creo, pero tiene problemas de convivencia. Los partidos tienen que hacer una autocrítica, porque la Presidenta no puede venir a zanjar diferencias. No es un jardín infantil. Todos estos actos producen desconfianza.

Algunos economistas justifican la desaceleración económica por una falta de dirección política clara.
Eso es una excusa de los empresarios, una oportunidad para pataleo. Los que sufren con las crisis son los trabajadores, ellos pierden sus empleos. Un empresario que gana 30 millones normalmente y que con la crisis gane 22, no me puede importar menos. No es un problema público.

Jovino Novoa dijo en The Clinic que le daba miedo que la NM se transforme en el peronismo.
Que ese caballero se dedique a sus acusaciones de la Fiscalía. Obvio que la Nueva Mayoría no es el peronismo. La coalición quiere una agenda de cambios que supere el sistema de mercado.

Edmundo Pérez Yoma duda que la Nueva Mayoría se proyecte después de este gobierno, ¿qué te parece?
Su reflexión es extemporánea y no es representativa de la DC, que desde los 80 ha sostenido que la única forma de provocar cambios sostentibles en la sociedad es en alianza con la izquierda. La Nueva Mayoría es la continuidad histórica de lo que Tomic alguna vez llamó la unidad social y su futuro depende de que hagamos un buen gobierno.

Y si Ignacio Walker fuera la carta presidencial de la DC, ¿lo apoyan?
En el caso que lo sea, llevará el programa del partido. Presentamos una reforma constitucional muy sustantiva, queremos un sistema provisional público de reparto y solidario y otro tipo de iniciativas.

Pero proponen un sistema de reparto y militantes históricos como Hugo Lavados están en los directorios de las AFP.
Hay una disociación entre la elite y la base militante. Por ejemplo, un dirigente sindical DC quiere dirigir a los trabajadores de los bancos, pero el presidente de la Asociación de Bancos es del partido. ¿Cómo nos van a creer? ¿Cómo vamos a cambiar las AFP si en todos los directorios nos encontramos con DC? ¿Cómo criticamos el caso La Polar si uno de los condenados es DC? Eso me indigna a mí también.

¿Te gustaría que se fueran todos los que tienen conflicto de interés?
No me gustaría que se fueran, quisiera que se sumaran a las ideas del partido.

EL CANDIDATO
¿Qué piensas de la legalización del aborto?
La posición de la Juventud es a favor de las dos primeras causales, pero en la tercera causal de violación no nos hemos pronunciado. El partido dejó a los militantes en libertad de acción.

¿Qué piensas tú?
Estoy a favor de las dos primeras causales, pero la violación me complica porque deja en el entredicho el derecho a la vida. Me carga que se divida la discusión entre pro vida y pro elección, pero yo sí creo que el feto es una persona con derechos.

¿La mujer no tiene derecho a decidir?
Estoy de acuerdo que pueden decidir sobre sus cuerpos, pero no creo que tenga derecho decidir sobre la vida de un tercero dentro de su cuerpo.

¿Y qué piensas de la despenalización del autocultivo de marihuana?
En todos los casos estoy de acuerdo. Pero se tiene que educar a la población. Es lo mismo que la educación sexual, hay que hacerse cargo.

¿Fumas?
La he probado, pero no me provoca nada. Ni un brillo.

¿Tienes un candidato presidencial en la DC?
Sí, pero no te lo voy a decir. La organización de los ciudadanos es fundamental para la JDC y por lo mismo, necesitamos un candidato que no le siga la corriente a los discursos de los economistas u opinólogos que abogan por cuidar a los empresarios.

¿Te refieres a la frase de Eugenio Tironi sobre cuidar a los ricos?
Tal cual. Los que producen la riqueza en este país son los trabajadores de las empresas. Los mismos que trabajan toda la semana como perros y siguen siendo pobres.

¿Para ti siguen teniendo sentido la izquierda y la derecha?
Ideológicamente sí, aunque Chile ya no es del Sí o del No. Tampoco es gente que permita la cocina entre cuatro paredes. Para ganarse la legitimidad ante todo el pueblo chileno se necesita más que eso.

¿Qué piensas de Andrés Velasco? Con la inscripción de Fuerza Pública como partido, de seguro será la carta para pelear el centro.
Velasco es un defensor del statu quo. Hay que recuperar, al menos en el ámbito laboral, lo que existía en Chile antes del golpe del 73. Con Velasco estará feliz una pequeña elite que no quiere cambios. Sus declaraciones son en CasaPiedra, en la CPC, en la Sofofa ¿Qué empatía puede tener alguien así con los trabajadores? Ninguna. En la DC hemos perdido harto, pero seguimos teniendo bases.

¿Quiénes se verían más perjudicados por su candidatura?
La clase de la que vengo yo, la clase media. Él cree que la clase media quiere libertades, más independencia, que el Estado no se meta en su vida. Yo viví una clase media de profesores que se sacan la mugre por un salario indigno, de profesionales que trabajan toda su vida para que a los 65 años sean pobres. La clase media quiere un Estado que se haga cargo de sus problemas. Y eso es un problema ideológico que aleja a Velasco de la gente. Quizás la ciudadanía está dudosa que la DC pueda con ese desafío, pero como partido lo tenemos que demostrar.