Fernando Melhuish, empresario que sufrió el robo de lujoso auto: “Ferrari siempre va a ser Ferrari, no hay nadie que le compita”

¿Es primera vez que te roban?
No, ya es la segunda vez que me roban. La primera vez se robaron dos motos y cinco bicicletas, pero no entraron a la casa. Esta vez lograron entrar, a pesar de que tenemos todos los medios de seguridad. Forzaron el portón y tuvieron acceso a la casa completa. Se robaron tres computadores, seis relojes, dólares, joyas, toda la ropa de los niños y unas tablas que teníamos para hacer wave. Y bueno, el Ferrari.

Me imagino que no es el único auto que tienes, ¿por qué no se robaron los otros?
Gracias a Dios justo estaba ese único auto. En otro andábamos nosotros y el tercero estaba en el servicio técnico.

¿Dónde estaban las llaves del Ferrari?
Tenemos dos cajas fuertes y las dos las reventaron. En una guardábamos la copia de la llave del Ferrari.

No es muy común tener un Ferrari…
Este es el tercer Ferrari que tengo. Más que nada lo tengo porque me gusta, ése es el fin del auto, y lo disfrutamos muy poco: se ocupa una vez a la semana con suerte. Se mantiene siempre guardado en la casa. Es un auto de lujo.

¿Por qué tener un Ferrari?
Piensa en esto, Porsche, Aston Martin, Audi, BMW son marcas que hacen publicidad. Ferrari no hace nada y es la marca número 1 de lujo en el mundo. Ferrari siempre va a ser Ferrari, no hay nadie que le compita. Se demora 2.9 segundos en ir de 0 a 100 kilómetros por hora.
Ya, pero con los tacos que hay en Santiago, en la práctica la velocidad no sirve de mucho.
Más que los tacos, ahora estoy pensando en no tener autos de este tipo porque la verdad es que llaman mucho la atención, y los ladrones cada vez están peores. Prefiero no tener auto pero sí tener vida. El día de mañana me pueden pegar un balazo solamente por querer dar una vuelta. Ellos van a estar felices, pero a mí me van a dejar muerto y a la familia sin su papá.

¿Se roban estos autos solo para sacarlos a pasear?
Lo que hace esta gente con este tipo de autos, porque no los pueden reducir ni mandar para afuera, es disfrutarlos: dar un par de vueltas, llevarlos donde viven, mostrárselos a toda la gente y después dejarlos botados. Eso es todo. Gracias a Dios, a la hora después del robo el auto apareció y estaba intacto, así que por ese lado súper bueno.

Entre el 2010 y el 2011 la venta de Ferraris en Chile aumentó un 600%
Desde el año pasado que se vende un Ferrari mensual. Antiguamente se traían por importación directa, pero ahora SK es el representante de la marca. Arturo Vidal también lo compró con ellos. Hay bastantes autos Ferrari en la calle. También existe el Club Ferrari, donde somos alrededor de 30 o 35 personas y todos nos conocemos.

A los del Club Ferrari también les habrá dado miedo tu robo…
Están asustados, no tanto porque se roben el auto sino por lo que le puede pasar a uno. Hay gente que está pensando en vender. Es lo que pasó tiempo atrás en Brasil, que andabas dos cuadras y te lo robaban. Hay uno que ya vendió.

Tú eres dueño de varias automotoras, ¿se ha percibido un cambio en el mercado automotriz por la delincuencia?
Todos los clientes piden los autos con láminas de seguridad, no hay auto, económico o caro, que vaya sin láminas para no tener problemas con piedrazos o portonazos. Hay otros que los piden con los vidrios oscuros y todos vienen con alarma. Estamos hablando de 160, 250 mil pesos más, que es un gasto marginal comparado a lo que te puede pasar.

¿Te han robado en la automotora?
El año pasado se llevaron dos autos, y hace menos de dos meses nos robaron otro, un Opel 0 kilómetros desde la puerta del local. Nunca aparecieron. Cada auto lo tenemos con su pitbull, que es una traba para las ruedas, pero esta gente se las ingenia igual. A veces entran como clientes, sacan las llaves y empiezan a ver cuál es el auto al que se le dispara la alarma, y se lo llevan.

¿Vendes también autos de lujo?
Tenemos dos sucursales, una en Vitacura y otra en Las Condes, donde vendemos vehículos que cuestan más de 20 millones de pesos. Tenemos muchos clientes que van cambiando los autos cada dos años. También traemos pedidos especiales que son de Miami: Ford Raptor, Ford Mustang Shelby, vehículos que son más exclusivos y que acá no se comercializan.

VIVIR EN LA CÁRCEL

¿Qué medidas de seguridad tienes en tu casa?
Cerco eléctrico, alarma, portones con un sistema especial reforzado, doble chapa en las puertas de entrada y láminas de seguridad en los ventanales. Después del robo, instalamos cortinas eléctricas de aluminio que se cierran de forma automática, además de otros portones especiales y unos sensores de temperatura para que la alarma suene cuando estén en el patio.

¿Entre los vecinos también existe una preocupación?
No es primera vez que roban en el sector: a mi vecino le hicieron un portonazo, dos casas más allá también entraron a robar. Ahora hicimos un grupo de whatsapp con todos los vecinos, también estamos tratando de tomar acciones dentro de la municipalidad de Lo Barnechea, para que nos protejan o nos pongan guardias en las esquinas. Si hay costos con esto en el municipio, trataremos de asumirlos. Olvídate, es casi estar viviendo en la cárcel.

¿Y el contingente policial de tu barrio cómo es?
Es bueno, pero lamentablemente esta gente sabe en qué minuto entrar en la casa. Cuando me entraron a robar, uno ve en las cámaras que los ladrones estaban dentro de la casa y pasó una patrulla, pero no se dieron cuenta. Ya no andan como antes, que eran más llamativos: usaban taxis, autos viejos. Ese día andaban en una Nissan X-Trail del año, cero kilómetros. Andan en Audi o autos que no llaman la atención dentro del barrio que uno vive.

¿Hay un problema con la seguridad ciudadana?
Más que la seguridad, el problema es que esta gente está dos meses en la cárcel y vuelven a salir, y vuelven a robar y vuelven a salir, y vuelven a robar… Entonces si no se pone mano dura desde un principio en el gobierno, vamos a seguir con el mismo problema.

¿Participaste del cacerolazo que hubo hace poco?
Sí, también del bocinazo. Estas cosas son buenas porque ayudan a que el gobierno tome alguna acción. Lo que hay que hacer es visibilizar y poner mano dura. Sin duda que la delincuencia ha empeorado. Nunca se había visto como en los últimos seis, siete meses. Uno prende la tele y en las noticias no hay casa a la que no entren. Son robos tras robos.

¿Tú en qué lo has notado?
La gente está afectada y andan todos mucho más asustados. Me ha pasado que voy a tocarle el timbre al vecino y en vez de atender el citófono, grita porque la gente por todos lados anda asustada. Es cosa de ver las noticias: el otro día una niña estaba en la clínica internada porque le trataron de robar un auto que no pasa los tres millones y medio. Esta gente está dispuesta a matar una persona hasta por 80 mil pesos.