La furia de Jadue en el aeropuerto ante rumores de su renuncia a la ANFP

Pocos minutos antes de las 13 horas, el presidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP), Sergio Jadue, pisó suelo nacional proveniente desde Brasil (en versión de la ANFP), y en plena losa del aeropuerto hizo frente a los rumores que se levantaron durante las últimas 24 horas respecto de su presunta renuncia.

Tal como mostraron las imágenes de televisión, el regente se vio exaltado y emplazó directamente a uno de los periodistas presentes en la terminal aérea de Santiago.

“Es algo súper burdo, un cahuín típico chileno, lamentable, inventado por un dirigente de un equipo de mayor convocatoria que da boletas ideológicamente falsas a Aguas Andinas y que inventó todo esto”, lanzó Jadue.

“Descarto una renuncia, no tengo motivos, no hay razón para hacerlo, pedirle disculpa a mi familia, porque ni siquiera a ellos les avisé de este viaje”, complementó.

Según los trascendidos, Jadue había partido rumbo a Estados Unidos para declarar ante la fiscal  Loretta Lynch, la persecutora qie investiga el caso de los 100 de dólares que habría pagado la empresa Datisa a varios dirigentes del fútbol sudamericano por derechos televisivos de algunas competencias, entre ellas la Copa América.

“Sergio dijo que viajó urgente porque el 27 de noviembre hay comité ejecutivo de la Conmebol y fue a hablar con Marco Polo del Nero (presidente de la CBF investigado por el FBI) para pedirle su cupo en el Comité Ejecutivo de la FIFA. Del Nero va a renunciar, al igual que (Luis) Bedoya (timonel de la Federación Colombiana). Sergio no renuncia y no fue a EE.UU. a declarar en la Fiscalía de Nueva York”, fue la versión que entregó la ANFP.

Al respecto, Jadue dijo que “no avisé que viajaba a parte de la ANFP, tengo otras cosas que hacer, estuve dos noches no tenía por qué dar información al respecto no es un tema de la ANFP, va a haber un comité ejecutivo en Brasil a fin de mes”.

Pero la furia de Jadue no se quedó ahí, también agregó que “es primera vez en 5 años que yo aclaro rumores. No me gusta hacerlo, pero me parece necesario. Sin embargo, a mi juicio hay algo detrás, investiguen quién está detrás, averigüen qué compra viene ahora, qué es lo que se quiere hacer con el fútbol chileno, qué es lo que se quiere hacer con su canal de televisión, con el campeonato nacional. Aquí hay muchas cosas detrás, son miles de millones de dólares y parece que yo soy quien pone cordura y eso a algunos no le gusta”.

Quizá advirtiendo que las cámaras captaban su ira, el dirigente intentó matizar, pasando al plano de lo netamente futbolístico.

“Espero que hoy Chile gane y enfrente los partidos como corresponde. Viajaremos a Uruguay la otra semana y lógicamente va a estar todo el trabajo nuestro como directorio de la ANFP”.

Cuando estalló el caso de los sobornos, a Jadue se le involucró como supuesto receptor de 1,5 millones de dólares.

“El informe que aparece es incompleto, el 2013 hubo un anticipo para cada federación por las tres próximas ediciones de Copa América y la ANFP recibió un adelanto de un millón de dólares porque la Conmebol dio la cuenta de nosotros, no hay nada ilícito”, dijo a Cooperativa en esa oportunidad el timonel del fútbol criollo.

“Nosotros recibimos un millón de dólares de anticipo por derechos de televisión, el depósito fue en 2013, el comprobante está en nuestra federación. Ese pago fue por anticipo de la realización de la Copa América, eso después se descontaba del total”, se extendió.

Según el documento revelado por la Fiscalía de Nueva York, “Datisa acordó pagar 100 millones de dólares en sobornos a oficiales de Conmebol -todos oficiales de FIFA- a cambio del contrato de Copa América firmado en 2013: 20 millones por la firma del contrato y 20 millones por cada una de las cuatro ediciones del torneo”.

“Cada pago de 20 millones fue dividido en sobornos de esta manera: 3 millones para cada uno de los “top” oficiales de Conmebol: el presidente de la Confederación y los presidentes de las asociaciones de Brasil y Argentina; 1,5 millones de dólares a cada uno de los otros siete presidentes de las federaciones de Conmebol; y 500 mil dólares para otros once oficiales de Conmebol”, se leyó también en el texto.

Ese día los nombres que sacó el órgano persecutor fueron Eugenio Figueredo, Rafael Esquivel, Nicolás Leoz y José María Marín, además de cinco “cómplices” cuyos nombres no se revelan.