Desmentido sobre “Milicogate: los desconocidos traspasos financieros de Piñera”

Como ex Coordinador de Finanzas Internacionales del ministerio de Hacienda, es mi deber desmentir categóricamente una serie de afirmaciones e insinuaciones falsas aparecidas el día 23 de diciembre de 2015, tanto en la versión on-line como escrita de The Clinic, en el artículo titulado “Milicogate: los desconocidos traspasos financieros de Piñera”. Apelando a información que se aparta por completo de los hechos objetivos, el artículo sugiere la existencia de una suerte de manejo “oscuro” de los recursos excedentarios de la Ley Reservada del Cobre durante el gobierno del Presidente Piñera.
En el citado artículo se afirma o infiere:

Que en 2010 el Gobierno ingresó a Chile cuantiosos recursos asociados a los excedentes de la Ley Reservada del Cobre, afectando con ello al tipo de cambio y sugiriendo, además, que pudo haber uso de información privilegiada.

Que esos dineros se invirtieron en bancos locales, sin licitación alguna, hasta julio de 2013 (“la pasada de la banca chilena por la ley reservada del cobre”).

Que en julio de 2013 esos dineros se sacaron de Chile, afectando nuevamente al tipo de cambio y sugiriendo nuevamente el posible uso de información privilegiada.

La realidad objetiva es precisamente la contraria de la idea de malas prácticas y supuestos manejos irregulares que el artículo plantea tanto en su titular como en su contenido, incluyendo ciertas imputaciones efectuadas por el diputado Ricardo Rincón. Lo cierto es que, a menos de un año de iniciado el gobierno del Presidente Piñera, se puso fin a décadas de manejo opaco y discrecional por parte de las FF.AA en la inversión de estos recursos provenientes de la Ley Reservada del Cobre. Así, en enero de 2011 se instruyó por decreto a que, en adelante, estos fondos fuesen administrados por el ministerio de Hacienda, actuando el Banco Central como agente fiscal para la inversión de los citados recursos que pasan a denominarse Fondo de Contingencia Estratégica (FCE). Para tal efecto, se mandata además a que se siga la misma política de inversión del Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES), el principal fondo soberano de Chile y que es íntegramente invertido en el extranjero. Este cambio fue latamente difundido tanto en la prensa de la época como por el ministerio de Hacienda.

No cabe duda que lo anterior fue una contundente mejora institucional. Por lo anterior, uno hubiera esperado de un medio del prestigio de The Clinic un reconocimiento del avance que significó en pos de mayor transparencia y profesionalismo de estas inversiones, en lugar de sembrar un artificioso manto de dudas.

Para absoluta claridad, esta es la cronología de los hechos:

03/01/2011: DS Nº1 del ministerio de Defensa autoriza al Ministerio de Hacienda para efectuar inversiones de recursos de la ley Nº 13.196.

10/01/2011: Decreto Nº19 de Hacienda designa al Banco Central de Chile (BCCh) como agente fiscal para la inversión financiera de los recursos de la Ley Reservada del Cobre que le transfiera Defensa, denominados Fondo de Contingencia Estratégica (FCE).

12/04/2011: Oficio Nº437 de Hacienda comunica al BCCh en su calidad de agente fiscal las pautas de inversión y custodia del FCE, siguiendo las mismas pautas establecidas para el Fondo de Estabilización Económica y Social (FEES). Estas pautas exigen que la totalidad de los recursos del FCE deben invertirse en el extranjero, en inversiones de bajo riesgo y con la siguiente composición de monedas: US$, EEUU 50%; euro, Alemania 40%; yen, Japón 10%.

28/04/2011: Completados los procedimientos administrativos y de implementación de la agencia fiscal, en abril de 2011 las FF.AA. realizan el primer traspaso de recursos. Estos recursos se enteran en dólares y se invierten íntegramente fuera de Chile siguiendo las directrices de inversión ya mencionadas.

29/09/2011: En oficio Nº 1259 de Hacienda, siempre manteniendo la totalidad de las inversiones del FCE fuera de Chile, se comunica al Banco Central una modificación tendiente a concentrar el portafolio de inversiones en Estados Unidos. De esta forma se abandona el Yen y el Euro y todas las inversiones quedan en dólares. Ello en consideración a minimizar el riesgo de descalce de monedas, dados los objetivos y eventuales contingencias del FCE.

17/07/2013: El oficio Nº1635 de Hacienda comunica al Banco Central una modificación de directrices que disminuye el plazo promedio de las inversiones que se efectúan en el mercado norteamericano. Ello en consideración a los objetivos de horizonte de inversión del ministerio de Defensa.

Desmentido
En base a estos antecedentes, resulta falso señalar que el Gobierno o el ministerio de Hacienda hayan iniciado movimientos financieros de estos fondos en 2010. El decreto que da potestad para administrar los fondos data de enero de 2011 y los primeros traspasos, una vez ultimados los detalles legales y administrativos con el BCCh en su calidad de agente fiscal, solo empiezan a ocurrir en abril de 2011.

El cómo se invertían estos recursos con anterioridad a enero de 2011 es precisamente el problema que el cambio institucional apuntó a subsanar: poner fin a la verdadera caja negra que durante años representó la inversión de los excedentes de provenientes de la Ley Reservada por parte de las FF.AA. Huelga decir, en todo caso, que los fondos que las FF.AA. traspasan al FCE a partir de 2011 estaban íntegramente denominados en dólares y fueron invertidos en el extranjero siguiendo la política de inversión del FEES. En consecuencia, resulta imposible que haya habido un impacto cambiario en 2010 o 2011 como el artículo especula existió, ni menos aún que haya podido haber uso de información privilegiada.

Resulta falso también señalar que el gobierno o el ministerio de Hacienda hayan cerrado en algún momento contratos o licitaciones privadas con bancos locales para la administración de estos fondos, ni menos hasta 2013. Los fondos del FCE, emulando las inversiones del FEES, fueron siempre invertidos íntegramente fuera de Chile, existiendo prohibición expresa de invertir con bancos locales o en algún otro instrumento financiero chileno.

Por la misma razón, también es falso que haya habido una operación de salida de dólares en 2013. En consecuencia, por definición también es falso que se haya afectado al tipo de cambio en 2013 por esa vía, ni menos aún que haya podido haber uso de información privilegiada.
Sobre este particular, el oficio de julio de 2013 que se adjunta en el artículo periodístico fue mal citado. Una lectura atenta del mismo permite corroborar que lo que hace el Ministro de Hacienda no es instruir al BCCh para sacar fondos fuera de Chile sino que solicitarle incorporar una modificación en las directrices de inversión que acorta el plazo de las inversiones que se mantenían íntegramente en el mercado norteamericano.

Estoy cierto que los hechos objetivos anteriores debieran bastar para desmentir la serie de afirmaciones e insinuaciones infundadas contenidas en el artículo periodístico en cuestión. Ellas injustamente enlodan a la administración del ex Presidente Piñera y reflejan una falta de rigor que sorprende en un medio profesional como es The Clinic. Esta equivocada interpretación de los hechos se hubiera podido prevenir fácilmente por la simple vía de tomar contacto con algunas ex autoridades de la época con el objetivo mínimo de chequear la veracidad de la información difundida.

Ignacio Briones R.
Ex coordinador de Finanzas Internacionales, Ministerio de Hacienda (marzo 2010-julio 2013)