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Nacional

29 de Marzo de 2016

Pampa Hermosa, el proyecto de Soquimich investigado por extracción irregular de aguas en el Salar de Llamara

Desde el año 2013, la Dirección General de Aguas ha advertido a la Superintendencia de Medioambiente que Soquimich cambió por cuenta propia los parámetros de medición en los pozos del salar de Llamara, incumpliendo la RCA que permite su funcionamiento y poniendo en riesgo el ecosistema. En abril y junio de 2015, el Core de Tarapacá formalizó la denuncia contra la compañía que sigue operando sin problemas en la región, todo ello en medio de acusaciones de los consejeros de presiones desde el oficialismo para proteger a SQM. Hoy la SMA tiene una investigación en curso. En SQM aseguran que cumplen la legislación ambiental.

Por

SQM

El 4 de junio de 2015, cuando la crisis por el financiamiento transversal de la política por parte de Soquimich, ya había significado la renuncia del entonces ministro de Interior, Rodrigo Peñailillo, el presidente del Consejo de Gobierno Regional de Tarapacá, Richard Godoy Aguirre, envió un oficio al Superintendente de Medioambiente, Cristián Franz Thorud.

El documento, que The Clinic Online pudo revisar, da cuenta que desde el año 2014, y tras una serie de análisis, se había determinado que la minera no cumplía con la regulación ambiental vigente y había modificado unilateralmente las cuotas de extracción de agua del salar de Llamara sin avisar a las autoridades competentes.

Tal situación, ya había sido expuesta a la Superitendencia en un oficio previo del 7 de abril, al que se hace referencia en el escrito de junio. En suma, lo que se consigna en el texto es que se busca “poner en su conocimiento los graves hechos en que ha incurrido y está incurriendo actualmente la empresa Soquimich S.A, titular del proyecto Pampa Hermosa, que afectan y atentan en contra de las normas legales sobre preservación del medio ambiente”.

Hoy, a casi un año del envío de las primeras denuncias, el consejero Jorge Zavala, resume la situación actual en la zona: “Soquimich en la región está por sobre todo. No es posible que sigan extrayendo agua de forma irregular, sin informar a los servicios pertinentes. Nosotros con Richard (Godoy) viajamos a informar a Santiago y nos dijeron que iban a hacer algo y lo único que han hecho es un par de visitas. Llama la atención que otras empresas tengan que cumplir con toda la regulación y que Soquimich, no”, plantea.

INCUMPLIMIENTOS
Fue en el año 2010, cuando el proyecto Pampa Hermosa obtuvo la RCA que le permitió aumentar la producción de yodo en el área industrial Nueva Victoria en 6.500 toneladas anuales, logrando una capacidad total de 11 mil toneladas.

El proyecto consideró, además, construir una nueva planta de nitrato con una capacidad de 1.200.000 toneladas al año en el Área Industrial de Sur Viejo.

Así, en el Salar de Llamara, se planificó una inversión gradual, en 30 años, de U$ 1.033 millones de dólares.

A poco andar, comenzaron los problemas que fueron expuestos en la Orden 49 de fecha 9 de abril de 2014 de la Dirección General de Aguas dirigido a la Superintendencia del Medio Ambiente.

En éste se establece que tras revisar los informes hidrogeológicos presentados por SQM y comparándolos con los compromisos adquiridos por la compañía se detectó que “el titular efectuó un refinamiento topográfico que derivó en la actualización de las cotas de referencia desde donde se mide la profundidad de la napa, la cota de base de cemento y la cota de la superficie de terreno de todos los puntos”.

En resumen, Soquimich, según el documento, cambió por cuenta propia los parámetros de medición, lo que repercutió en que no se diera cuenta de las bajas preocupantes en el agua de los pozos, y, por lo mismo, no se iniciara en conjunto con las autoridades las medidas de mitigación destinadas a evitar efectos irreversibles en el ecosistema.

El documento profundiza en que no se han respetado las reglas establecidas en la RCA 810/2010, que le dan el marco legal a la empresa para operar y, peor aún, ni siquiera se ha actuado conforme a los protocolos establecidos por la propia compañía. Así se determina que los niveles de agua reportados “se encuentran por debajo de los umbrales comprometidos en la RCA y también por debajo de los umbrales ajustados por topografía, si estos fueron válidos”.

Las conclusiones entregadas en abril de 2014 eran coincidentes con comunicaciones previas del Departamento de Conservación y Protección de Recursos Hidrícos de la Dirección General de Aguas enviadas a la SMA en abril de 2013 y enero de 2014, en que además se acusa concentraciones elevadas de arsénico en algunos de los pozos de extracción.

Con todo, la compañía continuó funcionando sin ninguna sanción.

Al respecto, el presidente del CORE, Richard Godoy Aguirre, destaca que “ahora que se conoce el poder real de Soquimich uno entiende muchas cosas”.

“Las anomalías comenzaron hace mucho y por más que se insiste en que hay un historial de incumplimientos, no sucede nada, no se toman medidas. Es rarísimo”, asegura.

Desde Soquimich, en tanto, aseguran que “SQM no comparte las acusaciones contenidas en la denuncia presentada en junio 2015 frente a la Superintendencia de Medio Ambiente. La denuncia está siendo analizada por la Superintendencia tal como lo estipula la normativa, y la empresa ha entregado toda información y colaboración requerida, y esperamos con ello que se esclarezca cualquier duda”.

También precisan en la empresa que “SQM cumple con toda la normativa medioambiental en el desarrollo de sus proyectos, aplicando robustos planes de seguimiento y alerta temprana con el objetivo de preservar el entorno. Nuestra gestión ambiental se desarrolla con los mejores estándares, y los sistemas donde operamos se encuentran en muy buenas condiciones” y que “en el Salar de Llamara, en el marco del proyecto Pampa Hermosa, SQM ha desplegado un plan de conservación para el estudio y protección del bosque nativo de tamarugos y los puquios presentes en el lugar. Este proyecto además cuenta con un amplio y completo trabajo de conservación de los bosques de tamarugos en la Reserva Nacional Pampa del Tamarugal, gestión ambiental única en el país, y del cual es parte el Centro de Educación Ambiental construido por la Compañía en dicha reserva para que la información esté al alcance de la comunidad”.

Fuentes de la compañía acusan, además, intereses creados, ya que Godoy tiene una empresa de camiones que en algún momento brindó servicios de contratista a Cosayach, del grupo Errázuriz. Julio Ponce Lerou y Francisco Javier Errázuziz han sido eternos enemigos en el área del yodo.

PRESIONES
-No le voy a hablar de si hubo o no presiones cuando se presentó lo de Soquimich, porque yo personalmente tengo que andar con dos guardaespaldas. El asunto del agua, que yo defiendo, acá es muy difícil-, precisa el CORE Isidro Saavedra respecto del secreto a voces en el Consejo sobre los llamados que hubo en la época para frenar la denuncia contra SQM.

Distintos consejeros consultados por este medio, coinciden en que operadores de al menos dos senadores concertacionistas cuyos cercanos recibieron recursos de SQM, llamaron para interceder a favor de la empresa y frenar la denuncia.

“Eso fue así, nos decían que SQM era una empresa seria, que aportaba trabajo. Después salió lo de las boletas y quedó claro por qué había tanta preocupación”, plantea otro integrante del Consejo consultado por este medio.

Otros dos, en tanto, aseguran que ellos no recibieron presión alguna, pero que supieron que sus pares estaban “complicados” por la preocupación del oficialismo.

Más allá del contexto político, desde la SMA precisan que sí se han hecho gestiones respecto de las denuncias, pero que los procesos de la organización, por presupuesto y procedimiento, son lentos.

“A través del Ordinario N° 1181, la jefa de la División de Sanciones de la SMA, Marie Claude Plumer, respondió al denunciante que se inició una investigación de los hechos denunciados, conforme a las atribuciones legales y procesos correspondientes.

La SMA ha realizado 2 fiscalizaciones respecto de esta denuncia, y recientemente requirió información a la empresa, SQM, respecto de variables ambientales para obtener información más robusta dentro del proceso fiscalizador”, aseveraron desde la Superintendencia.

Royalty a la carta: Los correos que revelan cómo las grandes mineras definieron la ley de Piñera – The Clinic Online

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