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Nacional

1 de Abril de 2016

Obispo Goic propone sueldo ético de 400 lucas: “El problema es cómo superamos esta codicia que existe”

"En este país a veces hay bonos que los gobiernos ofrecen como una especie de subsidio y, claro, es bienvenido el bono porque ayuda, pero lo curioso es que hay mucha gente que trabaja y con el fruto de su trabajo no alcanza a cubrir los gastos. Uno esperaría que el sueldo logro satisfacer las necesidades fundamentales", criticó el religioso.

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El obispo de Rancagua y vicepresidente de la Conferencia Episcopal, Alejandro Goic, propuso un reajuste al sueldo ético (o mínimo) chileno, para que pase derechamente de los 250 mil pesos a las 400 lucas.

En entrevista con el diario Encuentro, el religioso que hace años pidió otro reajuste al sueldo mínimo, manifestó que “yo creo que cerca de $400 mil debería ser el nuevo sueldo ético, con el alza de la vida en estos cerca de diez años. Aunque insisto, ese es un cálculo que hay que hacer, con cuánto dinero puede vivir una familia con dignidad, pero sin duda que $250 mil ya es muy poco”.

En ese sentido, Goic criticó que “este es un país poco equitativo. Pocos ganan mucho y muchos ganan poco. La cifra que salió hace nueve años fue simbólica. El mínimo en ese entonces era cercano a los $150 mil, pero yo recuerdo que salía al supermercado a hacer las compras del mes y veía que el carrito se llenaba con cosas sencillas y elementales. Pagaba cerca de $100 mil pesos, entonces me preguntaba ¿cómo es posible que la gente pueda vivir?”.

Añadió que “yo puse una cifra simbólica, que según los expertos fue la que suscitó el debate. Si yo no hubiera puesto una cifra (los 250 mil), no pasaba nada. Si uno aplica el IPC y todas las alzas, ya se quedaron cortos con los 250 mil”.

En este punto de la conversación, el obispo lanzó una crítica social en torno a cómo se reparte la torta en este país: “El problema de fondo es cómo superamos esta codicia que existe y cómo somos capaces de comprender que para que haya una sociedad tranquila, en paz y justa, tenemos que ser una sociedad más distributiva de los bienes”.

Recalcó que “si yo soy empresario y a mi empresa le va bien ¿por qué le va bien? Porque tengo trabajadores responsables y profesionales, gente que contribuye al desarrollo de mi empresa”.

“En este país a veces hay bonos que los gobiernos ofrecen como una especie de subsidio y, claro, es bienvenido el bono porque ayuda, pero lo curioso es que hay mucha gente que trabaja y con el fruto de su trabajo no alcanza a cubrir los gastos. Uno esperaría que el sueldo logro satisfacer las necesidades fundamentales”, sentenció.

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