Padrón del mal derribó a Javiera Blanco

Varias veces se habló de la inminente salida de Javiera Blanco del ministerio de Justicia. La personera, cercana a la Presidenta Michelle Bachelet, parecía, sin embargo, resistente a cualquier crisis: el eterno paro del Registro Civil el año pasado, el escándalo por las pensiones en Gendarmería y el cuestionado manejo del Servicio Nacional de Menores, institución en que no existía, por ejemplo, información organizada sobre los niños fallecidos en centros dependientes del Estado.

Sin embargo, el desajuste que provocó el Registro Civil, dependiente de su cartera, en el padrón electoral, terminó por derribar a la invencible ministra. A pocos días de las elecciones municipales, y pese a fallidas y criticadas gestiones de última hora, 485 mil personas no podrán votar en la comuna donde eligieron sufragar debido a un cambio unilateral de sus domicilios. Blanco pagó el costo.

El error, en un inicio, era aún más grave. En 2013, tras una renovación del sistema tecnológico del Registro se entregaron al Servicio Electoral datos errados de 7.830.101 personas, es decir, el 50% del padrón electoral. De ellos, más de 3 millones correspondían a personas fallecidas o se trataba de datos duplicados. Se depuró hasta llegar a medio millón de ciudadanos con domicilio errado.