Habla el protagonista del viral “Tengo que dejar las drogas”: “Me fui pensando ‘lo hice de nuevo viejita’, riéndome solo”

Leftaro Zebrak es sonidista y hasta este domingo aparecía con su nombre en internet en IMDB, una base de datos de cine, participando en el corto “Lecciones para principiantes” y “Tendida mirando las estrellas”.

Estos datos no sirven de nada sino hasta saber que es el protagonista del video más viral de las elecciones, “Tengo que dejar las drogas”.

Ahí aparece robándose una caja de plástico con votos en el Estadio Nacional, hasta que la periodista Carla Zunino lo reta y le pregunta qué diablos está haciendo.

El medio Pousta lo encontró y le preguntó qué fue lo que motivó su aparición, ante lo cual el hombre -que no es un aparecido en internet y ha aparecido en otros virales- relata con tranquilidad cómo fueron los hechos.

“Yo fui a votar al Estadio Nacional, soy de esas personas que como buen ciudadano se inscribió, antes de que fuera automático el voto” asegura al inicio. Luego continúa explicando que “voté y cuando me iba, veo un séquito de seres disfrazados de superhéroes, que estaban intentando al parecer ser enfocados por la cámara. Me acerqué encandilado por el brillo de sus trajes. Y todo decantó en lo que todo Chile vio”.

Cuando el medio independiente trata de indagar en más detalles, Zebrak contesta que “Yo estaba bajo la influencia de estupefacientes”.

Consultado por si fue un acto de protesta, el sonidista replica que “No te voy a decir que sí, ni tampoco que no, porque no lo sé. Solo te puedo decir que la urna me llamó. Es que me pareció muy extraño que fuera un tupper, es como que solo en Chile (…) es como parte de la idiosincracia”.

Pousta insiste en que el hombre explique el momento en que dice que debe dejar las drogas y Zebrak manifiesta que “Quisiera decir que fue un momento Koko Stambuk, es atrayente plantearlo así. Pero la verdad es que siento que fue más en la senda de Maradona o grandes ídolos que han tenido problemas con las sustancias. Fue un momento de autoconciencia en el que dije ‘Ya basta'”.

Siempre en un tono irónico, Zebrak agrega que “Yo me fui pensando “lo hice de nuevo viejita”, riéndome solo. De la situación, de las instituciones. De todo. Pasé al supermercado a comprar comida y no tengo datos móviles entonces me demoré en cachar, así que cuando llegué fue bien de golpe todo… me tengo que ir ahora, discúlpame”.