Trump quiere su parada militar

Según el Whasington Post el Presidente Trump quiere su parada militar.

Idea que se le metió en la cabeza tras su visita a Francia, donde asistió junto a Melania Trump, al Presidente francés y su señora, Emmanuel y Brigitte Macron, a la parada del ejército galo.

Vale decir que en Francia las paradas militares son un hecho simbólico importante y parece que Trump lo intuyó.

Algo que al principio era solo una idea suya, que había conversado con pocos cercanos, en una reunión en la que estaba rodeado de altos oficiales del ejército, incluso el Secretario Jim Mattis y el Gen. Joseph Dunford Jr, se transformó más bien en una orden, una directiva presidencial según los oficiales.

“La orden fue: Quiero una parada militar como la de Francia” relata un oficial que quedó anónimo dado que planes así se discuten en secreto. “En esto están trabajando los rangos más altos de nuestras fuerzas armadas”.

Los shows militares en Estados Unidos no son comunes, no se hacen todos los años y no son nada baratos. Traer los tanques Abrams a Washington no va a ser fácil. Pero el Presidente quiere tanques, aviones, una demostración de fuerza.

La inspiración le dio el año pasado, en Francia. Trump quedó muy impresionado por las tropas francesas marchando por Avenue des Champs-Elysees con tanques, aviones de guerra, la bandera francesa en el Arc de Triomphe.

Muchos oficiales dicen que no obstante se esté planeando efectivamente todavía la organización de este evento está en su fase inicial. No existe una fecha precisa: se habló del Memorial Day el 28 de mayo pero el Pentágono preferiría el 11 de noviembre, el Veterans Day.

El lugar preciso tampoco se sabe: Trump querría que a parada fuera por Pennsylvania Avenue, la calle que conecta el Capitol Center a la Casa Blanca.

Con extremas excepciones, como la de Bush Padre en 1991 cuando ganó la Primera Guerra del Golfo, los presidentes de Estados Unidos han evitado demostraciones espectaculares de fuerza militar; son eventos asociados más bien a Rusia o la Unión Sovietica, a Corea del Norte, a China.

Según expertos del mundo militar “las paradas militares les sirven a ejércitos débiles, que necesitan el espectáculo para distraer al mundo del hecho que son fuerzas armadas inferiores”.

Muchos generales se oponen a esta idea. De hecho lamentan presupuestos bajos, insuficientes para mantener mejor la enorme máquina militar gringa y que el dinero de la parada podría servir a muchas otras iniciativas que mejorarían el estado actual de las fuerzas armadas.

EL Washington Post compara esta iniciativa trumpiana a actitudes que solo se ven en países totalitarios e insiste en que mañas como la que le dio al Presidente son peligrosas, controvertidas y que simbolizan de cierta forma una debilidad de fondo.