Norberto Girón, el hombre clave en la repatriación de Joane Florvil

Desde hace cinco años que Norberto Girón es el jefe de misión de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en Chile. Lo conocimos en un almuerzo al que fuimos invitado con el periodista Jorge Rojas, luego que éste ganara un importante premio internacional organizado por la institución con un reportaje publicado en The Clinic en noviembre del año pasado: “Atrapados en el Servicio Médico Legal: Morir como haitiano en Chile”.

Girón, un tipo afable y carismático, apasionado por los temas de migración, reconoció que el reportaje de nuestro medio lo había impactado muchísimo y comenzó a preguntarnos cómo lo habíamos concebido. Le explicamos que luego de leer una pequeña nota en la prensa, donde se informaba que existían varios cuerpos de extranjeros en el Servicio Médico Legal, decidimos contar sus historias y las razones de por qué tras varios meses todavía se encontraban allí. Fue así como llegamos al caso de Joane Florvil, la mujer haitiana que fue acusada de abandonar a su hija en una oficina de la Municipalidad de Lo Prado y que murió un mes después en la posta central.

-¿Y por qué no la repatriamos?-, propuso Girón tras escuchar la historia.

Esto fue hace poco menos de un mes. El diplomático se tomó a pecho la situación y comenzó a gestionar reuniones con autoridades. Tras reunirse con el Ministro de Justicia, Hernán Larraín, se gestó una mesa de trabajo para concretar la repatriación de la mujer haitiana, cuya historia se transformó en un ícono en la lucha contra la discriminación racial en nuestro país.

¿Fue muy difícil ponerse de acuerdo? ¿Qué dificultades tuvieron?
No hubieron trabas, hubo un compromiso de todas las autoridades. Fue un trabajo conjunto entre la OIM, el ministerio de Justicia y Derechos Humanos, el ministerio de Interior y Seguridad Pública, el ministerio de Relaciones Exteriores, la Seremi de Salud Metropolitana, el Servicio Médico Legal, el Registro Civil y también una importante coordinación con los representantes de la familia. Todo esto hizo que fuera un trámite muy expedito, con una voluntad única para cerrar este caso de forma respetuosa. Así fue como se generaron los trámites necesarios para esta repatriación.

Joane estuvo más de 200 días en el SML. ¿Qué se debe mejorar al respecto?
Ya se dieron pasos importantes. Yo miraría este asunto de ahora en adelante. Esta administración está trabajando arduamente en los temas migratorios y hemos sentido una importante sensibilidad en las autoridades. Se están dando pasos importantes. Las instituciones están hablando de estos temas y, sin duda, se van a agilizar todos estos trámites.

Es importante generar esta coordinación para que las cosas no se entrampen en la burocracia…
La coordinacion institucional es muy importante para generar una red entre ministerios para que estos temas puedan resolverse. Yo creo que lo que hemos hecho es un ejemplo de que las intituciones que nos juntamos a conversar, resolviendo en qué se podía avanzar y en qué no, finalmente decidimos unir nuestros esfuerzos para que esta situación se pudiera remediar. La OIM hizo un aporte económico, junto con el ministerio del Interior, para concretar esta repatriación. Lo bueno es que todas estas instituciones están dialogando y eso es muy importante.

Por supuesto, entendiendo que aún quedan personas en el Servicio Médico Legal que llevan meses allí.
Sí, nosotros quisimos ser muy prudentes, lo conversamos con el ministerio de Justicia, porque esto tiene un costo importante y creo que no sería fácil cubrir una serie de repatriaciones de personas que todavía están esperando allí.

¿Cuáles son los desafíos para evitar que estos casos se produzcan?
Chile seguirá siendo un país atractivo para los migrantes. La migración del caribe, como la haitiana, se ha dado en una proporción importante. Ahora esperemos que los haitianos que están aquí puedan regularizarse e integrarse cada vez más. También esperamos que las autoridades de gobiernos, centrales y locales, puedan trabajar de manera conjunta. Siento que existe una sensibilidad enorme en este momento que no sólo va a beneficiar a las personas de Haití sino a todos aquellos migrantes que estan aquí en Chile.

Ustedes también han realizado un trabajo importante en los gobiernos comunales. ¿Cuéntame cómo ha sido esa relación?
La OIM tiene varios proyectos en Chile, estamos trabajando desde el año 2014 con un programa que se llama los migrantes y las ciudades. Ahí hemos estado trabajando con los alcaldes, las alcaldesas y sus equipos de trabajo. Eso ha permitido un acompañamiento técnico para generar espacios como oficinas de atención a los migrantes. Se ha capacitado personal en las municipalidades. Venimos trabajando desde hace años con los gobiernos locales y ahora lo estamos haciendo con la administración central, a través de diversos ministerios, implementando más acciones concretas en favor de las personas migrantes.

¿Qué sabor te deja toda esta historia que sucedió con Joane?
La OIM lamenta la muerte de Joane Florvil, el doloroso impacto que tuvo para su familia y sus seres queridos en Chile y Haití. La institución que represento contribuyó a un final largamente esperado, para que los restos de Joane puedan descansar en paz en su tierra natal. También en Chile se le hizo una despedida muy sentida. Vimos una iglesia llena y cercana a su familia. Quiero agradecer también a ustedes. El reportaje fue muy importante y es necesario seguir haciendo esos esfuerzos para que todos estemos sensibilizados.