Doris González, dirigenta de Ukamau y el Frente Amplio: “Nosotros no expulsamos a la gente porque piensa distinto”

¿Se sienten identificados cuando desde RD hablan de la “izquierda radical”?

Sí, el Frente Amplio nos ha tratado como “esa izquierda radical”, que, algunos creen que puede ser desechada. Estos personajes pretenden apoderarse del pueblo frenteamplista, del discurso de transformación y, en definitiva, aspiran a transformar al FA casi en una religión, donde no tiene cabida otra visión que la que tienen ellos. Y además lo hacen desde de su zona de confort, mientras el resto del pueblo ve cómo sigue estando ausente de la toma de decisiones del espacio político.

¿Cómo reciben los comentarios de que no convocan mayorías y que RD ya ganó el debate a la interna del Frente Amplio?

Eso demuestra la poca claridad política que tienen algunos niños del Frente Amplio, creyendo que la política nace y muere con ellos. El Frente Amplio cuando hace esta convocatoria amplia y de transformación, a la cual se suman muchas organizaciones que pretendemos construir mayorías; ese es el mandato que nos da el pueblo y la ciudadanía. Nosotros sabemos que al interior del Frente Amplio no existe una postura única, sino que hay diferentes visiones y expresiones. Esa es la riqueza que tiene y esa es la confianza que nos depositó la mayoría de la gente que votó por nosotros y que participa en los comunales del FA. esta postura excluyente ni siquiera es mayoría en RD, sino que la esgrimen algunos personajes que siguen teniendo su cordón umbilical en la Concertación y que pretenden fortalecer esas visiones.

¿En la Concertación?

Sí, algunos quieren transformar al Frente Amplio en una Concertación 2.0, cuando los movimientos que construimos en el territorio, decimos que hay que hacer justamente lo contrario: no hay que volver a las viejas prácticas de la política. La gente está hastiada de que las decisiones se tomen en la cocina de alguien o en la cúpulas y no se democratice el Frente Amplio.

¿Se les ha informado personalmente sobre estos supuestos emplazamientos a dejar el FA a quienes no suscriban a eventuales acuerdos mayoritarios?

Nosotros nos enteramos de estas discusiones a través de la prensa, lo que es un tremendo error porque genera desconfianza. Estas tensiones que existen al interior de una coalición diversa y tiene diferentes visiones, las tensiona aún más. Eso es innecesario y quienes construimos movimiento social, no funcionamos así. Nosotros transparentamos las decisiones, las tomamos en conjunto y no a espaldas de la gente. Nosotros no expulsamos a la gente porque piense distinto, sino que enfrentamos esas diferencias, porque además la fuerza ideológica no se mide solamente estando con los que piensan como tú. Ahí en el debate de ideas y convicciones, es donde se construye política real.

¿Puede un congreso ideológico resolver todas las tensiones?

Yo no creo que un congreso ideológico sea la solución a este tema en particular. Aquí, efectivamente, hay personajes que lo que están haciendo es desde su tribuna tratar de cooptar las posiciones distintas que existen. Casi como desde una figura de pastor.

¿Por qué no tienen representación en la mesa de Frente Amplio?

No nos permiten por ciertos parámetros y requisitos que tiene el Frente Amplio pese a a que podríamos decir que nosotros tenemos muchos más militantes que algunos partidos que sí tienen representación en esa mesa. Somos una organización muy masiva y eso se ve. Nosotros tenemos representación en varias regiones. El movimiento de Pobladores Ukamau también son participantes del espacio Pueblo Libre. Pero a pesar de ser un movimiento muy masivo nos tildan de marginales, para ellos somos desechables y terminamos siendo un bonito número para la foto y para decir que el Frente Amplio tiene pueblo. Pero que siguen pensando que el pueblo puede ser desechado de las decisiones políticas. Y eso es el error más grande que podría llegar a cometer el Frente Amplio. Nuestra construcción en los territorios, es mucho más que algunos partidos que se dicen masivos y tienen la legalidad.

¿Qué perdería el Frente Amplio al perder a esta “ala de izquierda”?

Perdería cualitativa y cuantitativamente. Perdería ese discurso de transformación, porque quienes hablan y escriben en Twitter, se refieren a la democracia, en circunstancias de que lo que quieren hacer es excluir al pueblo, a la izquierda transformadora, a la izquierda popular. Ellos son los anti-democráticos que, construyen desde las cúpulas.

¿Siendo ustedes de esta “ala de izquierda” no les provoca un conflicto trabajar con el mundo liberal en el Frente Amplio?

Para nosotros eso no es un conflicto porque la fortaleza ideológica no se mide estando sólo con los piensan como nosotros. Nosotros no nos hubiéramos planteado estar al interior del Frente Amplio, si el objetivo fuera marginar a los liberales. Por el contrario, tenemos ciertas posiciones en las que estamos de acuerdo y eso es lo que hay que construir. Sin duda que tenemos diferencias en temas de transformaciones, pero nuestra intención siempre ha sido construir con todos lo que están al interior del Frente Amplio.

¿Pero el tema de los D.D.H.H. no es un problema latente?

En ese punto en particular hay visiones distintas. Lo más preocupante para nosotros es que se centre la discusión de los DDHH en otros países y no en lo que ocurre en Chile todos los días. Aquí se violan los derechos humanos de los niños, del pueblo mapuche, en el tema de vivienda. Entonces tratar de llevar la discusión en ejemplos, que incluso están fuera del país, me parece que es un tremendo error. O sea, construyamos en este Chile, el país que queremos cambiar. Si queremos derechos humanos, hagamos que se refuercen acá, donde además tenemos la posibilidad de estar en la institución, de ir modificando este tipo de cuestiones.

¿Es el tema de los DDHH el gran punto de inflexión?

Yo creo que esas declaraciones que han sacado algunos diputados, tienen que ver con la posibilidad de acceso a los medios que no todos tenemos. Y en algunos casos se trata de discusiones que incluso al interior de esos movimientos no representan a la mayoría, particularmente en el Movimiento Autonomista. Gabriel Boric no respeta un acuerdo que tiene con su coalición y sale hablando cosas que en su mismo movimiento no son de la mayoría. O sea, el no está representando la voz del Movimiento Autonomista y del Frente Amplio, sino que lo hace como persona. Y eso es un error, hablar en lo particular cuando tu dices tener la voz y representación de un movimiento.

¿Y en el caso de RD y los liberales?

Yo entiendo la posición de los liberales, porque nunca ha sido distinta. Y claro, es una discusión que tenemos que seguir dando a la interna, viendo cómo se van solucionando esos temas. Y sobre RD, yo no manejo muy bien como va esa discusión, pero entiendo que es una mayoría la posición que plantea Giorgio. Insisto, no es una discusión cerrada dentro del Frente Amplio. Yo siento que es solamente la posición personal de algunas personas y que están tratando de levantar una cierta tendencia, aprovechando este espacio mediático que les da una diputación o cargo. Además es importante decir que este cargo no lo ha obtenido su partido político, sino que lo hizo el Frente Amplio y la diversidad que logró su votación.

¿Se resuelven todas las tensiones al interior del Frente Amplio con la exclusión de quienes no suscriban a las posiciones mayoritarias?

No hay ninguna tensión interna que no sea distinta a las de otra ocasión. Pero esas posiciones están lo más alejadas de transformarse en una coalición democrática. Que nos amenacen por la prensa no resuelve ningún conflicto, al contrario, lo potencia y tensiona. Es un tremendo error que militantes de Revolución Democrática hagan declaraciones como las que han hecho. ¿Qué es lo que nosotros vislumbramos como solución al conflicto? Sentarse a discutir con transparencia con las diferentes organizaciones y movimientos que estamos construyendo. Que no sean los mismos de siempre desde su zona de confort, con su ligazón con la Concertación, los que van a refundar Chile y apoderarse de un movimiento que es amplísimo y no le pertenece sólo a ellos, sino a los que llevamos mucho años trabajando por una alternativa real para el pueblo de Chile.