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Opinión

3 de Octubre de 2013

Tiro de Gracia y su regreso con formación original: “Los vamos a traer de vuelta a su infancia. Vamos a viajar en el tiempo”

Preparando el regreso con la puesta en escena del Ser Humano!, su disco más exitoso, Juan Sativo, Lenwa Dura y Zaturno ya ensayan la reunión esperada por miles de raperos y nostálgicos de los noventa. Dejando las diferencias que los llevaron a separarse, prometen un show cargado de emociones y que hará corear a los seguidores los hits del grupo que masificó el hip hop en Chile. "Un amigo nos decía que nosotros fuimos Los Prisioneros de los noventa y ahora creo que tenía razón. Fuimos la voz de una generación que andaba con el rumbo perdido, pateando piedras", dicen.

Ricardo Ahumada
Ricardo Ahumada
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“Los vamos a traer de vuelta a su infancia. Eso haremos: vamos a viajar en el tiempo”. Esa es la promesa de Juan Lagos, Zaturno, sobre la noticia que tiene a hiphoperos y noventeros nostálgicos pendientes hace unas semanas: el regreso de Tiro de Gracia con la formación oficial de mc’s del disco Ser Humano.

Juan Pincel (Sativo en esa época) asiente con la cabeza y reafirma lo dicho. Él, junto con Lenwa Dura (Amador Sánchez) rompieron con los esquemas a mediados de 1997, lograron el éxito aún siendo menores de edad y transformaron su primer disco en uno de los más destacados cedés de la música chilena. Ahora vuelven a los escenarios el próximo 9 de octubre en el festival Frontera.

“Yo traduzco este retorno de TDG a cuando tú vas al ático de tu abuelita y desempolvas un cassette, lo escuchas y te trae un recuerdo tremendo de cuando erai chico. Hoy en día el computador te baja la canción y listo. Hay cosas que uno valora, que tienen un valor sentimental. Eso es TDG”, dice Juan Pincel, sobre volver a tocar con los amigos que conoció a principios de los noventa en La Florida y que se convirtieron junto a él en los masificadores del hip hop por los rincones de Chile.

Con una presentación que promete reeditar todo Ser Humano!,  incluido en el top ten de los 50 mejores discos chilenos de todos los tiempos según la revista Rolling Stones, los ahora hiphoperos treinteañeros dicen que quieren entregar un show fiel a las raíces del género, para los seguidores de antaño y también para quienes nunca alcanzaron a verlos en vivo.

¿Cómo se gestó esta reunión de los mc’s originales?

Voy al Persa Biobío y me encuentro con este vinilo de Tiro de Gracia, reeditado por EMI junto a otros discos de artistas nacionales de los 90’s, lo que fue una sorpresa muy grata. Cuando pasó eso dio pie a que la gente preguntara ‘¿van a volver? ¿Está pasando algo?’ Entonces nos acercamos nuevamente con Lenwa Dura. Con Zaturno ya veníamos hablando de antes. Y hubo ofertas de distintas agencias de poder hacer esto, ofertas bastante jugosas, las que rechazamos porque quisimos hacer algo a pulso nuestro, algo con la esencia de Tiro de Gracia, que quizás no era lo del Ser Humano!, sino que incluso de mucho antes, del 93, cuando éramos unos pendejos y queríamos reinvindicar el hip hop.

¿Por qué ahora y no antes?

Es que no lo quisimos hacer tan forzado, con esa presión de un estudio tradicional, de querer sacar un disco nuevo. Quisimos hacerlo al estilo más clásico. El show que estamos montando no es nada nuevo, sino que es un show de hip hop clásico, pero con un nuevo aire. Aquí ya no hay managers que nos han perjudicado, o mano de las grandes compañías, si bien es cierto nosotros fuimos regalones de la EMI en algún momento. Después de eso empezamos a velar por nuestra independencia como músicos. Como artistas quisimos potenciarnos cada quien en forma personal y eso vino con la separación del grupo. Cada quien hacía lo suyo, pero en torno a la cultura hip hop, si te das cuenta, en grupos como Wu-Tang Clan se graban discos solistas y luego se juntan para recuperar esa corona del hip hop, que creo Tiro de Gracia bien merecido lo tiene.

¿Qué es lo que tiene Ser Humano! Para lograr esta reunión?

Es un disco mucho más amable, más poético. Lo hicimos más natural, como lo es la vida. Porque naturalmente cuando entras a una compañía hay un poco de censura con que no se puedan decir groserías o cosas así. Pero nosotros nos preocupábamos de que el disco sonara fresco y que fuera un buen catálogo de grandes artistas, que no fuera un bombo y caja de rap tradicional. Quisimos ponerle al disco esa pachanga que necesitaba. Si te fijai, el Ser Humano! tiene reggae, tiene cosas salseros como en Dos Corazones, tiene Sombras Chinescas con un sonido más onírico. El hip hop que hicimos en esa época era lo que sentíamos y lo grabábamos con el corazón. La gente se encargó de catalogarlo después y nos posicionó.

¿Qué recuerdos tienen de esa época?

Para nosotros fue fuerte mediáticamente porque a los dieciséis años ya teníamos triple disco de platino. Íbamos a tocar a todas partes a tablero vuelto. Nos faltó Viña nomás, pero nosotros a todas partes íbamos fieles a nuestro público y nuestros orígenes. Por eso después que tomamos nuestros caminos nunca hablamos mal del grupo, sino que al contrario. Yo seguí mi carrera llevando la bandera de Tiro de Gracia y la historia no se puede borrar. Nosotros, como músicos, hemos dado mucho a nuestra gente y ahora recibir esta respuesta, tanta expectativa por querer vernos, para nosotros es bonito porque nosotros los vamos a traer de vuelta a su infancia. Eso haremos con Tiro de Gracia: viajar en el tiempo.

Volver a cantar los temas por los que se hicieron conocidos.

Claro. Hay canciones que yo no pude cantar más y en algún momento quiero volver a cantarlas en vivo. Y que Tiro de Gracia tenga un bonito final y no que quede una época oscura en nuestra historia sino que nosotros, con el tiempo, y con el Juan y Lenwa pudimos crecer y dar un paso y volver a encantarnos. Y hay oportunidades en la vida. Nosotros hemos tenido más de una y hay que agradecer al público, a la gente que nos sigue y nos mantiene vivos. Ahora vamos a celebrar esos 20 años con lo que falta: mirarnos a los ojos y darnos cuenta que somos humanos y nos equivocamos. El único pecado de Tiro de Gracia en sus comienzos es haber sido demasiado rockstars. Hoy vivimos con más responsabilidad, con más madurez todo esto.

TDG 2013

Desde el año 2000, cuando Zaturno se separó del grupo y emprendió un proyecto con TapiaRabiaJackson y luego como solista, que el grupo no canta en vivo con sus tres raperos originales.

Según Sativo y Zaturno, el nuevo primer ensayo fue como una real meditación. “Estábamos cantando parejo, cada quien colaboraba y lo hacía en las partes en las que tenía que hacerlo. Fue impecable. Yo pensé que íbamos a entrar al estudio e íbamos a pelear todo el rato, pero no fue así. Yo mismo me impresioné de como TDG quiso que ese odio y ganas de explotar se sincronizara y se transformara en música. Antiguamente lo hacíamos tirando mierda pa’ todos lados, ahora es un poquito más organizada y con un buen piso. Tiro de Gracia lo amerita y tiene que recuperar esa corona que alguna vez tuvo”, cuenta Juan.

¿Se sienten referentes? Ustedes son veteranos para la escena, pero grupos como Movimiento Original y la mayoría de los nuevos hiphoperos reconocen en ustedes y el Ser Humano! una fuente de inspiración.

Y ellos son referentes para nosotros también. Nosotros los respetamos mucho a ellos y respetamos a toda nuestra gente que está haciendo música. Yo siempre les doy buena onda. Nosotros con el Juan no teníamos los medios que hoy ahora tienen, de mejor tecnología, y nosotros trabajamos duro en nuestra infancia para que la música fuera una salida. Por mi parte, donde yo crecí era un barrio donde no habían muchas oportunidades de salir adelante, hasta el día de hoy. Hay cosas que están estancadas y pasan 20, 30 años y siguen igual. Ver que hay grupos como Movimiento Original y otros hermanos que tiran mensajes de cosas buenas, porque no todo es malo, es positivo, nos gusta mucho. Somos referentes para ellos, pero nosotros también aprendemos de ellos.

¿Sienten que abrieron un camino al resto de los grupos?

Cuando sacamos el disco en el 97 estábamos catalogados como rock chileno. A la gente le gustó lo que hicimos y pusimos el rap chileno por primera vez como destacado en las tiendas de discos. Con el Juan nos ganamos ese lugar haciendo todo, a pulso desde la nada, nos convertimos en un mejor grupo. Eso, con todo el respeto que se merecen los exponentes del hip hop que son Los Panteras Negras, La Pozze Latina, Los Marginales… que son del underground igual que nosotros. Nosotros salimos con sonidos más frescos y colaboraciones como las de Pedro Foncea o Joe Vasconcellos. Queríamos un catálogo más fresco y lo pudimos lograr.

Son parte del catálogo de grupos fundamentales para entender lo que es ahora el hip hop chileno.

Creo que fuimos importantes porque fuimos un país muy oprimido, castrados culturalmente, y por ejemplo, si Los Prisioneros hicieron la parte más dura, en los ochenta, nosotros fuimos la continuidad de Los Prisioneros. Un amigo nos decía que nosotros fuimos Los Prisioneros de los noventa y ahora creo que tenía razón. Fuimos la voz de una generación que andaba con el rumbo perdido, pateando piedras. Y después de escucharnos dijeron vamos a salir y vamos a cambiar las cosas, no hacer lo que te digan o lo que quiera que hagai tu padre. Eso es TDG también, eso representa. Fue la primera piedra del despertar. Pero principalmente era la música. Si no fuera así, no haríamos discos y estaríamos protestando. Pero claro, si la música no dice algo, no sirve para nada. El hip hop es creativo a diferencia de la balada, el pop, y nosotros corrimos ese riesgo de que nos censuraran, que en la radio no sonara y fuimos valientes y maduros al pensar que la gente lo quisiera escuchar.

¿Qué parte del discurso de TDG es replicado hoy en las calles y qué se mantiene?

Mucha gente se siente identificada con esos temas que tocamos, como el embarazo adolescente, las crisis, de la realidad de América y hoy está en el tapete porque en algún momento se vieron. Como decía Jorge González, eran tiempos odiosos. Hoy, si hablo de otras cosas, como lucas y dinero fue porque en algún momento hablé de pobreza, de violencia intrafamiliar y son temas que siguen estando ahí.

Pero hay cosas que siguen igual, que se repiten como decían.

Es que todavía no hay un stop. Se sigue asesinando, los niños no tienen salud o educación. En este país nos creemos todavía los jaguares de Latinoamérica o europeos hipster y todavía la gente se muere en la fila de un hospital. Te puedes morir si no tienes dinero y después cuando uno hace su trabajo y te pagan por él, que es honesto, de verdad, que estamos entregando un mensaje positivo y nos dicen ‘ah, ustedes cantan por plata’. Si el mundo gira en torno a un papel, imagínate lo frívolo que es eso. Siempre nos quieren poner en una posición. A nosotros nos catalogan así por ir de frente. La verdad siempre duele y eso es que no están acostumbrados a ser frontales o decir las cosas como son. Porque es fácil ser revolucionarios por facebook o twitter o decir cosas, pero nosotros las hacemos. No somos revolucionarios virtuales, somos músicos que entregamos un mensaje. Si toda esa gente que habla hiciera lo que dice, porque son todos unos Da Vinci, todos unos Dalí, el mundo sería mejor. Pero no es así. Nosotros vamos más a la acción que a la opinión.

Panteras Negras dijo que los rapulentos de hoy día son los cabros que van a las marchas.

Tienen toda la razón, sin duda. Creo que el tema estudiantil, el conflicto mapuche se refleja en nuestras canciones. Por ejemplo, en el disco la canción Leyenda Negra, es una cita de ‘Las venas abiertas de América Latina’ de Eduardo Galeano. Eso tiene que estar en las clases de historia, para saber el por qué nos odiamos hoy por hoy y cómo avanzamos.

¿Qué cosas puede esperar la gente del regreso?

Quizás vamos a tener una sorpresa audiovisual y otras cosas. No vamos a hacer nada nuevo. Vamos a restructurarlo de tal manera que se conserve la cultura hip hop dentro de los parámetros. Que no se politice, ni se banalice. Que se note que TDG nació del underground y la gente diga estos muchachos vienen de población y la hicieron y su música es honesta y no quiere engrupir a nadie.

¿Va a haber sorpresas?

Y los temas que la gente quiere escuchar. Con algunos invitados especiales porque la gente va a ir a corearlo, a cantarlo. A escuchar las letras, que son letras que no importa cuántos años hayan pasado. Es como cíclico. Es como Chile, donde todavía hay gente peleando, diciendo si son de derecha o de izquierda. Nosotros no estamos en esos círculos. Nosotros somos espaciales. Nuestra música habla por sí sola y no tiene todas esas trancas, como el arribismo y de diferenciar al pobre del rico. Y vamos a entregar ese show para volver a abrir esas mentes y que nos escuchen las nuevas generaciones. A mí el hip hop me salvó la vida y espero que eso pase también con otros hermanos.

¿Se va a replicar o es una excepción?

Vamos a tirar el boomerang y vamos a ver qué sucede. En el Frontera nos veremos las caras.

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