Suprema ordena investigación contra ministro de Rancagua por acoso telefónico

A pocos días de haber asumido como presidente de la Suprema en enero pasado, el ministro Sergio Muñoz, recibió a una funcionaria judicial en su oficina de iniciales CR. La mujer, hoy casada, reveló que el ministro de la Corte de Apelaciones de Rancagua, Emilio Elgueta, sostuvo con ella una relación extramarital hace unos años, fruto de la cual nació la hija de ambos y que desde entonces la acosa constantemente con llamadas telefónicas y mensajes de texto. Y en circunstancias que  ya no mantienen un vínculo sentimental.

El hostigamiento lo hacía Elgueta desde el teléfono institucional que es pagado con el presupuesto del Poder Judicial.

Muñoz, conocido por su ánimo fiscalizador, envió de inmediato los antecedentes a la Corte de Rancagua, donde se nombró al presidente Fernando Carreño para sustanciar el caso.

De acuerdo a los datos obtenidos por The Clinic Online en la Suprema, la indagatoria está en pleno desarrollo y CR ya designó abogado, quien ha solicitado una serie de diligencias para determinar la responsabilidad de Elgueta.

Llamado y lista 1

Ahora bien, en lo que va corrido de la investigación que lleva Carreño, ocurrió una situación que podría complicar aún más a Elgueta con sus superiores.

Sucede que este último contactó al juez de garantía de la Sexta Región, Marcelo Vásquez Fernández, para que éste presionara a CR, con el fin de que retirara la denuncia por el acoso telefónico.

Vásquez obedeció a su superior jerárquico -quien además lo evalúa una vez al año- e hizo lo requerido: contactó a CR desde su teléfono institucional para que se desistiera de la presentación, tal como consta la denuncia que hizo la mujer a la que accedió este diario.

En el caso también hay otros detalles. Sucede que Elgueta tardó tres años en reconocer a la menor que tuvo con CR y ha cumplido en pocas ocasiones el pago de pensión.

Ahora bien, independiente de lo que resuelva la Corte de Rancagua, el caso deberá ser analizado por el Pleno de la Suprema y en esta oportunidad -debido a la repetición de su conducta- es posible que a Elgueta se le apliquen sanciones más duras. Éstas podrían ser nuevas anotaciones en hoja de vida, suspensión del cargo e incluso la apertura de un cuaderno de remoción.

Lo particular es que Elgueta está en “lista 1 sobresaliente” con un promedio de 6,88, como señala su currículum en el portal del Poder Judicial.

Nunca aprende

El ministro Emilio Elgueta no es nuevo en estas lides. El 27 de julio de 2010 -en un caso distinto al actual- protagonizó un hecho similar, en el marco de una denuncia por violencia intrafamiliar que presentó en contra de su esposa, Alejandra Rebolledo.

En la oportunidad, para evitar la detención de la mujer, contactó telefónicamente al magistrado del Octavo Juzgado de Garantía Luis Avilés con el fin de concretar su propósito, como también al fiscal del caso Matías Moya.

Avilés, luego de recibir el llamado, dejó por escrito el hecho y dio cuenta a la Corte de Apelaciones de Santiago, donde se le inició un sumario administrativo a Elgueta.

La mujer, en todo caso, fue formalizada por el delito mencionado, ya que golpeó al magistrado en el tórax con golpes de pies y puños frente a sus hijos en el United College.

La indagatoria administrativa en la Corte de Santiago fue sustanciada por el ministro Juan Manuel Muñoz Pardo, quien formuló cargos a Elgueta por tráfico de influencias y faltas a la probidad.

Finalmente, la Corte Suprema le aplicó una “amonestación privada” en su hoja de vida.