El profe estrella y la niña profeta

“El fenómeno Maza, sin embargo, es una versión local y en miniatura de unas dinámicas comunicacionales cada vez más dominantes. Basta ver lo que ha pasado con Greta Thunberg, quien durante las actividades de la ONU en Nueva York no dejó indiferente a nadie. Los medios y las masas la adoran —hay claros resabios de fanatismo religioso en quienes enarbolan pancartas con su rostro envuelto en una aureola—, y quienes no se dejan convencer por su discurso o su figura van poco a poco articulando sus críticas”, escribe Joaquín Castillo Vial.