Chiloé, archipiélago de basura: Vertederos municipales no dan abasto

*Por Camila Pérez Soto, Tomislav Tomic y Rosario Velasco Castro.
Esta investigación fue desarrollada en el curso Periodismo de Investigación de la Universidad de Chile, a cargo del profesor y actual editor de CIPER, Pedro Ramírez.

Chiloé es uno de los destinos turísticos más cotizados en el país. Pero, el paisaje verde, rodeado de agua, misticismo y especies nativas contrasta con la contaminación que se esconde en sus vertederos. 

En los primeros días del 2020 la basura estaba nuevamente en las esquinas de Ancud. El olor era pestilente, el zumbido de las moscas y la presencia de algunos roedores se hicieron parte de este nuevo paisaje veraniego, que semana tras semana albergaba una problemática sanitaria de grandes proporciones. Ancud es la puerta de entrada al archipiélago, la primera cara que ven los turistas, y el inicio de una historia sobre malas regulaciones, fiscalizaciones y mucha basura.

El 13 de abril de 2019 se declaró Alerta Sanitaria en la provincia, porque el espacio de disposición final de residuos de Ancud había colapsado y la comuna no tenía un sitio en donde depositar su basura. Este hecho destapó una crisis en torno a los residuos que se estaba gestando hace por lo menos diez años en toda la provincia. 

Con el Decreto de Alerta Sanitaria, comenzó a destaparse una crisis sanitaria en toda la provincia de Chiloé. Hasta el cierre de esta edición sigue estando el fantasma de una solución definitiva para la comuna de Ancud, puesto que, la propuesta de las autoridades es rechazada por las comunidades. Ésta tenía plazo máximo hasta el 31 de diciembre de 2019, para depositar sus residuos en el vertedero Aconser Punahuel, de Aconser Residuos SpA, ubicado en Dalcahue, una macrozona en donde el paisaje se ve coartado por la presencia de siete vertederos. Sin embargo, esta situación es solo la punta del iceberg del problema. 

DESAFIANDO LA NORMA

De acuerdo con el Decreto 189, artículo 62, desde el 2008 los espacios de disposición final de la basura que no cumplan con las exigencias que debe tener un relleno sanitario tendrán un plazo máximo de un año para presentar ante la Autoridad Sanitaria un plan de adecuación. De no presentarlo o no aplicarlo se entenderá que operan fuera de la ley. 

En Chiloé no existe ningún relleno sanitario, solo vertederos municipales y privados, algunos de ellos industriales, que en su momento recibieron residuos de la salmonicultura y mitilicultura (cultivo de salmones y choritos), que son las principales actividades económicas del archipiélago.   

La diferencia entre estos sitios de disposición final es que “el vertedero es un lugar de vertido de residuos solamente, en cambio el relleno es un proyecto de ingeniería planificado para contenerlos”, explicó Maritza Rojas, ingeniera civil química que participó de la elaboración de la Ley n° 20.920, llamada Ley de Responsabilidad Extendida del Productor y Fomento al Reciclaje (REP). 

En la provincia hay un total de diez municipios, los cuales, de acuerdo con el Decreto con Fuerza de Ley n° 725, tienen “la obligación de recolectar, transportar y eliminar por métodos adecuados las basuras, residuos y desperdicios que se depositen o produzcan en la vía urbana”. Si bien en Chile hay administraciones que se encargan de la disposición final por su cuenta, como es el caso de la provincia ya mencionada, generalmente se licitan estos servicios a empresas privadas, principalmente porque no cuentan con la mano de obra o los recursos para poder llevar a cabo tales labores.

Según los datos encontrados en las bases SNIFA y el SEA, además de llamados telefónicos a siete de los diez municipios, se confirman que en el archipiélago ningún vertedero tiene una Resolución de Calificación Ambiental (RCA) vigente.

Las comunas de Quemchi, Quinchao, Dalcahue y Chonchi tenían fecha proyectada para el cierre de sus sitios de disposición final en 2012. Sin embargo, esos puntos se siguen utilizando hasta la fecha. El de Quellón cerró de manera urgente en 2010 y se construyó uno al lado del antiguo. Castro, por su parte, tiene un procedimiento sancionatorio en curso (véase anexo n°1). El 30 de octubre de 2019, la Superintendencia del Medio Ambiente aprobó el programa de cumplimiento del procedimiento sancionatorio (PdC) (véase anexo n°2) que presentó el municipio de la comuna. En este se compromete a subsanar varios puntos, entre ellos el manejo inadecuado del biogás. Según el documento revisado, en julio de 2020 debería estar listo el sistema de chimeneas para evitar la acumulación de gases nocivos, que pueden generar efectos dañinos en las y los trabajadores del vertedero. 

Lucio Cuenca, Director del Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA), destaca que “hay todo un retraso en la aplicación de normas y también de dictación de normas nuevas, y eso claro, ha hecho proliferar todas estas situaciones irregulares que terminan teniendo consecuencias súper negativas para la gente y para el medio ambiente, además, es un problema distinto cuando tú estás hablando de una isla.”

En el caso de Ancud, la situación fue de mal en peor, pues ya en enero se comentaba en el Concejo Municipal (véase anexo n°3) el fin de la vida útil de su vertedero, pero no se mencionó alguna solución concreta. Llegó marzo, y esto se hizo insostenible, había que cerrarlo antes. En abril comenzó el caos, las calles se llenaron de basura, no había dónde depositar, y los contenedores de la comuna rápidamente colapsaron. 

“Los vertederos en Chiloé deberían estar todos cerrados, pero lamentablemente no hay una solución local, ni provincial, nadie quiere cerrar, si no se enfrenta al problema que tenemos nosotros”, dijo el encargado de medio ambiente de la Municipalidad de Ancud, Alfredo Caro. 

ALGO HUELE MAL EN ANCUD

Basura acumulada, riesgo de malos olores, infecciones o aparición de roedores, ese fue el panorama en abril y mayo de 2019 en la comuna de Ancud. Desde que la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Salud declaró Alerta Sanitaria para toda la provincia, ha  llegado un mar de críticas a este municipio. 

Alfredo Caro comentó que el municipio se encuentra en una especie de encrucijada, pues además de estar pendientes del conflicto sanitario, también deben estar atentos a las manifestaciones en torno a esta crisis. La solución que se ha propuesto es la de un relleno sanitario provisorio, en el sector rural de Puntra El Roble, pero las comunidades aledañas se oponen a éste; asimismo, el pago que debieron realizar a Aconser Residuos SpA para poder disponer parte de su basura en el vertedero Aconser Punahuel, en Dalcahue, les generó problemas por los constantes aumentos de precios por tonelada de basura. Sobre esto último es tajante, “Nosotros estamos generando 23 mil toneladas al año, si lo dividimos en 365 son 63 toneladas al día, y cada camión de 19 metros cúbicos hace alrededor de 12 toneladas, por lo tanto, nosotros necesitamos cinco camiones diarios para cubrir lo que genera la comuna. Estuvimos así tres meses y después se nos avisa que se nos va a bajar de cinco a tres máximo, y con tres nosotros cubrimos solamente 36 toneladas diarias, por lo tanto, nos quedan 24 toneladas en la calle y ahí recién es cuando la comunidad se da cuenta de que estamos en alerta sanitaria.”

Aconser Punahuel, es decir, el vertedero que hasta el 31 de diciembre recibió los residuos de la comuna de Ancud, es administrado por María de la Rosa Hermoso, quien comentó que la restricción de camiones a este espacio no fue decisión de ellos, sino que, por el contrario, fue una medida tomada por la Autoridad Sanitaria. A su juicio, la autoridad teme que se repitan las manifestaciones y cortes de carreteras que se produjeron en Chonchi, cuando Ancud comenzó a trasladar su basura al vertedero Dicham.

En la misma línea, María de la Rosa Hermoso señaló lo siguiente: “Hubo días que recibimos siete camiones, ocho, nueve después empezamos a recibir cinco camiones, y ahora sólo recibimos tres, lo cual es una locura para la municipalidad de Ancud, porque producen más basura que eso, yo tengo capacidad de disponer muchos más camiones, pero es la Seremi la que no autoriza (…) Como cada vez me han estado haciendo más exigencias, y cada vez viene menos basura, tengo los mismos costos fijos, ese el motivo por el que se ha subido el costo de disposición.”

El 31 de diciembre de 2019 fue el último día que Aconser Punahuel recibió basura de Ancud. Aunque la misma Seremi de Salud informó a la prensa que lo ideal es ponerle fin a este conflicto de la mejor forma posible, la situación sigue en una nebulosa: los habitantes de Dalcahue ya tienen suficiente con su propia crisis, razón por la cual este vertedero privado ya no recibe la basura de Ancud.El primer sitio que la Municipalidad de Ancud estudió para emplazar un relleno sanitario provisorio queda en el fundo “Los Millanes” en el sector San Antonio de Huelden, de dicha comuna. Este se encuentra cercano a la cuenca del río Huicha y a varias comunidades indígenas.  “La comunidad se opone, obvio. ¿Y por qué se opone? porque puede ser contaminado un territorio completo”, destacó Juan Huentelican, coordinador de siete agrupaciones indígenas del norte de Ancud.

La Estación Biológica Senda Darwin también es vecina de la cuenca del río, por lo mismo acudió el 16 de septiembre al Concejo Municipal de Ancud para exponer los peligros de emplazar el relleno sanitario en ese lugar. El principal argumento es que en el fundo hay 25 afloramientos de agua que tributan en el río Huicha, los cuales se podrían ver gravemente afectados por los residuos. Mariela Núñez, bióloga, doctora en Ciencias Forestales y directora ejecutiva de este centro de investigación, comentó que “las tasas del movimiento del agua son muy altas [esto significa que el suelo es muy permeable y hay mayor posibilidad de que el agua se filtre](…).Entonces todas esas aguas contaminadas van a empezar a fluir a través de todo el territorio, no solo de la cuenca del río Huicha.”

Además, la directora agregó que para estos proyectos se deberían hacer análisis multicriterios, es decir, antes de iniciar estudios de factibilidad, se deberían considerar una serie de variables para decidir qué zona es más apta para un relleno sanitario. 

PUNTRA Y CHEPU

El predio ubicado en San Antonio de Huelden finalmente se desestimó, el Consejo Municipal de Ancud aprobó el día 14 de diciembre en una sesión extraordinaria la instalación de un relleno sanitario provisorio, por cinco años, en el sector rural Puntra El Roble, ubicado al sur de la comuna.  Sin embargo, tras dos semanas sin recolección de basura en Ancud, el día 11 de enero se comenzó a depositar en este lugar con escolta de Carabineros. A pesar de contar con una autorización para operar transitoriamente por un mes, otorgada el 10 de enero por el Ministerio de Salud, desde su inicio, el trabajo en el lugar se ha visto interrumpido, debido a que las comunidades han mantenido las rutas cortadas.

Alfredo Caro confirmó que este espacio de disposición final aún no cuenta con RCA, Declaración de Impacto Ambiental (DIA) ni Estudio de Impacto Ambiental (EIA), y, además, agregó que recientemente solicitaron una prórroga que fue aceptada, para extender la Alerta Sanitaria hasta el 30 de junio del 2020.

Las y los vecinos de los sectores aledaños de Puntra y Chepu, están en contra de que se construya el relleno sanitario y denuncian que no se les consultó a las comunidades si estaban de acuerdo. “Conversaron con la cosa ya hecha, ya decidida”, comentó Adino Melato, vecino del sector de Puntra, quien agregó que presentaron un recurso de protección y seguirán movilizados.

Recientemente se cambió la señalética del “Puente Verde” que queda en el camino de entrada al relleno sanitario. Antes decía que su capacidad máxima era de diez toneladas y ahora es de 18 toneladas. Actualmente están pasando cinco camiones con basura, dos veces al día con 12 toneladas cada uno, más la escolta de Carabineros, todos al mismo tiempo, según reporta la vecindad. 

Se contactó vía telefónica al departamento de Puentes de la Dirección de Vialidad de la región de Los Lagos, dependiente del Ministerio de Obras Públicas, para consultar sobre este cambio en el tonelaje y manifestaron no tener mayor información. Hasta el cierre de esta edición aún no responden nuestros correos electrónicos en donde se le solicitan los estudios o análisis de capacidad de carga del puente en cuestión. 

La situación aún es incierta. Las y los residentes alegan que el terreno es cercano al río Puntra y al río Chepu, considerando, además, que los humedales de la cuenca de este último, fueron declarados recientemente como “santuario de la naturaleza” por el Consejo de Ministros para la Sustentabilidad. “Alternativas hay muchas, pasa por un tema de costos”, expresó Cristian Miranda Bórquez, consejero regional por la provincia de Chiloé (CORE). 

NO MÁS VERTEDEROS EN MOCOPULLI

El olor es envolvente, pero a medida que Roberto Solís avanza entre los matorrales, se vuelve aún más penetrante. Está mirando las fosas del vertedero Corcovado, uno de los tantos sitios de disposición final de residuos domiciliarios e industriales que hay en la comuna de Dalcahue. Las burbujas de biogás, producto de la descomposición, explotan rápidamente en la superficie del agua sucia y a pocos metros un par de patos nadan entre los estanques contaminados. “Antiguamente tú ahí no podías vivir, no podías comer, no podías dormir, tenías que esconderte, no hallabas donde meterte”, comentó Roberto, quien es presidente de la Mesa de Trabajo No + Vertederos en Mocopulli. Él y su familia viven a 500 metros del vertedero Aconser Mocopulli, de Aconser Residuos SpA, y  del vertedero Corcovado, de Agrícola Corcovado Ltda.

La macrozona Punahuel-Mocopulli alberga en su territorio a siete vertederos, dos cerrados, tres abandonados y dos operativos en un radio de 1,5 kilómetros. Corcovado, Aconser Mocopulli, Aconser Punahuel, Resiter de Resiter Industrial S.A, Edisson Bórquez, Ex Edisson Bórquez y el municipal de Castro, son los nombres de estos sitios.

Uno de los vertederos es Corcovado, que estuvo abandonado desde 2012. El tres de julio de 2019 la Superintendencia del Medio Ambiente ordenó medidas provisionales a raíz de la denuncia que realizó el municipio de Dalcahue. Éstas tenían un plazo de 15 días hábiles para efectuarse a partir de esa fecha. Sin embargo, pudimos constatar en terreno, en dos oportunidades, una en septiembre y otra en noviembre, que estas exigencias  no se han ejecutado en su totalidad.

La postura del alcalde de Dalcahue, Juan Hijerra Serón, es no seguir permitiendo este tipo de vulneraciones al medio ambiente, y a su comuna en particular: “Yo creo que la legislación es débil. Me he dado cuenta, ahora que hemos hecho denuncias, que hay vacíos en la legislación. Nosotros hicimos una denuncia contra Corcovado, la respuesta que dio la empresa es vergonzosa, estamos viendo con el abogado municipal de hacer una nueva denuncia, porque no puede ser que les den un plazo para que hagan obras de mitigación”.

Las medidas provisionales a las que hace referencia el edil son la construcción de gaviones para evitar la caída de líquidos lixiviados a la quebrada y afluentes de agua cercanos, además de la impermeabilización de las zanjas de residuos. Estas exigencias actualmente son insuficientes y poco efectivas, razón por la cual el municipio de Dalcahue se encuentra barajando la posibilidad de hacer otra denuncia a Agrícola Corcovado Limitada.

Para corroborar las soluciones de las autoridades, se intentó contactar a la seremi de Salud de Los Lagos, al intendente Regional, y al seremi de Medioambiente.  De los tres, sólo uno de ellos tuvo la disponibilidad para comentar sobre esta situación: Klaus Kosiel, seremi de Medioambiente de Los Lagos, destacó la importancia de fomentar programas de reciclaje en siete de las diez comunas del archipiélago, y además señaló que “la situación que está sucediendo en Chiloé, resultado de décadas de insuficientes acciones en materia de gestión de residuos, requiere del compromiso de todos -gobierno, municipios, comunidad – ya que sólo a través de la co-construccion conjunta de estrategias de reducción y manejo sustentable de los residuos, se podrá cuidar y potenciar la sustentabilidad de esta isla. Asimismo, es de vital importancia que las industrias asuman un real compromiso ambiental.”

Queda abierta entonces la interrogante de si alguno de los demás vertederos municipales de la provincia colapsará también en los próximos meses.