La incomodidad de los fiscales con la llegada de Pérez a Interior

El último episodio de tensión entre el recién nombrado Ministro de Interior, Víctor Pérez, y el Ministerio Público ocurrió hace sólo seis días, el jueves 23 de julio, jornada en que Pérez sostuvo una comentada discrepancia con el Fiscal Nacional, Jorge Abbott en el Senado. 

En esa ocasión, en medio de una sesión especial vía zoom que convocó justamente Pérez junto a Kenneth Pugh, ambos se enfrentaron respecto a las responsabilidades penales de militares que están siendo investigados luego del estallido social. Ahí Pérez acusó a la fiscalía de poser un afán contra las Fuerzas Armadas: “Aquí hay uso de un excesivo afán punitivo del Ministerio Público contra las Fuerzas Armadas” , fueron las palabras del entonces senador UDI. 

Por episodios como ése, en el grupo de whatsapp que poseen algunos fiscales regionales junto al fiscal nacional recibieron ayer con sorpresa, incomodidad y preocupación el nombramiento del nuevo ministro de Interior. Sobre todo porque lo ocurrido en el Congreso la semana pasada no es un hecho aislado. Desde que explotó el Caso Penta en 2014, el exsenador ha sido un sostenido detractor del actuar del Ministerio Público. En septiembre del año pasado criticó duramente a esa institución, a partir de la investigación en contra del exdiputado y hoy secretario general UDI, Felipe Salaberry, indagado por tráfico de influencias luego de protagonizar un confuso incidente de tránsito. “No hay duda que la fiscalía está actuando con un sesgo inaceptable”, dijo esa vez. “La fiscalía en el caso Penta actuó con todo porque era la UDI, y en el caso Soquimich, que era la izquierda, se quedó callada”, agregó Pérez. 

Al interior de las fiscalías recuerdan con temor el historial de desencuentros que protagonizaron en el primer gobierno de Piñera, el exministro de Interior, Rodrigo Hinzpeter, y el exfiscal nacional, Sabas Chahuán. En ese entonces, hubo públicas y cruzadas críticas entre ambos personeros. Se cortaron relaciones al punto de que Chahuán se ausentara de  las reuniones de coordinación que la cartera de Interior organiza mensualmente con policías, fiscales y otros organismos. 

Algunos persecutores contactados por The Clinic explican que este es un “mal nombramiento” para ellos, sobre todo considerando que esa cartera, junto con la de Justicia, es con la que más se involucra el Ministerio Público. La crítica permanente de Pérez al trabajo de fiscales, más esa preocupación que evidencia sobre causas que involucran a fuerzas policiales en estallido social, auguran un trabajo complejo según fiscales, sobre todo en el caso en que se las policías -hoy a cargo del nuevo ministro- vuelvan a enfrentar un rebrote de la crisis social.  

Según explican cercanos a Abbott, él ha transmitido su pesar respecto de las opiniones que Pérez ha manifestado en contra de la institución que dirige. Cercanos al fiscal nacional le han oído decir que esperaría de Pérez una actitud distinta a la que poseía desde el Senado. “Algo así -describe una fuente- como si lo pasado, pisado”. De lo contrario -agrega-, la tensión que ya existía con Pérez como senador podría ser altamente inflamable con Pérez como ministro de Interior.