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Actualidad

10 de Agosto de 2020

El día después de la polémica y las reservadas aspiraciones electorales de Bown

No fue un exabrupto la declaración de la subsecretaria de la Niñez sobre la jueza Donoso y su rol en el caso Ámbar. Su intención era correr el cerco sobre las responsabilidades de los jueces en materias como ésta. Pero se le pasó la mano, explican, cuando se metió a hablar de sanciones e ideología de los magistrados. Aseguran que por ahora cuenta con el respaldo del Presidente y del Ministerio de Interior. Sin embargo, Bown ha manifestado en privado su interés por llegar al Congreso, por lo que salir ahora o en octubre, podría dar lo mismo.

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Una de las primeras llamadas que recibió la subsecretaria de la Niñez, Carol Bown, tras la polémica desatada por sus afirmaciones respecto a posibles sanciones para jueces, fue de la ministra de Desarrollo Social, Karla Rubilar

La exvocera estaba preocupada. Aún no se conocían los alcances de la controversia, luego de que Bown, en conversación con CNN sobre el rol de la jueza de la Corte de Apelaciones, Silvana Donoso, en el caso Ambar -cuya sala dejó en libertad al presunto asesino de la niña en 2016-, lanzara que había que buscar opciones para “sancionar” a aquellos magistrados que, por sus ideas, se transforman en “un peligro para la sociedad”. 

La secretaria de Estado le recomendó a Bown bajar el tono y retroceder lo necesario para no amplificar un conflicto -siempre latente- entre los poderes Ejecutivo y Judicial. Y en paralelo, en La Moneda, se diseñaban las bajadas comunicacionales para desmarcar al gobierno de la polémica. Así fue como hoy, los ministros Jaime Bellolio, Cristián Monckeberg y el titular de Justicia, Hernán Larraín, no tardaron en quitarle piso a los cuestionados dichos. Llegados a ese punto, las especulaciones sobre una posible salida de la subsecretaria crecían. 

Momentos de halagos

En La Moneda reconocen que las palabras de  Bown no fueron un simple exabrupto, sino que un intento por correr el cerco en torno a las responsabilidades de los jueces. Pero se le pasó la mano -agregan-, desde que apuntó a buscar “sanciones” por supuestas “ideologías” de los magistrados.

Sin embargo, no solo reproches llegaban hasta Bown, abogada PUC de 41 años, y militante UDI, criada al calor de la Fundación Jaime Guzmán. De hecho, en los partidos oficialistas RN y la UDI, aseguran que expresaron reservadas felicitaciones y señales de apoyo.   

Porque pese a que públicamente se armó un escándalo que tuvo a Patricia Muñoz, Defensora de la Niñez, como férrea contrincante de Bown en Twitter y TV, en el oficialismo, sobre todo entre los más duros, lo cierto es que existe una generalizada sensación de que a los jueces nadie los fiscaliza. 

Al interior de la segunda línea del gobierno, se ha hecho conocido el anhelo de la subsecretaria por llegar al Congreso. Un asunto que, admiten cercanos y reconocen en La Moneda, ella no piensa reconocer mientras sea autoridad de gobierno”

El propio ministro del Interior, Víctor Pérez -nuevo representante de esa ala en el Gabinete-  no dudó en confidenciar a The Clinic que “Carol Bown ha hecho una gran tarea en la Subsecretaría de la Niñez”. Ambos se conocen hace años, desde los tiempos de asesora legislativa de la subsecretaria. 

Pero Pérez es cauto. Igual como apoya a quien fuera asesora legislativa de su sector durante años, también subraya que la línea del gobierno es mantener separados los poderes del Estado: “Sin duda que el caso Ámbar ha generado mucho impacto en las personas y la reacción de la comunidad está justificada. Pero más allá de los sentimientos de una autoridad de gobierno, aquí lo importante es que el gobierno respeta la independencia de los poderes del Estado. Pero ella puede tener una opinión frente a una determinada resolución judicial”.    

Una opinión que comparten otros personeros del sector, como el diputado RN, Gonzalo Fuenzalida.  “La subsecretaria dijo algo de sentido común (…). Las leyes no le otorgan sana razón y empatía a los jueces, les dan criterios por los cuales orientar su decisión. La subsecretaria apeló a la sana crítica, un elemento que en la ministra Donoso estuvo ausente y, por lo mismo, la vamos a acusar constitucionalmente”. Esto último, en alusión a la veloz ofensiva que levantó el diputado Arturo Longton, pero que en el mundo judicial ven con poco futuro, ya que la consideran esteril y carente de sustento jurídico.  

/AGENCIAUNO

Paso al costado

¿Y la opción de un paso al costado? Desde el gobierno lo descartan. “No creo que Piñera la saque por ahora”, confiesa una alta fuente de Palacio. Y lo dice porque tampoco ha sido un tema que se haya comido la agenda, en medio del creciente conflicto en La Araucanía. 

Según cuentan testigos, Larraín quedó en una situación complicada, luego de los dichos de la subsecretaria, a raíz de una recordada polémica de 2018, cuando el ahora secretario de Estado advirtió, ante un consejo general de la UDI, que la mayoría de los jueces eran de izquierda, lo que debía ser modificado”

Eso sí, tampoco se descarta que la propia Bown prefiera dar un paso al costado si la ola de críticas crece. En lo que sí hay cierto consenso, es que Bown, con sus palabras, logró desactivar una ofensiva en su contra, ante posibles responsabilidades de su cartera en lo ocurrido con la menor Ámbar Cornejo.

De hecho, a eso apuntó directamente la defensora Muñoz a Bown, en un debate realizado por CHV, el domingo. “Su labor de prevenir las vulneraciones a los derechos humanos no ha sido eficiente”, dijo la defensora, a lo que la subsecretaria respondió diciendo que le parecía “curioso que la defensora crea que en dos años”, serían capaces de cambiar la realidad de los niños.    

/AGENCIAUNO

Con quien sí habría sostenido una plática más intensa fue con su “jefe”, el Ministro de Justicia, Hernán Larraín, correligionario en la UDI y de quien siempre ha recibido apoyo. 

Según cuentan testigos, Larraín quedó en una situación complicada, luego de los dichos de la subsecretaria, a raíz de una recordada polémica de 2018, cuando el ahora secretario de Estado advirtió, ante un consejo general de la UDI, que la mayoría de los jueces eran de izquierda, lo que debía ser modificado. Volver a reflotar tensiones con la judicatura es lo último que Larraín querría, aún más si están en juego relaciones en curso. Es por ello, explican, que tanto él como ella salieron rápido a resaltar la independencia de ambos poderes del Estado y a mitigar posibles efectos en el Judicial, siempre receloso de su autonomía.  

De hecho, durante la tarde de este lunes y según consignó La Tercera, Bown optó por enviar una carta al presidente de la Corte Suprema, Guillermo Silva, donde aclaraba que sus declaraciones “las hice a título las hice a título personal y no representan ni gobierno del que soy parte, ni menos al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos”.

Camino al congreso

A la polémica del intenso fin de semana, hay que agregar un dato no menor: las aspiraciones electorales de Bown. Al interior de la segunda línea del gobierno, se ha hecho conocido el anhelo de la subsecretaria por llegar al Congreso. Un asunto que, admiten cercanos y reconocen en La Moneda, ella no piensa reconocer mientras sea autoridad de gobierno. Es decir, como máximo hasta octubre, pues si quiere enfrentar un desafío en las urnas, Bown debiera abandonar su cargo a más tardar en dos meses.             

Por lo pronto, la Subsecretaría de la Niñez se encuentra trabajando en el lanzamiento del protocolo para que los niños puedan salir en esta etapa de la pandemia. Y pronosticado para este miércoles, lo esperable sería que Bown aparezca explicando los alcances de esa normativa en el llamado “matinal del Paris”, el informe diario sobre coronavirus que encabeza el Ministro de Salud, Enrique Paris. 

Hasta entonces, aseguran en Palacio, la subsecretaria sigue con su agenda normal. Y lejos de retirarse de los focos, decidió activar una ofensiva, esta vez no contra jueces, sino contra la marca Hasbro, para denunciar ante el Sernac muñecas con supuesta connotación sexual.   

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