El gas lacrimógeno podría aumentar la posibilidad de contraer coronavirus según estudio canadiense

Un estudio realizado por la Universidad de Toronto, en Canadá, concluyó que los gases lacrimógenos podrían contribuir a la propagación del coronavirus en el mundo, además de especificar su peligro para la salud, por lo que deberían estar prohibidos.

Según información de El Confidencial, no existen muchos estudios de este tipo, pero se destaca uno realizado por el ejército de Estados Unidos en 2014 en el que se examinaron a más de 6 mil reclutas que estuvieron expuestos a los gases. La conclusión principal de ese estudio fue que, los reclutas que estuvieron más expuestos fueron más propensos a contraer enfermedades respiratorias, como bronquitis o gripe.

Con este estudio como base, los científicos canadienses de la Universidad de Toronto demostraron que el gas utilizado contra los manifestantes puede provocar daños en los pumones y hacer que la gente tosa, lo que propagaría el Covid-19.

Además, profesionales de la salud pública de Estados Unidos, mencionaron que los gases provocan una irritación grave en los pulmones, lo que dejaría a las personas más expuestas al virus.

Amnistía Internacional también se ha sumado a las críticas ante los gases lacrimógenos y ha concluido que su uso equivale a la tortura.