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29 de Octubre de 2020Parlamentarios se resisten a pasar la sede del Congreso de Santiago para que opere la Convención Constituyente
Agencia UNO
Desde la mesa del Senado explican que se debe buscar otro lugar para el trabajo constitucional. Legisladores plantean uso parcial del edificio e, incluso, optar por el cercano Palacio Huneeus.
La resistencia es oficial, porque así se lo hicieron saber al ministro Segpres, Cristián Monckeberg: no está zanjado que la sede del Congreso de Santiago sea el lugar donde sesionará la Convención Constitucional. Si bien el gobierno considera dicho edificio como el lugar propicio para instalar a los 155 constituyentes que redactarán la nueva Constitución, en el legislativo discrepan.
“En las conversaciones que yo he participado con el Ministro Secretario General de la Presidencia, le hemos hecho ver que es preferible que haya un edificio autónomo, que esté desocupado y donde puedan estar funcionando todos los días los constituyentes”, explica el senador PS, Rabindranath Quinteros, vicepresidente de la mesa de la Cámara Alta.
A lo cual agrega: “El Congreso de Santiago funciona para el Senado los lunes, jueves y hasta el sábado. Hay comisiones allí, una serie de actividades con la sociedad civil. Nosotros no tenemos ningún problema en ayudar con la dotación pero no es conveniente usar el actual Congreso en Santiago. Eso se lo hemos planteado y el ministro lo ha entendido de esa forma. Como mesa nosotros tenemos esa posición”.
Según las normas de funcionamiento de la Convención Constitucional, de no haber acuerdo sobre dónde funcionará la instancia, será la sede del Congreso de Valparaíso el lugar en que se aloje el trabajo constitucional.
El ministro Segpres explica a The Clinic que, efectivamente, se ha hablado con ambas cámaras, pero que todavía está a la espera de una respuesta oficial.
“Hemos hablado con los presidentes de ambas cámaras, para solicitar como posible alternativa -y que tiene que salir de un consenso político-, la sede del Congreso de Santiago, que creemos cumple con todas las condiciones. Evidentemente habría que hacerle algunas reparaciones y adecuaciones que ya hemos explorado con equipos técnicos nuestros. Estamos a la espera de la respuesta del Congreso”, detalla el ministro.
Desde la Cámara de diputados, el secretario general de la corporación, Miguel Landeros, explica que la decisión aún no está tomada. “Todavía no hemos adoptado ningún acuerdo sobre el particular y esta es una decisión bicameral”, acota.
El diputado PS, Leonardo Soto, profundiza en las observaciones. “Las mesas de las cámaras deben tener reparos para que el antiguo edificio del Congreso de Morandé con Compañía sea utilizado con este objetivo, porque la labor legislativa, si bien tiene lugar en Valparaíso, en los días lunes, jueves y viernes, allí se desarrollan comisiones investigadoras y legislativas. Asimismo, los sábado y domingo se utilizan las dependencias de esa sede del Congreso para fines relacionados con el trabajo legislativo como lanzamiento de libros, encuentros y diálogos de la sociedad civil o seminarios. Sin duda, entregar por casi un año esta dependencia para que sea utilizada exclusivamente por la Convención Constitucional, probablemente va a producir más de un problema de funcionamiento a las cámaras legislativas”, asevera.
En misma línea, el senador Pedro Araya ahonda en las dificultades. “Es complejo que la sede del Senado de Santiago se pueda destinar a la Convención”, afirma, “habría que resolver el tema de dónde funciona el Senado mientras esté la convención”.
A su vez, el senador Carlos Montes (PS) plantea que okey, se podrían ocupar la sala de sesiones, pero no las oficinas. “La sede de Santiago puede ser -dice- ¿pero significa eso que las oficinas también?”. “Yo no entregaría todas las dependencias, sino que establecería la sala de sesiones, más algunas alternativas para que funcionen las comisiones”.
El senador PPD Guido Girardi, en tanto, habla de habilitar un edificio del frente para albergar a los 155 constituyentes y sus asesores. “Hay que generar las condiciones de infraestructura y la sede de Santiago podría proporcionar el salón de honor, pero no tiene la capacidad física de albergar a todos”, dice y señala al Palacio Huneeus, como alternativa.
Por su parte, la senadora UDI, Luz Ebensperger y el independiente, Carlos Bianchi, disienten de la postura de sus pares y explican que el Congreso debe estar disponible para ayudar a la instalación de la convención.
Quienes conocen las tratativas detrás de esta definición, explican que el asunto cruza la Ley de Presupuesto que en las próximas semanas deberá quedar presentada ante el Poder Legislativo. En ésta se deberá considerar el costo de funcionamiento de la convención: “Entre $6 mil millones y $9 mil millones”, revela el ministro Monckeberg. Asimismo, desde el Congreso advierten que podría haber una reducción en sus glosas presupuestarias.
