Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Actualidad

5 de Marzo de 2021

Pasado pisado: ME-O y Alejandro Guillier, la nueva amistad que sorprendió a la oposición

Si bien en las elecciones presidenciales del 2017 se dijeron de un todo cuando ambos eran contendores, desde fines del año pasado han sellado una alianza estratégica para jugar un rol articulador en la oposición, aglutinar a independientes y organizaciones sociales, y llenar la ausencia de liderazgos nítidos en el sector.

Por

“Para quienes se están conectando, decía que antes fuimos adversarios y hoy estamos juntos por la unidad (…) competimos duramente, ahora tenemos cosas en común”, dijo la noche del miércoles 3, mirada fija y rictus sonriente ante la cámara, Marco Enríquez-Ominami, mientras su otrora contendor en los comicios presidenciales del 2017, Alejandro Guillier, se iba conectando al Instagram Live convocado por el ex abanderado del Partido Progresista.


El encuentro virtual fue prueba patente de la alianza estratégica que ha sostenido ME-O con Guillier durante el verano en curso, relación de apariencia fraterna, pero que está a años luz de los ásperos encuentros que ambos tuvieron mientras disputaban los últimos comicios presidenciales.

Elecciones en las que ambos se dijeron de todo. En los archivos y la memoria corta se encuentra cuando, por ejemplo, en un foro de postulantes a La Moneda, Guillier lanzó un breve, pero más que sugerente “cómo entra la plata” al insinuar que la residencia donde el cineasta vive en la comuna de Vitacura, tenía relación con el financiamiento irregular -según trató de explicar el periodista-, mientras desde el público la esposa del aludido, la periodista Karen Doggenweiler, le gritaba “machista”, puesto que es de público conocimiento que esa casa pertenece a la profesional de TVN.

O cuando Enríquez-Ominami, en otro debate organizado por TVN, vinculó la candidatura de Guillier con el narcotráfico, luego de que en ese año se conocieran las narco redes del alcalde de San Ramón, Miguel Ángel Aguilera, edil que por entonces llevaba una militancia de años en el Partido Socialista, colectividad que respaldaba la candidatura del senador por Antofagasta. “Alejandro René”, solía llamarlo Enríquez-Ominami en su hábil capacidad de provocar desde las comunicaciones.


Antecedentes que, sin embargo, fueron guardados en la alfombra del pasado por ambos. Esto, luego de que desde finales del año pasado comenzaran a acercarse para potenciar diversas candidaturas -a Constituyentes, gobernadores, alcaldes y concejales- a partir de un crítico diagnóstico que tienen de las dirigencias de los partidos de la oposición.

La paz del desierto

A comienzos de enero, Guillier y Enríquez-Ominami estuvieron dos días dando vueltas en el Desierto de Atacama, entre Antofagasta y Calama. Allí, en medio de los parajes bucólicos de la pampa, ambos hicieron campaña a favor del candidato a gobernador de Antofagasta, Ricardo Díaz, quien se impuso en las primarias de la oposición con apoyo del PRO y del propio Guillier.


Si bien no profundizaron en la rudeza que ambos protagonizaron en el pasado, se sobrentendió que el tema ya estaba superado. Luego de eso, comenzaron a intercambiar conceptos y concluyeron de que tenían un diagnóstico común que se puede sintetizar en 4 ideas fuerzas:

1) El acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución, si bien habilitó el Proceso Constituyente, fue un error pues le dio un segundo aire al gobierno de Sebastián Piñera.

2)La dispersión de la oposición complejizará el Proceso Constituyente.

3)El debate presidencial de la oposición desvía el foco en lo importante, que es el Proceso Constituyente.

4)Los partidos deben acercarse y dar espacio a los movimientos sociales y el mundo independiente.


Fue así que ambos acordaron redactar un texto que resumiera estas ideas. Entonces, los equipos de ME-O y Guillier estuvieron dos semanas preparando una carta abierta, donde el senador y el cineasta hicieron las correcciones finales. El documento, titulado #OctubreMarcaElCamino, fue difundido en La Tercera y posteriormente en la plataforma Change.Org, donde más de 900 personas han adherido al documento.


“Muchos presidentes de partido nos han preguntado: ¿Qué es esto? Lo leen en código político tradicional. ¿Marco es el candidato y Alejandro es jefe de campaña, o viceversa? Creen que todo es cuota de poder, y de verdad, nosotros no estamos en esa”, asegura a este medio el senador Guillier.

Lo anterior, pese a que fuentes del Partido Progresista también reconocen que uno de los factores que motiva esta alianza, es un presunto vacío de liderazgos fuertes en la oposición, donde Enríquez-Ominami -candidato presidencial en tres ocasiones- ha pretendido jugar un rol articulador, apoyando a diversas candidaturas, además de su constante presencia en medios de comunicación y redes sociales.


Por lo mismo, fuentes del PRO sostienen que la figura de ME-O y Guillier pueden llenar el espacio abierto, con prioridad del mundo independiente, y posicionarse como actores de esa unidad tan esquiva en la oposición. Después de todo, agregan las fuentes, ambos fueron candidatos presidenciales, por lo que ya cuentan con un “clivaje” en la escena pública.

Con todo, Alejandro Guillier y Marco Enríquez-Ominami seguirán haciendo acciones conjuntas. Por ejemplo, la noche del viernes 05 tienen agendado realizar un Facebook Live desde la cuenta del senador, además de una agenda de apoyos a candidatos en regiones que últimamente se vio alterada por los cambios del plan Paso a Paso producto del recrudecimiento de la Pandemia.

Lo que pasó, pasó

Y pese a la bronca que Guillier y ME-O protagonizaron en el pasado, ambos parecen haberlo superado. Se trata de política y sus insondables caminos, tal como lo reconoce el propio Guillier:


“No soy rencoroso y entiendo que la política es así, tiene momentos en que se tensiona, hay diferencias, pero hay cosas superiores. Fue muy dura la campaña y cuando terminó, se pasó todo. Y todas las acusaciones de ese tiempo, ya nadie se recuerda”, dice el parlamentario. “En política hay circunstancias y momentos donde hay que ponerse por sobre las cosas personales o lo que haya ocurrido en el pasado”, agrega.


Y sobre su nuevo amigo, remata. “MEO comparte el diagnóstico que vengo haciendo desde el año pasado. Defendí desde diciembre del año antepasado la participación de los independientes y no me escucharon en el Congreso. Cuando me sumé al movimiento de Octubre, fui bastante coherente y no aprobé ninguna de las leyes represivas del gobierno de Piñera contra el movimiento social”.

Notas relacionadas

Deja tu comentario