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Cultura & Pop

12 de Octubre de 2021

Paula Solimano, artista y curadora nacional: “Todo arte tiene la capacidad de representar a la mujer de una manera diferente”

Archivo personal de Paula.

Paula Solimano habló con The Clinic sobre la relación entre género y arte, entregando además su perspectiva respecto a diversas autoras y autores nacionales que han cuestionado los parámetros patriarcales del arte.

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Paula Solimano (30) es una artista visual y curadora chilena, licenciada de Artes en la Pontificia Universidad Católica de Chile. En conversación con The Clinic, quien también integra desde el año 2015 la agrupación De Facto Colectivo conversó sobre sus actuales y más recientes trabajos, su debut como curadora feminista con perspectiva de género, las artistas que han irrumpido en los “esquemas patriarcalesen la historia del arte, y el impacto que esto generó en el desarrollo de diversas obras.

Sobre esto y más, se refirió la curadora que vive y trabaja entre Santiago y Nueva York, y que, desde el año 2015, integra , una agrupación dedicada al arte.

Paula Solimano.

¿En qué te encuentras trabajando ahora?

-Actualmente estoy co-editando un libro junto a las historiadoras del arte Florencia San Martín y Carla Macchiavello, que reúne ensayos, diálogos y notas de artistas sobre arte contemporáneo y cultura visual en “Within and Beyond Chile”. Una sección del libro reúne voces que debaten sobre arte y ecofeminismo. También estoy preparando dos muestras de las que soy curadora. Una de ellas, Tumbas de la gloria, se inaugura el 14 de octubre y es la segunda exposición individual del artista chileno radicado en Barcelona, Pablo Bronstein. Se trata de una instalación inmersiva que explora las diferentes maneras en que se imponen los relatos oficiales. Apelando a los sentidos y centrando el debate en la cultura material bajo la pregunta: ¿Qué ocurre con los monumentos conmemorativos una vez que su iconografía ha perdido legitimidad y autoridad?

-La otra muestra es una obra colectiva en la Galería Macchina que se titula De bastardismos y apariciones y explora la tradición del grabado en los sesenta años de vida de la Escuela de Arte UC. La exposición reúne a artistas y docentes UC que han utilizado medios gráficos como grabado, fotografía, dibujo y gráfica digital para explorar el tema del origen: el origen como la matriz, el hogar, la infancia. Poniendo a obras, artistas y agrupaciones feministas en el centro. La muestra aborda temas que abarcan desde la maternidad y la labor doméstica hasta el colonialismo y la migración forzada. Me atrevo a decir que esta es mi primera curatoría feminista, la primera exposición que organizo con una fuerte perspectiva de género. Esta abre a mediados de noviembre, un par de semanas antes de Tinta, un encuentro en torno a grabado, impresiones y publicaciones en el Centro de Extensión Oriente.

¿Crees que el arte tiene un impacto sobre la imagen social de la mujer?

-Claro que lo tiene; el arte construye realidad. Desde monumentos conmemorativos y retratos presidenciales hasta fotografías de trabajadoras sexuales, todo arte tiene la capacidad de representar a la mujer de una manera diferente. Si el arte oficial representa a la mujer como una figura pasiva y silente, una escultura expuesta para ser contemplada pero no escuchada, el arte disidente lo contradice: demuestra que, lejos de ser un objeto, la mujer piensa y siente, expresa y actúa. De la misma manera en que el arte puede representar al género femenino de estas maneras muy diferentes, también puede plantear temas de formas opuestas.

¿Podrías profundizar más sobre este último punto?

-Hay obras que imponen su punto de vista sobre qué es ser mujer -tanto en el arte oficial como en trabajos disidentes-, mientras que hay otras obras que invitan a la reflexión, que dan espacio a la ambivalencia. A mí, en lo personal, me interesan las segundas. Me interesan las obras que exponen los conflictos internos que sentimos por adherirnos o rebelarnos a las normas patriarcales; trabajos que expresan la culpa y vergüenza que sentimos al querer o no casarnos, al querer o no ser madres. Creo que el arte más interesante es el que genera un espacio libre y seguro en el que se pueda abordar temas muy complejos.

Mujeres artistas

¿Qué artistas chilenas han intentado o están intentando cambiar paradigmas respecto a la mujer?

-Bueno, se me vienen a la mente artistas como Diamela Eltit, Gloria Camiruaga y Paz Errázuriz, quienes bajo la dictadura se dirigían hacia los márgenes de la sociedad -fotografiando y grabando a prostitutas, travestis, personas con discapacidades- para demostrar que el cuerpo de la mujer en realidad es diverso, fluido, plural.

Obra de Diamela Eltit.
Obra de Gloria Camiruaga.
Obra de Paz Errázuriz.

En la parte final de la entrevista Solimano comenta que “hay mujeres que nacieron como hombres, hay mujeres que nacieron como mujeres, hay mujeres que desconocen la misma categoría. Y bueno, también lo hicieron y siguen haciendo hombres y personas no binarias: desde Pedro Lemebel hasta artistas emergentes como Sebastián Calfuqueo, quienes cruzan temas de género con cuestiones de clase social y raza”.

Obra de Pedro Lemebel.
Obra de Sebastián Calfuqueo.

En la misma línea la artista agrega que “también son interesantes artistas que cuestionan los parámetros dentro de los que la mujer puede hacer arte o los temas sobre los que se puede pronunciar. Pienso tanto en las obras de archivos desclasificados de Voluspa Jarpa o los trabajos de jumpers y delantales de nana amplificados por Ximena Zomosa. Ocupando la manufactura de corte y confección -tradicionalmente relegada a la mujer-, Zomosa crea obras feministas sobre el trabajo invisibilizado y precarizado de mujeres, un tema tremendamente relevante hoy. También se me viene a la mente la serie fotográfica de Beatriz Leyton de comienzos de los ochenta, donde captura maniquíes dentro de negocios dando una sensación siniestra y ominosa, como forma de retratar el ambiente generalizado bajo la dictadura militar”.

Obra de Voluspa Jarpa.
Obra de Ximena Zomosa.
Obra de Beatriz Leyton.

Para culminar -señala solimano- “así como se celebra a artistas mujeres que cuestionan paradigmas retrógrados respecto a su género, creo que también es importante celebrar a artistas hombres que cuestionan modelos patriarcales de masculinidad, aunque sean de otra época. Esto me lleva a nombres como Carlos Flores y Eduardo Vilches.

Obra de Eduardo Vilches.

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