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12 de Agosto de 2009

Los Kirchner usan al fútbol para vengarse del Grupo Clarín

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Por Norman Varas

La historia debe remontarse a las elecciones de junio de este año, en donde Néstor Kirchner postulaba para ser diputado por la provincia de Buenos Aires. Kirchner, que en ese momento representaba al Partido Justicialista (Ex Partido Peronista), debía competir con la gente de Unión-PRO, grupo que reúne al “Macrismo” con algunos disidentes del Peronismo, entre otros. Francisco De Narváez (Unión-PRO) gana las elecciones versus Kirchner, lo que provoca que el ex presidente de Argentina renuncie a la presidencia del Partido Justicialista y termine en su casa llorando la derrota en los brazos de la “Señora K”.
Durante esa disputada campaña, Unión-PRO contó con un aliado mediático de proporciones, el Grupo Clarín, multimedios que maneja al Diario Clarín, Radio Mitre, Canal 13, Todo Noticias y varios medios más, entre los que destaca el Diario Deportivo Olé. Como era de suponer, los dardos en contra de Kirchner y el gobierno eran pan de cada día en los medios manejados por este grupo, lo que generó muchos anticuerpos de parte de los Kirchner.
A principios del 2009, Cristina Fernández anunciaba la “Ley de Radiodifusión”, que entre otras cosas, prohíbe que un mismo dueño tenga canales de televisión abierta y cable. Además, la ley obliga a pasar el fútbol local por televisión abierta, metiéndole un “combo en el hocico” al Grupo Clarín, que tiene todo amarrado para dar el fútbol de primera y segunda división por pago.
Es en este último punto donde las cosas ya tomaron un rumbo que parece definitivo, con la AFA y el gobierno negociando para que el fútbol se transmita por televisión abierta, rompiendo un contrato de muchos años con TSC (Televisión Satelital Codificada, empresa compuesta en partes iguales por el Grupo Clarín y Torneos y Competencias).
TSC les entrega a los clubes 47 millones de dólares por temporada, los dineros se reparten en cantidades mayores para los equipos grandes, disminuyendo los montos para los demás equipos. Durante todos estos años en donde TSC es dueña del fútbol argentino, existe el debate de que el dinero que aporta a los clubes es insuficiente, amparado en las condiciones especiales que Julio Grondona (presidente de la Asociación de Futbol Argentino) les dio desde un comienzo y en múltiples sospechas que involucran al mismo Grondona con los dineros que pasan de un lado a otro.
Los limitados ingresos que aporta TSC a los clubes han facilitado que muchos estén endeudados (independiente de que las malas administraciones también aportaron a la crisis), asunto que explotó en la previa del nuevo torneo argentino, el cual no comenzaría si los equipos mantenían deudas con sus jugadores (8 millones de dólares). Además de eso, hay una deuda bastante grande con Hacienda, que alcanzaría los 80 millones de dólares.
En vista de todo esto, Julio Grondona comenzó a presionar a TSC para que aumentara su aporte mediante un alza en el precio de los abonados al cable, lo cual subiría los montos para los clubes considerablemente y así, estos podrían regularizar, en parte, las deudas con sus jugadores y el estado. Obviamente que TSC no aceptó (amparado en la vigencia del contrato que tienen hasta el 2014) pero si ofreció un adelanto en los dineros equivalente a la deuda total de los clubes con respecto a las platas que deben ser pagadas a los futbolistas, lo que resultaría en el término del conflicto principal y el comienzo del torneo argentino.
Como la solución no iba por el lado de TSC, Julio Grondona comenzó a mirar para el lado y es ahí donde aparece Néstor Kirchner “al rescate” del fútbol argentino (aunque solo le interese la venganza en contra del Grupo Clarín) con una propuesta desde el gobierno de 156 millones de dólares por temporada y 10 años de extensión, o sea, un acuerdo que llegaría a los 1560 millones de dólares en total. ¡Una cosa de locos!
Este nuevo panorama, que duplica los ingresos que aporta TSC, podría incluir al Canal 7 de Argentina (canal estatal), los que se unirían a Telefe (u otra emisora ya que no se descarta a nadie) para poder cubrir la transmisión de los 10 partidos del fin de semana de la Primera División.
La decisión final quedó bastante clara después de las palabras que emitió Julio Grondona al conocer la oferta del gobierno y los reclamos de TSC.
“Si vos tenés un marido que te pega y te da 200 pesos para vivir todo el año y viene uno que te ama con locura a darte lo que quieras, ¿Con cuál te quedás?”.
El día martes 11, la AFA anunció que el contrato con TSC fue rescindido unilateralmente por “incumplimiento de contrato” y que están abiertos a escuchar ofertas para la televisación del fútbol. Además, confirmaron que no existe ningún acuerdo con Canal 7 y que el que ofrezca más dinero de acuerdo a lo que el fútbol necesite, se va a quedar con la televisación.
Julio Grondona por su parte, ya se ha reunido con gente del gobierno (y próximamente con la presidenta Cristina Fernández) para que el acuerdo por la televisación se concrete lo más rápido posible y el torneo comience el 21 de agosto como está planificado.
Desde el otro lado (TSC) solo piensan en demandar, por lo que esta historia tendrá varios capítulos sangrientos en el futuro, donde la AFA ya anunció que está preparada para asumir todo lo que se venga.

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