“Para un creyente el electrón tiene el mismo derecho a ser llamado partícula de Dios”

Marcos Aurelio Díaz se conecta todas las semanas por Internet con su grupo de colaboración del CERN (Centro Europeo de Física de Partículas), el mismo que hizo los experimentos que llevaron a descubrir una nueva partícula que según el director general del CERN, Rolf Heuer, “lo más probable” es que sea la postulada por el físico Peter Higgs, clave para explicar la formación del Universo.

Díaz, PhD. de la Universidad de Californa y profesor de la Facultad de Física de la Universidad Católica en el campus San Joaquín, dio detalles hoy de qué podría significar este gran descubrimiento y de por qué él prefiere que los grupos religiosos le dejen la explicación de la creación del universo a la ciencia.

¿Qué significa en términos prácticos el descubrimiento de la partícula?
– Es crucial que estas partículas elementales, como el electrón, tengan masa para formar el universo como lo conocemos. Sin la masa estas partículas no podrían formar átomos y nosotros no existiríamos. Las estrellas no podrían brillar, el universo sería totalmente distinto. Todas las partículas se moverían a la velocidad de la luz como si fueran, precisamente, partículas de luz. Entonces, considero que este es un momento muy importante, es un descubrimiento que va a pasar a los libros de texto.

¿Pero en qué se puede traducir un descubrimiento así?
– Por ahora, las aplicaciones directas cuesta imaginarlas, vendrán en el futuro. Pero entre las aplicaciones indirectas está la construcción de máquina que estén al borde de la tecnología conocida. En la vida médica, de las formas de curar el cáncer con aceleradores de hadrones o de nuevos métodos de diagnóstico a través de detectores de partículas. Repito: es un momento muy importante para saber cómo funciona el universo y cómo funcionan las partículas que lo componen.

¿Entonces es realmente la llamada partícula de Dios?
– En primer lugar, está confirmado el descubrimiento de una nueva partícula. Se conoce su masa y aproximádamente cómo se comporta. Eso es lo seguro en el lenguaje científico. Ahora, es tan compatible con el bosón de Higgs, asi que en un lenguaje coloquial decimos que se descubrió el bosón de Higgs, pero en un lenguaje más científico aún quedan algunos cabos sueltos. Esos cabos son, por ejemplo, ver cómo se destruye porque esta partícula no vive mucho. Va a haber que estudiar con detalle cuáles son las posibilidades de que se destruya así o asá (sic) y ahí estaremos seguros que es el bosón de Higgs. Ahora, sí es una nueva partícula descubierta.

¿Esta partícula puede modificar las creencias religiosas sobre la creación del universo?
– A esta partícula se le suele llamar partícula de Dios y de ahí supongo que viene la conexión al aspecto religioso. Yo considero que esa manera de describir la partícula más bien confunde. Para una persona creyente en un Dios que creó todo, entonces el electrón tiene el mismo derecho a ser llamado partícula de Dios. Y todas las partículas que hay serían partículas de Dios porque Dios las construyó.

¿Y con el descubrimiento del bosón de Higgs se puede explicar la creación?
– El bosón de Higgs sí tiene implicancias muy profundas en como evolucionó el universo, pero no tiene todavía las respuestas a por qué fue creado. Entonces, en ese aspecto, caeríamos más en la religión porque no tiene las respuestas.

¿Pero podría tenerlas?
– Hay mucho trabajo que hacer todavía para llegar a eso, que es entender el origen del universo.

¿Y con esas respuestas se podría acabar la religión como hoy es conocida?
– Eso basta con ver la historia de la humanidad. La ciencia ha ido avanzando y quitándole terreno a la filosofía y la religión sistemáticamente.

Existen movimientos religiosos que desconocen estos descubrimientos. ¿Qué piensa usted de ellos?
– En general, oponerse al avance de la física o la ciencia por motivos religiosos yo no estoy de acuerdo, pero entiendo que hay opiniones y es un tema delicado. Yo preferiría que se deje a la ciencia avanzar a su paso. Sin presiones, sin restricciones. Pero es un tema delicado y no pretendo tener las respuestas.

¿Usted viaja constantemente al CERN para trabajar con el colisionador de hadrones?
– He estado allá y pertenezco al grupo de colaboración que descubrió el Higgs, si a eso se refiere.

¿Y cómo es trabajar en un lugar así, lleno de científicos? ¿Es un lugar donde realizan explosiones o pruebas nucleares como se cree popularmente?
– Bueno, sí existe esa caricatura, pero en el CERN las cosas son mucho más controladas de como las describen. En todo caso estas colaboraciones son enormes. Tienen en promedio 3.100 físicos en cada una de ellas y el trabajo podría llegar a sorprender. De hecho, me sorprende que funcione tan bien. Todos saben qué hacer, cada uno en su pequeño detalle de todo este experimento que es enorme.