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Mundo

28 de Septiembre de 2011

Modelo de las fiestas de Berlusconi ahora se convirtió en monja

Ania Goledzinowska, de «regalo» salido de una tarta para Silvio Berlusconi a monja en el santurio bosnio de Medjugorje. La exmodelo polaca, que fue novia de Flavio Briatorio y del sobrino del primer ministro italiano, Paolo Enrico Beretta, dejó Italia hace tres meses para recluirse en un convento en la ciudad religiosa y dedicar así […]

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Ania Goledzinowska, de «regalo» salido de una tarta para Silvio Berlusconi a monja en el santurio bosnio de Medjugorje. La exmodelo polaca, que fue novia de Flavio Briatorio y del sobrino del primer ministro italiano, Paolo Enrico Beretta, dejó Italia hace tres meses para recluirse en un convento en la ciudad religiosa y dedicar así su vida al rezo: «Quiero purificar mi existencia».

El nombre de esta bellísima polaca también ha aparecido en las investigaciones sobre las fiestas con menores en Arcore, la villa del «bunga-bunga» de «Il Cavaliere». Era ella, imagen de la casa de moda Chanel, que en una interceptación sugería a Ruby «Robacorazones» poner distancia respecto a Lele Mora, organizador de los encuentros con prostitutas.

«Llevaba una vida privilegiada que ya no me gustaba, quería cosas simples, normales hasta que una mañana llamé a un amigo y le pedí que me ayudara a mudarme definitivamente a Medjugorje o si no, me tiraba por la ventana», señala Ania Goledzinowska en unas declaraciones recogidas por el diario «LaStampa».

La exmodelo añade que se ha ido de Italia «con dos maletas y sin decir nada a nadie. Ahora vivo en una comunidad mariana con monjes y monjas, me despierto a las cinco, recito el rosario escalando el monte Podbrdo y luego voy a misa. Ofrezco mi ayuda a las monjas limpiando las habitaciones y los baños, planchando y cocinando».

«También tenemos un huerto y gallinas. Por la tarde descanso y a las seis tenemos el rezo. Muchos viejos amigos no entienden mi elección pero yo soy feliz así porque me siento amada por Dios y satisfecha por aquello que hago», añade la exnovia de Flavio Briatore y del sobrino de Silvio Berlusconi.

Ania Goledzinowska no echa de menos la vida de lujo y fiestas. Su novio al principio «se quedó en shock por la decisión, pero finalmente lo ha entendido. En tres años es el único hombre que me respetó», confiesa la exmodelo quien trabaja para la asociación «Corazones puros» cuya señal de reconocimiento son los anillos numerados.

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