Secciones

Más en The Clinic

The Clinic Newsletters
cerrar
Cerrar publicidad
Cerrar publicidad

Planeta

9 de Junio de 2013

El fotógrafo que busca retratar “el cuerpo y alma” de los animales salvajes

Vía 20Minutos.es La primera vez que el fotógrafo Takayuki Maekawa (Tokio-Japón, 1969) se enfrentó cara a cara con un animal salvaje, un ciervo, no fue capaz de accionar el disparador de la cámara. Sintió que estaba a pocos metros, compartiendo el mismo suelo, de un ser vivo “que era algo más que un animal, una […]

Por

Vía 20Minutos.es

La primera vez que el fotógrafo Takayuki Maekawa (Tokio-Japón, 1969) se enfrentó cara a cara con un animal salvaje, un ciervo, no fue capaz de accionar el disparador de la cámara. Sintió que estaba a pocos metros, compartiendo el mismo suelo, de un ser vivo “que era algo más que un animal, una especie de alienígena”.

Desde entonces ha aprendido mucho —es uno de los más aplaudidos profesionales de la riquísima escuela japonesa de la fotografía de animales en libertad— y ahora opina de otra forma. Sostiene que los osos grizzly o polares, las águilas imperiales, los leones y los grandes primates que retrata a poca distancia son capaces, como los seres humanos, de posar y mostrar parte de su espíritu cuando son enfocados por una cámara, y ha aprendido que los ojos de los mamíferos y aves que retrata con constancia son “ventanas que dejan ver el interior de sus almas”.

Reverencia por los modelos

Maekawa, que ganó en enero la primera edición del Nikkei National Geographic Photo Prize, expone por primera vez en los EE UU una selección de los conmovedores retratos que ha realizado desde 2000 en África, Asia y América del Norte. La antología, que estará en cartel en la galería Steven Kasher de Nueva York entre el 13 y el 29 de junio, muestra la reverencia que el fotógrafo siente por sus modelos, el profundo respeto con que aborda los encuentros y sus espectaculares resultados.

Las águilas que luchan por un pedazo de carne, el oso que parece dispuesto a esperar por la foto antes de dar el primer bocado al salmón que acaba de pescar, el chimpancé abstraído en el tronco de un árbol o el soberbio dinamismo de la leona que salta sobre un búfalo demuestran la conexión emocional del fotógrafo con sus animales. Los retratos siempre son de una exquisita sinceridad.

Meses de paciencia para hacer una foto

Paciente en grado extremo y contrario al empleo de técnicas de fotografía robótica o con sensores de movimiento como las utilizadas por otro gran especialista japonés, Manabu Mizayaki, que no siquiera está presente cuando se acciona el disparador, Maekawa tarda meses en hacer algunas de las fotos en espera del momento ideal.

Sigue leyendo acá

Notas relacionadas