El cielo y el infierno según Luis Núñez

Luis Núñez pasó del fútbol profesional a la cárcel casi sin escalas. Estando ahí pudo celebrar el título de la UC de 2016, e incluso pudo cumplir un sueño que parecía inconcluso: levantar la copa. Se la llevó al penal, quizás el menos talentoso de sus compañeros de generación pero seguramente por lo mismo el mejor compañero: Cristián Álvarez. “Nos quedábamos en su casa, en La Legua, y esas son cosas que no se olvidan nunca” dijo en esa oportunidad.