Los expatriados de Bangladesh

Bangladesh está viendo el regreso de cientos de trabajadores migrantes cada día a medida que la recesión mundial golpea una economía que depende de las remesas.

Hay más de seis millones de ciudadanos de Bangladesh que trabajan en el extranjero, muchos de ellos en zonas afectadas duramente por la recesión. El año pasado enviaron a casa 9 billones de dólares, que es más de lo que lucra cualquier otra industria en el lugar.

Ya se han visto afectados duramente. Malasia, por ejemplo, el mes pasado canceló el visado de cincuenta mil trabajadores de Bangladesh, ya que el empleo, el poco empleo que hay, está reservado para los locales.

Para graficar los problemas de manera clara, es cosa de ver la zona de arribos en el aeropuerto de la capital de Bangladesh, Dhaka.

Hay gente, sin embargo, que se niega a volver. Se niegan a ver que el sueño de regresar a casa como hombres ricos haya muerto para siempre. Pagan hasta tres mil dólares en agencias para que les consigan un trabajo, pero nada da frutos. El problema es que la economía del país entero se basa en sus trabajadores expatriados. La mayoría de ellos en el Golfo, Malasia, Estados Unidos y el Reino Unido, todos lugares afectados por la crisis económica mundial.

Hasta ahora el gobierno dice que sólo unas 300 personas están regresando cada día. Pero todo el mundo en Bangladesh tiene miedo de que pronto esos números suban.

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