La dimensión desconocida en la detención de Matías Vega

Durante la semana pasada el conductor de Caído del Katre, Matías Vega, fue detenido por andar con 27 gramos de marihuana y formalizado por microtráfico. Según el Subcomisario de la Brigada Antinarcóticos, Mauricio Jorquera, con este operativo se desbarató una importante banda criminal que se paseaba, además, con 270 mil pesos en efectivo. Jorquera aseguró,  también, que Vega había reconocido su participación en el delito ya que pronunció dos palabras: “fue un error”, frente a los medios de comunicación. El abogado del ex Tigritos, Rodrigo Nuñez, señala que este tipo de interpretaciones “son peligrosas” y responden a que en estos casos mediáticos, hay muchos “egos involucrados”.

La historia de la detención es así. El miércoles pasado Matías Vega se dirigía a un funeral. Pasó a buscar a un amigo y una cuadra después un control policial lo pilló con más marihuana de lo que se estima podría ser para uso personal.  Entonces se  lo llevaron detenido. Al cuartel de la PDI -oficialmente nadie sabe cómo ni avisados por quién, aunque todos saben cómo funciona la cosa- llegamos los medios de comunicación para tener la exclusiva del conocido conductor de radio saliendo esposado. Vega atinó a decir “fue un error”, frase que según investigaciones es un reconocimiento de culpabilidad. El asunto dio que hablar: días antes, Pablo Mackenna también había sido detenido por presuntamente abusar de una menor, algo que no sucedió y la batahola fue similar, aunque con Mackenna la presunción de inocencia sí funcionó. El asunto es que sangre famosa vende.

Pero si en la farándula es posible especular, para investigaciones el estándar debería ser un poco más alto, apunta Núñez, porque que la PDI estime que una frase suelta es una confesión del ex de Camila Nash es, a lo menos, un exceso. “Matías no estaba reconociendo culpa alguna” afirma el abogado respecto de la investigación que  la policía desarrolla hace meses a través de escuchas telefónicas y que según Jorquera permitió desbaratar una “banda criminal compuesta por tres sujetos que se dedicaban a la venta de marihuana y la obtenían de un cultivo indoor que tenían en dos inmuebles”.

El abogado de Vega, que también fue defensor en el caso de Camilo Huerta, Félix Soumastre y Francisco Barrena, señala que “en este tipo de casos todo es interpretable. Lo peligroso es que las policías no pueden encabezar ese juego. Matías no reconoció nada en esa frase”.

“Fue un error de Jorquera asumir una confesión que no es tal. Creo que se equivocó el funcionario y los nervios, la presión de la prensa, lo llevaron a eso, lo quiero interpretar así. No quiero creer que lo haya dicho en forma irresponsable. No creo que lo haya tomado como una declaración judicial, y menos con la experiencia que tiene en este tipo de casos. Eso no es una declaración judicial”, asegura.

Para Núñez, estas equivocaciones suceden porque en estos casos mediáticos, “nadie se quiere equivocar, ni el fiscal, ni las policías, ni ustedes, los medios. Y claramente aquí cuando salen personajes conocidos, reviste otras características el tema, es una dimensión distinta. En el caso Yingo o en el caso de Matías, las policías quieren que figure más el asunto, quieren darle más importancia, quieren quedar bien ante el fiscal o la autoridad pertinente. El fiscal también quiere quedar bien con la investigación y ciertamente en un inicio este tema puede ser una bomba, pero cuando sale el humo, nos damos cuenta que es algo muy pequeño”. De hecho, en el caso de Yingo la pena más alta fueron dos condenas de 61 días con el beneficio de pena remitida por microtráfico y cultivo.

La detención pública

Además del impasse con el Subcomisario, cercanos a Matías están molestos con la atención que la misma PDI le ha dado al caso, al pasearlo frente a las cámaras. Frente a esto, Núñez señala que el daño a la imagen de Matías ya está hecho. Tal como en su momento le pasó a los ex chicos Yingo: “el capital de todas estas personas que son mediáticas es la imagen y sin duda que se ve golpeada. Además agrega que estas situaciones afectan “a su persona, a su prestigio, a su trabajo y su familia”. De hecho, desde el primer momento de la detención de Matías su familia salió en su defensa a través de un comunicado emitido por su hermano en el que declara que Matías “es objeto de esta circunstancia por haber estado acompañado en su auto de una persona que sí portaba esa cantidad de droga en sus pertenencias y que era sujeto de una investigación, cuestión que Matías ignoraba completamente”.

En estos momentos, Matías se encuentra en libertad con firma quincenal por los 120 días que durará la investigación. Para no entorpecer la investigación, Vega no se encuentra dando declaraciones y lo último que dio a conocer en su cuenta de Twitter es que se tomó unos días de vacaciones antes de volver a su programa en Radio Carolina.