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Poder

29 de Marzo de 2014

Alberto Espina y Hernán Larraín quieren que en la oposición sean todos “amiguis” para ser alternativa de gobierno

Los senadores Hernán Larraín (UDI) y Alberto Espina (RN), realizaron un llamado a que la oposición se una en el trabajo legislativo para abordar las propuestas del gobierno de Michelle Bachelet en temas de educación, constitucionales y tributarios. Además esperan estár alineados para preparar un eventual regreso de la derecha a La Moneda.

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Los senadores Hernán Larraín (UDI) y Alberto Espina (RN), realizaron un llamado a que la oposición se una en el trabajo legislativo para abordar las propuestas del gobierno de Michelle Bachelet en temas de educación, constitucionales y tributarios.

Al respecto, el legislador de la UDI manifestó que “la unidad de la oposición en el Congreso y en general en al ámbito político en estos días, será la base del próximo gobierno que esperamos liderar. Sin oposición articulada no vamos a poder fundar una alternativa de gobierno. No queremos que el gobierno comience a dividir las fuerzas de la oposición y a negociar con uno o con otro, queremos que lo haga con interlocutores válidos que representan a las bancadas de la oposición en el Senado y en la Cámara (Baja)”.

En tanto, el senador de RN precisó que “llegó la hora de terminar con las lamentaciones y recriminaciones en la centro derecha, porque vienen desafíos muy importantes para quedarnos pegados en críticas respecto de los errores que se pueden haber cometido y que por supuesto significaron, no obstante de haber hecho un buen gobierno, el perder la elección presidencial y tener una derrota en las elecciones parlamentarias”.

En el mismo ámbito, Larraín agregó que “un llamado a la unidad no excluye a nadie. Todos los que creemos que es necesario construir una sociedad libre de oportunidades, necesitamos unirnos como oposición, para crear una nueva institucionalidad que sea alternativa de gobierno. Aquí no sobra nadie, necesitamos sumar más grupos y ojalá que no solamente podamos incluir en el ámbito del trabajo legislativo a Evópoli y Amplitud, sino que también a Democracia Regionalista que lidera Antonio Horvarth y cualquier otro grupo que quiera, de manera independiente, sumarse a las banderas de nuestro sector”.

Espina en tanto sostuvo que “este llamado también lo queremos hacer extensivo a los movimientos que han ido surgiendo en la centro derecha este último tiempo, porque buscamos la mayor amplitud posible y tener la capacidad de conformar una coalición mucho más amplia de la que hemos tenido en el pasado”.

REFORMA TRIBUTARIA

En la ocasión y producto de los requerimientos de los periodistas presentes, ambos legisladores de la derecha se refirieron a la reforma tributaria. Según Larraín está la disposición por parte de su sector para debatir en este tema, aunque advirtió que estos cambios no pueden poner en riesgo el crecimiento económico, la inversión y la generación de empleo.

“Este es el test de la blancura que debe pasar la reforma tributaria. Que no afecte el crecimiento económico, porque sin él, el país no puede avanzar en superar la pobreza, ni la desigualdad. Que no afecte las inversiones, porque debilita la capacidad de entendimiento, y que no afecte la generación de empleo, porque si le toca el bolsillo a las pymes vamos a tener un futuro muy negro que ya se empieza a sentir por las amenazas y la incertidumbre que una reforma demasiado profunda, demasiado costosa puede significarle al país”, expresó.

Sobre la discusión particular de la eliminación o reducción del FUT, dijo que, “si lo van a reducir o cambiar por otro mecanismo, estamos llanos a discutirlo. Lo que nos parecería muy mal es que, simplemente, se suprimieran incentivos a la inversión en el ámbito de las empresas, sin que hubiera mecanismo de reemplazo para garantizar que ese objetivo se cumpla”

Por su parte, Alberto Espina dijo que “nosotros estamos muy atentos a la reforma tributaria, porque los impuestos son un instrumento de los cuales los gobiernos pueden disponer con el objeto de poder colaborar y a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Debemos escuchar la propuesta de cuáles son sus alcances. Si el gobierno demuestra con seriedad y responsabilidad que los recursos de la reforma tributaria van a hacer bien gastados, para mejorar la calidad de la educación en nuestro país probablemente cuente con toda nuestra colaboración, en la medida que esa alza de impuestos no afecte ni dañe a la pequeña y mediana empresa que son el verdadero motor de desarrollo de un país”, concluyó.

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